¡Volví! Como les prometí volví con un nuevo y MEJORADO fic de "Aprendiendo a amar" el cual se le ha cambiado el nombre a "Tu en mis sueños".

ACLARACIÓN: Este es el fic, como ya les dije se ha borrado porque no llegaba a ningún lado y era un poco aburrido y monótono. Es el mismo fic por lo que les aclaro que van a encontrar partes, escenas de la historia "aprendiendo a mar" claro que a medida que vayan leyendo la historia se va a volver más interesante con mucho drama, comedia y claro SONAMY.

Así que sin más que decir los dejo con mi dichosa frase: ¡QUE COMIENCE!

Perdón si encuentran errores ortográficos.

Capitulo 1: El comienzo de todo

Oscuridad era lo único que se podía ver. El viento era tan helado que si tocaba tu cuerpo fácilmente te lo podría cortar a la mitad como una cuchilla de doble filo. El único ruido que se podía escuchar eran los golpeteos de unos pies chocando con el asfalto el cual provenía de una eriza de color rosa que se encontraba corriendo al parecer sin ningún rumbo fijo. En su cara se notaba el miedo y la angustia que estaba sintiendo.

La eriza miro hacia atrás para notar como unas sombras la seguían. Voltio de nuevo sus cabeza al frente acelerando mas su corrida para poder alejarse de esas sombra. No quería que la atraparan. Tenía miedo, tanto miedo que sin poder evitarlo lagrimas saladas salieron de sus ojos para después ser llevadas por el viento y perderse en la oscura inmensidad.

De alguna manera sus pies se enredaron asiendo que todo su cuerpo callera al suelo…fue tan rápido que no le dio tiempo de meter mano para evitar el impacto. Intento pararse pero de pronto soltó un quejido al mismo tiempo que hacia una mueca de dolor y caía de nuevo al suelo. Bajo su mirada a su tobillo sintiendo que dé hay venia el ardor punzante que sentía viendo que de este salía un liquido espeso color carmesí que bajaba desde su tobillo hasta caer al suelo formando un pequeño charco de sangre.

Respiraba aceleradamente oyendo como su corazón sonaba como tambor en sus oídos. De pronto se congelo al sentir como alguien se paraba detrás de ella. Sentía como le faltaba la respiración, como si de pronto sus pulmones hubieran olvidado cómo funcionar. Ensancho sus ojos y se estremeció al mismo tiempo su rostro mostro más horror al sentir como la tomaban de ambos hombros para voltearla y sin poderlo evitar soltó un grito que resonó por toda la oscura noche…

– ¡Haaaaaa!– Se escucho un grito proveniente de un eriza rosa la cual se paró de golpe de su cama sentándose en esta respirando agitadamente mientras se llevaba una mano a su pecho del lado izquierdo exactamente donde se encontraba su corazón. Miro a todos lados comprobando que se encontraba en una habitación y no cualquier habitación si no SU habitación "un sueño" dijo para sus adentros soltando un suspiro de alivio.

– ¡Que pasa! ¡Qué sucede!– Se sobresalto al escuchar la puerta abrirse de golpe y se asusto al ver a su padre con bate en mano listo para eliminar a cualquier criminal o usurpador de habitaciones si es que claro, hubiera uno.

– Nada papa, estoy bien, por favor baja el bate– Dijo la eriza parándose de su lecho dejando ver su piyama que consistía en un shock blanco que le llegaba por el muslo y una sencilla camiseta rosa de tirantes. Camino a donde estaba su padre para quitarle el bate. No le asustaba que él pudiera herir a alguien con el bate, no, lo que le asustaba es que él se pudiera herir así mismo con el bate, y es que su padre no es muy bueno en reflejos, coordinación y con las armas ni se diga y con semejante arma en mano le daba miedo que se pudiera hacer algo.

– Pero princesa te oímos gritar– Se extraño él erizo hombre de pelaje plateado y cuerpo un poco robusto. Sus ojos eran de color azul. Llevaba puesto una camisa de botones, manga larga y cuello polo de color gris con rayas blancas a lo largo, un pantalón negro azulado y unos zapatos color negro. Más o menos está en la edad de cuarenta y tres.

– No fue nada solo una pesadilla nada grave– Hablo tranquilamente la eriza rosa dándole una sonrisa tranquilizadora al erizo de pelaje plata viendo como este se tranquilizaba y le devolvía la sonrisa y el bate a su hija ya sintiéndose mucho mejor al saber que su "princesita" no estaba en peligro.

