-Kagome… ¿a que esperas?- pregunto Sango desesperada
- Es que no se que ponerme….- repuso Kagome, repasando por 5º consecutiva su armario.
-Déjame ayudarte- suplicó Sango desesperada
-Esta bien… pero que sepas que es la ultima vez que me metes en un lío semejante.
Kagome Higurashi, estudiante de 21 años en la Todai vive con su amiga Sango, que también estudia en la Todai, aun no se explica como se dejo convencer por Sango para ir a un concierto heavy, música que a ella no le entusiasmaba, y ahora se debatía entre su ropa, entre la cual no tenia nada adecuado para ponerse, porque, como lo recordaba Sango a menudo, su ropa dejaba mucho que desear para una universitaria.
Al final después de mucho discutir con Sango, accedió a ponerse, mas que nada porque no tenia ganas de discutir con ella, un pantalón con cadenas y tachuelas, demasiado pequeña para su gusto, una camiseta de AC/DC, grupo del que solo escuchara hablar una vez, y unas botas también negras, todo ropa de Sango. Aunque seguía pareciendo una niña porque no dejo que Sango la maquillara y llevo el pelo recogido.
-Estoy horrible- decía Kagome mientras Sango la arrastraba hacia la puerta
- Corre, que vamos a llegar tarde. Y le prometí a Miroku que llegaríamos pronto.
Claro, Miroku. El batería del grupo que iban a ver esa noche y del que ni siquiera quería saber el nombre. Sango llevaba hablando una semana de el. Lo viera hacia un mes mientras el esperaba a unos amigos cerca de la Todai y no parara hasta saber quien era.
Sango aparcó el coche cerca de Shikon, el garito en el que tocaba Miroku y su grupo. Fuera había mucha gente toda de negro y con camisetas que Kagome no alcanzaba a reconocer.
Cuando entraron, sonaba una música atronadora del grupo que tocaba antes de Miroku y tanto humo que Kagome, poco acostumbrada a tanto ruido y a esa nube de humo, se desmayó…Pero cuando pensó que chocaría con el suelo, cayó en unos brazos musculosos. Lo último que alcanzó a ver fue unos ojos dorados que la miraban con curiosidad….
