South Park es propiedad de Trey Parker y Matt Stone. Yo solo los tomo prestado para mis cuentos pendejos.
Not alone.
Canción: Dead hearts - Stars (No tiene mucho que ver con la historia, pero es muy bonita y la escuché mientras re-escribía).
― Estoy solo... ― Stan susurró en medio del extraño silencio y la nieve que envolvía al lago Stark Pond.
Unos pasos parsimoniosos y cansinos llegaron a oídos de Stan, interrumpiendo el silencio.
― No, no lo estas, ― Contradijo una voz suave y masculina a su lado. Stan cerró los ojos e hizo caso omiso a las palabras que golpeteaban en su cabeza y los cálidos brazos que lo envolvían. ― Yo estoy aquí, Stan.
Sus palabras fueron la gota que derramó el vaso. Contrajo sus músculos furiosamente y sin permitir a su cerebro procesar la situación, comenzó a soltar un vómito de palabras.
― ¡No, Kenny! ―Explotó ― ¡Nadie está aquí para mí! Kyle se fue, Wendy me remplazó, mis padres se separaron, los chicos me dieron la espalda, y tú...
Su voz culminó en un hilo, y finalmente se quebró. Se quebró en pedazos entre los brazos de Kenny.
Las lágrimas bañaban sus mejillas, deseando que ello pudiera sanarlo. Pero al contrario. Lo quemaba.
Lo sofocaba. Comprimía su pecho y lo asfixiaba.
― Stan... ― Kenny lo miró expectante cuando el chico del pompón rojo lo aparto fuertemente, tirándolo en la nieve. Stan cayó a su lado, deseando fundirse con la nieve. ― Tengo algo para ti.
― A menos que sea una nueva vida, no lo quiero.
― Es un regalo, idiota. ― Stan suspiró.
Kenny rebuscó en el fondo de su bolsillo y sacó una pequeña tiara de flores.
― Oh no. Eso es muy gay. ―Kenny rodó los ojos.
― No más que tú, Stanny.
El rubio se puso de pie con dificultad. Miró a Stan con una chispa en sus ojos, haciéndolo refunfuñar y enderezarse también.
― Esto ― empezó Kenny, colocando con cuidado la tiara en la cabeza de Stan ― es un objeto muy especial. Lo usé cuando jugaba a ser una princesa. Pero ahora es tuya, consérvala. ― Lentamente, la voz de Kenny empezaba a sonar lejana. Stan se aferró a su pecho, queriendo evitar lo inevitable. ― Es una muestra de que no estás solo, Stan. ― Poco a poco el cuerpo de Kenny empezó a desvanecerse, hasta volverse un borrón naranja y desaparecer.
Lo último que vio Stan fue la radiante sonrisa su amigo.
Estático, mirando a la nada, el sol empezó a salir de entre las montañas, al mismo tiempo que lágrimas corrían por sus mejillas.
Reparó en una bufanda marrón enterrada entre la nieve. La tomó delicadamente entre sus manos, como si en algún momento fuera a desbaratarse, y la envolvió al rededor de su cuello, permitiendo que su nariz aspirara su olor y lo embriagara.
Sonrió ampliamente al horizonte, no había podido despedirse, pero en el fondo siempre estaría agradecido. Y Kenny lo sabía perfectamente. Donde sea que estuviera ahora. Pasara lo que pasara y tomara el tiempo que tomara para volverse a encontrar, al menos Stanley ya no se sentía tan solo.
Este es un fanfic viejo, el primero de South Park en realidad, pero jamás me animé a subirlo porque no me gustó cómo quedó. Hasta ahora. Y sí, ultra gay con eso de la tiara, pero ya saben lo que dicen: "eres lo que escribes" o algo así.
Esto no es un stenny, es más amistad si se dan cuenta (omitamos el momento gay de la tiara floreada), pero pueden intepretarlo como quieran.
Por cierto, la idea original no es mía. Tomé inspiración de una imagen hermosísima en DeviantArt (si alguien quiere verla, pídeme el link por mensaje privado).
-Fack.