– Ya viendo que todo está mejor y sin peligros… ¿Quién quiere desayunar?– Ambos erizos dirigen su mirada había la puerta viendo parada a una eriza mayor de un pelaje color rosa más oscuro que llevaba puesto un vestido color verde jade que le llegaba unos diez centímetros arriba de los tobillos y unas sandalias de color blanco. Su largo cabello lo traía trenzado de lado. La eriza mayor le sonreía cálidamente y en parte divertida por la situación a los dos erizos que se encontraban delante de ella. No aparentaba tener más de treinta o treinta y dos años.

– Creo que eso estaría bien, me muero de hambre– Apoyo la idea él erizo macho pasando al lado de su esposa dándole un beso en la mejilla antes de salir en dirección a la cocina.

– Jijiji papa está loco- Dijo en una risilla la eriza rosa de quince años de edad.

– No está loco cariño, sabes que el solo te protege– Le reprocho la eriza mayor caminando hacia donde está su hija para quitarle el bate de las manos. aunque su tono de vos se oyó un poco serio, se ve en su cara que trata de aguantar las ganas de reír como su hija por ver a su esposo en modo perro guardián cuando de su hija o esposa se trata.

– Mas bien me sobre protege– Dice haciendo énfasis en la palabra "sobre".

– Amy….¿segura de que estas bien?– Le dijo la eriza viendo a su hija saliendo del cuarto, seguro para dirigirse al baño, haciendo que esta se detenga en la puerta dándole la espalda no viendo la expresión seria que adorno el rostro de la eriza menor.

– Sí, segura, no es nada- Amy voltea la cabeza sobre su hombro dedicándole una sonrisa a su madre que se vio forzada para después rápidamente salir de ahí e irse al baño.

– Ay hija….– Soltó en un suspiro viendo como su hija prácticamente escapaba de ahí.

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Al llegar al baño lo primero que hizo fue ir a verse en el espejo que colgaba de la pared encima del lavabo y cuando se vio ensancho los ojos y parpadeo un par de veces para luego reírse a carcajadas mientras seguía mirándose al espejo. Su largo y sedoso cabello rosa que le llegaba un poco más debajo de la cintura, estaba todo despeinado y de seguro estaba enredado, seguro por haberse movido mucho cuando dormía ¡uffff!... ¡Si hasta un nido de aves luciría mejor que su cabello ahora!

Sus ojos color jade estaban hinchados y enrojecidos de tanto dormir y su blanquecina piel que la hacía parecer una muñequita de porcelana resaltaba mas esos ojos de los cuales no estaban tan hermosos que digamos.

– Que….es…espanto– Decía entre cortada por la risa. Verse así, toda despeinada…..parecía una bruja…..y eso le daba risa. Sin parar de reír comenzó a desvestirse para meterse a la ducha y darse un baño rápido ya que se le estaba haciendo tarde.

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– ¡Amy cariño, el desayuno está listo!– Llamo con una sonrisa Ana, la madre de Amy, viéndola bajar de las escaleras ya bien peinada y con una cinta roja a la mitad amarrando su largo cabello, con su mochila y uniforme que consiste en una falda color negra que le llegaba un poco más debajo del muslo y era ajustada de la cintura remarcando la pequeña cinturita de la eriza. Una camisa de color blanco con tres botones al frente y cuello polo de manga larga y para finalizar, unos zapatos negros.

Amy simplemente agarro una de las tostadas que había en un plato sobre mesa que su madre preparo, se la metió a la boca no sin antes decir "¡adiós, los veo cuando llegue!" y salió de su casa para dirigirse a la universidad.

– Esa niña…Siempre anda con prisa jajajaja- Dijo Ana soltando una risita al final y sus esposo la mira como diciendo "a quien se parece" porque aunque no lo parezca Ana es una eriza muy activa lo cual Amy heredo.

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Caminando por las calles iba una eriza rosa, su mirada seria la tenia puesta en sus pies viéndolos moverse uno delante del otro. "Ese sueño se va volviendo un mal habito...Si solo supieran que no es la primera vez que los tengo" la eriza seguía absorta en sus pensamientos sobre aquel sueño recurrente mientras veía como hipnotizada el andar de sus pies.

Suspiro… no importa cuántas veces tenga ese sueño… siempre es igual. Y lo más frustrante es que tiene el raro presentimiento de que ese sueño no es solo un… un sueño.

