Estarás conmigo? Siempre
Era de esas noches. Harry lo sabía. Lo supo en cuanto se fue acostar.
Dio vueltas como loco, pero no conseguía dormir y lo peor es que no lo sabía porque estaba cansado. Sus ojos le pesaban, pero sin embargo al cerrarlos no conseguía dormirse.
Al cabo de un tiempo, se dio cuenta de que era completamente inútil, pues no conseguía dormirse. Tomó el reloj de su mesita de luz y vio que eran las 1:30 de la madrugada.
Sintiéndose peor ya que sabía que al otro día no habría quién pudiera levantarlo, bajo a la cocina en busca de comida (que quizás fuera el hambre, el que no lo dejaba comer).
Bajo las escaleras de su casa y se dirigía hacia su cocina cuando sonó el timbre de su casa. Eran la 1:30 de la madrugada ¿Quién rayos iba a ser? Desconfiado se dirigió hacia la puerta y sin abrirla dijo:
-Si? Quién es?-Dijo Harry con la mano en el pomo de la puerta, aún cerrada.
- Soy yo Harry- Esa voz. Se oía débil y temblorosa. Abrió de inmediato la puerta, dejando entrar a una Hermioni con la cara empapada y ojos rojos e hinchados producto del llanto. ¡Llanto!. ¿Por qué había llorado?
-Hermione? Qué te ha pasado? – Dijo Harry que ni bien terminó de cerrar la puerta corrió hacia ella, colocándose frente a ella con expresión de ¿Preocupación? ¿Tristeza? ¿Enojo? Tal vez era todo.
-Yo…se que no debería haber venido a estas horas Harry, lo…lo lamento- Se pauso y miro a Harry, quien se apresuro a decir que no tenía que disculparse con el por nada- Pero….he discutido con Ron y no…no sabia donde ir, y vine aquí …de verdad lo siento.
-Oh..Hermione –Dijo Harry viendo que ella comenzó a llorar- Ven aquí-Dijo dulce y suavemente, mientras extendía los brazos para que un minuto después, Hermione se colocara entre los brazos de su amigo- Tranquila…shhh…todo pasará , ya lo verás!, No tienes que ponerte así- dijo pausadamente al ver que Hermione respiraba entrecortado gracias al llanto
-Harry, siento que tengas que verme así pero la verdad es que no quería estar en casa-Dijo ella limpiándose las lágrimas.
-No tienes que disculparte de nada, princesa- Dijo acariciando suavemente su cabeza- somos amigos, y puedes venir sin avisar cuando se te antoje.
Al pasar unos minutos, teníamos la imagen de Harry y Hermione sentados en el sillón viendo la tele. Hermione tenía su cabeza reposando en el hombro de Harry con unos ojos agotados y aun un poco hinchados.
-Harry?-Dijo Hermione susurrando
-si?- giro para mirarla – que pasa?
- Gracias por estar conmigo- Dijo ella dulcemente
-siempre estaré contigo, Hermione – Dijo el depositando un fugaz beso en su pelo
Tal vez la gente podría pensar que una chica con el pelo desaliñado y ojos hinchados no era la imagen mas bella pero allí estaba con sus mejillas levemente rojizas, apoyadas en su hombro y para Harry, ella era lo más lindo que había visto y siempre estaría para ella, aunque ella no supiera lo que el sentía cuando la veía mal, ni como adoraba abrazarla. Mientras ella supiera que el estaría con ella siempre le bastaba.
FIN
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