La verdad todavía sigo pensando como no me pude dar cuenta antes que mi vida era una vil mentira. Hace tan solo una semana atrás, yo creía que tenía todo lo que deseaba.
Mi nombre es Isabella, pero prefiero que me llamen Bella. Solo mis padres me llaman por mi nombre completo para regañarme.
Bueno, volviendo a mi triste realidad, mi vida apesta y lo peor es que no hago nada para cambiar mi situación. Mi novio que se decía ser perfecto resulto ser el mejor impostor y el más hábil manipulador.
James o Jamie, como lo llamaba la perra de Jane (secretaria y amante a tiempo completo), era el novio que toda chica deseaba. Hermoso, rubio con unas facciones delicadas adornadas por unos fascinantes ojos azules. Para mí fue amor a primera vista y me enamore, en realidad "creí" enamorarme en ese momento. Estaba en una cafetería en Seattle con mi usual copia de "Orgullo y Prejuicio" perdida en la historia cuando siento alguien observándome. Efectivamente, James estaba al frente mío sonriéndome de una forma que debería ser considerada ilegal.
"Disculpa, ¿necesitas algo?" le pregunte curiosa, ya que no entendía como un hombre como él podía estar ni siquiera considerando hablar CONMIGO.
"Hola, me llamo James. Y solo quería decirte que eres la mujer mas hermosa que hay en este lugar y seria un honor para mí poder llegar a conocerte" dijo tan seguro de si mismo.
Y así comenzó nuestro cuando de hadas. Yo pensaba que era el hombre de mi vida, mi príncipe azul, la luz de mis ojos. Bueno creo que entienden el mensaje.
Seguro se preguntan y ¿Cómo es que llegue a este punto de mi vida?. Tan solo con 22 años me di cuenta cuan corta puede ser la felicidad y cuan cruel puede ser la realidad. Todo sucedió cuando tome el celular de James para llamar a su hermana Rose, al intentar marcar su número sin querer abrí la casilla de mensajes de texto. No me pareció raro de dos o tres mensajes de Jane, ya que era su secretaria y mano derecha.
Lo que sí llamo mi atención fue un mensaje con una imagen enviada por la mismísima Jane en donde ella aparecía como dios la trajo al mundo y el asunto decía "¡Líbrate de la perra!"
O sea ahora me llamaba perra, la verdad no tan lindo apodo. El momento en que leí el mensaje, tantas cosas pasaron por mi mente y tantas preguntas sin respuesta. El error que cometí y estoy cometiendo es vivir en el engaño. Callarme la verdad y ver como mi vida pasa y yo con una venda en los ojos.
Antes de pasar por toda esta situación, la Bella de antes hubiera hecho una gran escena al estilo Bridget Johnes y luego por supuesto en mi solitaria habitación me habría emborrachado hasta dormir.
Lamentablemente, ahora solo quedaba la sombra de esa Bella. De pasar a ser independiente y fuerte, me convertí en la "sombra" de James. Por supuesto, ahora me encontraba perdida y vacía. Solo actuaba por inercia.
Me había transformado en una experta farsante y mi sonrisa parecía tan verdadera que a veces me asustaba.
Como todos mis patéticos días, me encontraba mirando por la ventana mientras James dormía placidamente, cuando de repente un sentimiento tan olvidado resurgió en mi interior. Esperanza.
¿Qué sucedería si dejo mi triste vida atrás?
