Notas de autora: Hola, soy nueva en este fandom. Traigo estos pequeños drabbles que hago con el reto de la Tabla Virtudes de la comunidad Retos a la Carta (Link en mi profile).

Espero que les gusten.

PACIENCIA

Koboshi estaba en su escritorio esperando a que Kotaro llegara como de costumbre.

"Como de costumbre" implicaba que Misha llegara detrás de él, colgada de sus hombros, repitiendo su nombre en tono meloso.

Y Kotaro parecía tan tranquilo, llegaba a su lugar, colgaba su mochila en el respaldo de su silla y luego empujaba a la aprendiz de ángel fuera del salón y le ordenaba que fuera a su salón.

También implicaba que a media mañana tuvieran que perder la concentración unos segundos para encontrar a Misha pegada al vidrio de su salón, saludándolos con entusiasmo y esperando la respuesta de todos. Kotaro, como de costumbre, saludaba ligeramente con la mano y le hacía señas de que se marchara.

Y no faltaba que a la hora del almuerzo ella llegara para hacer grupo con ellos y entonces tenían que soportar también a Hiro, exclamando lo bello de su hermoso ángel y a Kaoru reclamando que ella era una bruja que lo tenía hipnotizado. Kotaro comía el almuerzo que Shia le había preparado sin prestar atención al barullo que se formaba a su alrededor mientras Ten reía, Misha no dejaba de abrazarlo, los hermanos gritaban cada cosa y ella misma intentaba callarlos.

A la hora de salida, el ángel fallido casi atropellaba a Kotaro en medio del frenesí que le causaba verlo después de… ¿cinco minutos?

Y luego el resto de la tarde, apareciéndose en su ventana, tocando a la puerta…

Y la rutina se repetía todos los días…

—Kotaro, admiro tu paciencia —indicó una de tantas mañanas que habían transcurrido como de costumbre.

—¿Mi paciencia? —dijo Kotaro sin comprender de lo que ella le hablaba.

—Yo no podría tenerle tanta paciencia a Misha, es por eso que te admiro.

—No es para tanto.

Él volteó hacia su cuaderno de apuntes y sin que Koboshi lo notara, sonrió. En realidad, a él no le molestaba para nada que Misha fuera así.