Que pena que hay tan pocos fics de RO…

Por desgracia mi amado Pharaun Mizzrym no me pertenece.

Ah y Ryld tampoco.

Ryld pensó antes en Pharaun, su traidor amigo que en Halisstra, su amada, cuando vio que su espada mágica Tajadora estaba rota, cuando sintió que sus fuerzas flaqueaban y que sin su espada estaba perdido.

Pharaun, en su mente se gritó mil cosas para que su cuerpo reaccionara, pensó mil palabras mágicas que le pudieran ayudar, pero nada hacía que pudiera volver a moverse. Estaba paralizado, tirando en el suelo esperando que Quentel Baerne, le salvara de su parálisis. Cuando Quentel le dijo que ya no servía, Pharaun sintió que iba a morir, cuando Jeggred saco la lengua pensando en comerse su corazón como había echo con el de Ryld, Pharaun hizo un último esfuerzo por poder moverse, cuando Danifae no dijo nada a su favor, Pharaun pensó que ojala estuviera a Ryld a su lado.

Tirado en el suelo, con el corazón fuera de su pecho, más exactamente en la mano de Jeggred, Ryld pensó que todo era culpa de Pharaun o de Halisstra o podría ser que él no fuera un drow como la Diosa manda. Pero antes de respirar, en el segundo exacto que Jeggred dio el primer mordico de su corazón Ryld pensó que si Pharaun no lo hubiera traicionado esa vez, su amistad no se hubiera enfriado, que si Pharaun no hubiera protegido a Danifae y a Halisstra en Ched Nassad no le hubiera empezado a atraer Halisstra, que si cuando Halisstra le propuso irse juntos aún fuera amigo de Pharaun él no se hubiera ido, que si ahora estuviera con Pharaun no habría muerto.

Ryld Argith se lamentó de no haberle perdonado su traición a Pharaun, se intento acordar de todas sus aventuras pero el mundo ya empezaba a desvanecerse…

Pharaun hubiera maldecido, gritado, atacado… Todo para no estar ahora en los brazos de Jeggred, yendo hacia su perdición, hacía las arañas que lo devorarían. Jeggred lo dejo en el suelo y se fue, mientras las arañas se acercaban como un manto rojo con hambre, Pharaun pensó que si no hubiera conocido a Ryld hubiera muerto hace mucho, pensó que si no lo hubiera traicionado seguirían igual que antes y que él no se hubiera con Halisstra, también pensó que si Danifae no lo hubiera engañado a él Ryld seguiría vivo y a su lado.

Lo último que pensó Pharaun Mizzrym antes de que las arañas se le echaran encima fue que si su amigo Ryld estuviera ahora con él no permitiría que Quentel le hiciera esto.

-Lo abandoné todo por ti.-le recriminó Ryld a Halisstra antes de irse con Lloth. Pensó de nuevo en Pharaun y se supuso que Halisstra también pensaba que era por él esa frase. El deseo de Ryld antes de irse para siempre fue que nunca se tuviera que encontrar con Pharaun como un espíritu.

Una vez Pharaun dejo de sentir el dolor y se fue hacía los Dominios de Lloth con todos los demás muertos esperó encontrarse a Ryld y que lo recibiera bien. Por que su hermana Greyanna ya le había dado su particular bienvenida y necesitaba alguien con quien bromear.

Cuando Pharaun se acercó a Ryld y le palmeo la espalda, de verdad sintieron como si nunca hubiera pasado, como si no se acordaran de nada desde antes de que Pharaun intentara conjurar a Sarthos, como si aún fueran amigos. –Es que aún somos amigos-Pensó Ryld –Al menos con Ryld no me volverán a matar ya muerto-Pensó Pharaun, por que él aunque sabía que lo hacia, nunca admitiría que apreciaba a Ryld.

-Buenos días Ryld. ¿Sabes cuanto vamos a tardar en llegar a nuestro nuevo paraíso?

Ryld sonrió, Pharaun se había disculpado a su manera con sus palabras.

-La verdad es que no, pero seguro que tú y yo juntos podemos abrirnos paso.