El repentino sonido de su teléfono la saco de sus pensamientos. Del bolsillo de su falda saco su celular viendo que tenía un mensaje de su mama. "Amy cariño, cuídate y no vuelvas tarde, te quiere mama" leyó en vos alta. Suspiro, su madre siempre igual… y por eso la ama tanto. "Está bien. Yo también te quiero" pulso enviar.

De reojo vio la hora en el teléfono y se sobresalto– ¡Faltan 20 minutos para que toquen el timbre!– Sin decir más comenzó la carrera pero no llego tan lejos cuando a los pocos segundos choco con alguien delante de ella, y por la fuerza del impacto hizo que ambos cayeran con Amy encima.

Amy se quejo del dolor porque gracias al impacto de antes se dio fuerte en la cabeza, pero a los pocos segundos escucho otro gemido de dolor debajo de ella haciendo que abra los ojos de golpe encontrándose con unos ojos esmeraldas provenientes de un erizo azul debajo de ella.

– ¡L-Lo siento!– Rápidamente intento apartarse del erizo azul con un leve sonrojo de vergüenza en sus mejillas.

– No te preocupes, estoy acostumbrado– Dijo parándose sacudiendo la tierra de su ropa.

– ¿Eh? ¿A qué te refieres?– Amy lo miro con extrañeza. ¿Acaso estaba acostumbrado a que las personas choquen con él? …

– Ya sabes, que las chicas hagan de todo por llamar mi atención– Dijo con una sonrisa– Aunque tú eres la primera que me llega así; generalmente suele recibir regalos, o cartas o simplemente vienen con…

– Espera un segundo, ¿ósea que tú piensas que la única razón por la que choque contigo fue para llamar tu atención?...– Pregunto incrédula Amy.

– ¿De qué otra forma si no?

– Pues lamento romper tu burbuja, pero la única razón por la que te choque fue porque iba distraída y no te vi, no porque quisiera llamar tu atención– Aclaro.

– ¿Ósea que siempre eres una eriza despistada que no ve por donde va y se lleva consigo a la gente?

– ¡Claro que no! ¡Eso fue porque estaba distraída!, además tú te atravesaste en mi camino– Ataco molesta. No se iba a quedar callada después de cómo la llamo.

– ¡¿Qué?!– Espeto– Yo estaba caminando tranquilamente, tú fuiste la distraída que me choco– Contraataco.

– Pues no lo hubiera hecho si no te hubieras atravesado. Seguro ibas igual de distraído que no te das cuenta por donde caminas.

– Eso no es cierto. Además de tonta y distraída: mentirosa.

– ¿Cómo me llamaste?– Gruño molesta.

–… Tonta y mentirosa– Dijo con una sonrisa.

Amy cerró sus puños conteniendo su ira. Este erizo, quien quiera que sea la estaba provocando y enojada Amy era peor que un terremoto. De repente se estremeció al sentir como él la miraba fijamente, su mirada la escaneaba de arriba abajo deteniéndose en sus pechos haciendo que Amy llevara sus manos a estos.

– ¡Eres un pervertido!– Le grito con un sonroje de cólera y vergüenza en su cara.

– Instituto Emerld ¿Eh?...

– ¿Uh?– Murmuro extrañada hasta que entendió, lo que él estaba viendo era su insignia que yacía en la parte izquierda de su pecho. Amy no pudo evitar sentirse un poco tonta al estar pensando que él le estaba mirando más que eso– Hmph… ¿Y eso a ti que te importa?

– En nada– Dijo para después sonreír, sonrisa que a Amy no le dio buena espina.

– Hmph… mejor me voy; no quiero seguir perdiendo mi tiempo contigo. – Dijo pasando al lado del yéndose al instituto a paso veloz.

– ¡Nos vemos!– Escucho que le gritaba a lo lejos.

"¿Volvernos a ver? ¡Ya quisieras! Ojala y nunca me vuelva a topar con ese erizo molesto"

Continuara.

¿Qué les pareció?

Como ya les dije hay escenas que son del viejo fic como también nuevas, pero no se preocupen que esto solo es el comienzo.

¿Sonic es muy arrogante y un como atrevido no creen?

No se olviden de comentar si les gusto en los Reviews.

Y bueno esto es todo por hoy, hasta el otro capítulo.

BESOS.

KISS.