Digimon Adventure y sus personajes no me pertenecen.
Kibou
Gritos, los alaridos de la sala de estar llegan a tus pequeños oídos cual tambores tocando a tu puerta cuando no deseas abrir; aprietas fuertemente las manos contra tus oídos, deseando que, de esa forma, la gama de insultos e improperios puedan escapar de tu conocimiento, de nuevo. Se supone que tú no deberías estar oyendo esto; ellos creen que estás cómodo en tu cama, preso de los brazos de Morfeo.
Tienes miedo. Siempre has tratado de dejar atrás el hecho, pues nunca lo habías sentido tan cerca ¿Por qué discuten mami y papi? ¿Por qué mami llora? ¿Por qué papi se marcha? Miles de preguntas rondan tu cabecita cada noche, mas cada uno de tus padres se encarga de dejarla sin cuidado al día siguiente. Dicen que todo está bien y que no te preocupes, pero no puedes dejar de hacerlo al notar una cierta amargura creciente en los ojos de tu hermano.
Yamato. Él siempre te sonríe aunque no lo quiera y su corazón se destroce al hacerlo, toca su armónica cuando las discusiones alcanzan su punto más álgido y tus ganas de llorar incrementan; su música y su sonrisa son lo único que te permite tener fe en un posible cambio. Todos estarán juntos eternamente, no hay nada de qué preocuparse ¿Verdad?
—¡Tus hijos, claro! ¡Los hijos que yo tengo que mantener y por mantenerlos ocurre esto! ¿No, Natsuko?
—¿Quieres callarte de una vez? —sisea tu madre, tratando de ser discreta—. ¡Van a oírte, Masaharu! Pero ¡Claro! Esperar algo considerado de ti…
No engañas a nadie, Takeru. Es perfecta y normalmente obvio que temas, que tus ojos anegados en llanto duelan cada minuto más; es comprensible que tu esperanza de deslice discreta fuera de tu mente.
—¿TK?
Yamato te observa; se acercó tan sigiloso que no pudiste notar su cercanía. Está preocupado, puedes verlo. Su ceño levemente fruncido en angustia se suaviza al instante al dar cuenta de lo que sea que exprese tu rostro. Se arrodilla a tu altura, esperando que se lo cuentes.
—Tengo miedo, hermano… —logras hablar en un reprimido sollozo— mamá y papá están peleando, de nuevo…
Matt queda mudo por un instante y te abandonas al impulso de rodearle con tus pequeños brazos y refugiarte allí, es tu único lugar seguro…ahí nadie puede dañarte. Sabes perfectamente que él te protegerá de cualquier cosa, con su propia existencia de ser necesario; no quieres que eso tenga que ocurrir, pero lo comprendes.
Él responde al abrazo; nunca ha sido un niño demasiado afectuoso mas, contigo se permite muchas excepciones. Gimes en su pecho, aferrándose a su pijama azul claro como si pudiese marcharse igual que papá y la sonrisa de mamá; no podrías lidiar con la ausencia de Yamato ahora.
—Todo está bien, TK —musita Matt, utilizando la usual dulzura con que suele tratar de consolarte—. no llores, todo irá bien…
Aférrate a este momento, a la melodía inaudible de la voz de tu hermano mayor y sus intentos diarios por verte feliz; a pesar de cualquier cosa que pueda suceder, existen lazos que no habrán de romperse si lo quieres. Acúnate en los ecos de armónica acariciando tus sentidos hasta mecerte en la inconsciencia.
Porque él lo dice y así lo crees, al final todo irá bien.
N/A. Takeru&Yamato de la vieja escuela, no porque no me guste el incest en este fandom sino porque su relación de hermanos es muy dulce. Los consideró más inspiradores que Taichi y Hikari u Osamu y Ken, a mi parecer. Comentarios, críticas y tomatazos abajo.,
