¿Adivinen quién encontró a su beta conectada? Y ps ya que la ví, m'entregó dos fics (de HikaGo) que tenía listos y me betéo uno en ese momento (de Gravitation, q'hice hoy mismo por más que me negaba a escribir d'ese fandom). Éste es uno d'esos fics, el otro es sobre Ochi pero ps n'encontrado un título decente y por eso todavía no lo pongo aquí. Y quiero aclarar que ps no sé de qué color son los ojos de Hikaru, ni d'Akira. Yo n'he visto el anime y ps sólo he leído el manga, y en cada imagen a color q'encuentro son de diferente color... ps por eso si ven q'en mis fics varía o eso, ps ya saben porque.
Deseos y revelaciones
Había dejado de ser un pasatiempo.
Aunque, probablemente, nunca lo fue. Siempre disfrutó ser aquél que guiara las riendas. Aquellos dos chiquillos eran una de sus más grandes diversiones. Confrontarlos el uno al otro, buscando hacerlos más fuertes, tal vez buscando un rival para él mismo. Era tan... reconfortante. La actitud ligeramente altiva de Akira contra la carismática sonrisa de Hikaru. Las modernas y cuidadas jugadas de Touya contra las antiguas pero atrevidas de Shindo. Dos pares de ojos verdes tan parecidos y tan distintos entre sí.
Quizá por eso no se percató cuando dejó los serios ojos verdes de Akira y se concentró en los alegres ojos verdes de Hikaru.
No se dio cuenta. Tampoco notó cuando dejó de llevar a Shindo frente a Akira para llevarlo hacia sí. Ni cuando deseó ser la causa del fuego en su mirada. Había sido Hikaru la única razón por la cual Ogata se había empeñado tanto en ganarle a Touya con semejante ventaja. Quería que Hikaru se diera cuenta que, incluso como rival, valía más que Akira. Merecía el lugar que ahora ocupaba el hijo de su maestro.
Él había sido su primer contacto real con el mundo del go profesional, en aquél torneo para niños. Éllo había llevado frente al Meijin. Él lo había recomendado para el examen de insei. Éllo había hecho crecer, confrontándolo con Akira.
Y entonces, mientras veía profundamente ese par de ojos verdes y lo sostenía por el cuello de la camisa evitando que escapara, todo comenzó a tener sentido. Nunca había buscado un rival, o había estado curioso de la habilidad de ese chiquillo. Tampoco había querido un competidor digno de Touya, de ninguno de los Touya. Simplemente quería llevarlo a su mundo, tenerlo a su lado.
En ese momento, tan parecido a aquél día en el hospital, desechó su intención original. Lo había interceptado intempestivamente en los pasillos del Instituto de Go para preguntarle sobre Sai, para demandar un juego con aquél increíble jugador.
Pero ahora, no importaba nada.
Apretó con fuerza la ropa de Hikaru, atrayéndolo hacia él. Besó sus labios con pasión, deleitándose con la inexperiencia y sorpresa del más joven. Y entonces, sucedió.
Hikaru comenzó a corresponderle.
Soltó el cuello de su camisa, y pasó sus brazos por la cintura, aumentando el contacto entre ambos. Shindo se separó lentamente.
-Ogata-san... - susurró Hikaru.
-Ogata no, Seiji.
Después de la breve corrección, Seiji, retomó el contacto. Esta vez, desde el primer instante, Hikaru se dejó hacer por el décimo dan.
Ogata ya no tenía ningún deseo de pedir algún juego con Sai. Hikaru estaba ahí, al diablo con Sai.
No he dejado d'escribir. Ya tengo completos más de cinco fics, pero ps mi beta todavía no los ha checado. N'iba a publicar ninguno d'estos fanfics aquí todavía, pero ps y'había publicado éste en 30vicios, así que ps daba igual. S'alguien l'interesa, el otro está en mi lj. Y ps eso fue todo. He visto q'en español n'hay mucha variedad de parejas y ps por eso l'hice.
Cualquier comentario es bienvenido.
Zia Jian!
