DISCLAIMER

Tanto los personajes como el mundo de Harry Potter son propiedad de J.K. Rowling.

Este fic participa en el minirreto de diciembre para La Copa de la Casa 2018/19 del foro La Noble y Ancestral Casa de los Black.

Petición: Cómo Filch encontró a la Señora Norris. Una historia que se enfoque en ellos, a la que cría desde cachorra; por Rose.

Nº de palabras: 497


Un gracias enorme para Miss Lefroy Fraser por revisar la historia, una vez más no se que sería sin ti.


EL DÍA DE NAVIDAD

Argus Filch llevaba vagabundeando de manera intermitente por callejón Knockturn y el callejón Diagon desde hacía más años de los que quería admitir. Recorría esas calles con la esperanza de que alguien se apiadara de él y le dieran una simple limosna. La vida de squib no era fácil. Para la familia Filch fue un deshonor tener una mancha de sangre no mágica en su familia, así que, cuando Argus no mostró indicios de magia, simplemente lo echaron de casa.

En la víspera de la noche de Navidad de 1971, Argus se encontraba realizando su vuelta rutinaria cuando un ruido captó su atención y, rápidamente, se ocultó en la sombras que le proporcionaban el callejón.

—Gata inútil —se escuchó bramar a un hombre —.No sirves para nada. No voy a sacar ni un knut de ti.

Ante tal comentario, Argus sintió curiosidad, por lo cual se asomó al lugar de donde venían los gritos. Vio cómo el dueño de la tienda de mascotas mágicas pateaba a un gato que intentaba volver a entrar en la tienda.

Él sintió lástima por el pobre gato. Debía reconocer que no era un gato bonito con un pelo lustroso, sino lo contrario: era un gato flacucho con un pelo gris más bien ajado. Despreciaba al comerciante por tratar mal al gato solo por no ser lo suficientemente bueno como para venderlo. Así pues, cuando la calle se quedó en silencio, salió de su escondite para acercarse al gato.

Como fue de esperar, este se mostró arisco a él; quién iba a culpar al pobre animal si acababa de ser pateado por su dueño. Argus no era una persona afable y sociable. Más bien todo lo contrario: su dura infancia y su posterior abandono lo convirtió en una persona huraña y desagradable. Él mismo admitía que odiaba prácticamente a todo el mundo. No sentía que perteneciese a ningún lugar, puesto no era un mago ni tampoco un muggle.

Es por esa misma razón que se encariñó del animal y poco a poco se ganó su confianza. Compartió con ella su hogar, un rincón oscuro de un callejón con un par de cartones y la poca comida de la que disponía. Fue durante su primera noche juntos, cuando Argus decidió llamarla Sra. Norris, en honor a una mujer importante de su pasado.


Habían pasado 23 años desde la noche en que se encontraron. Dos almas atormentadas a su manera. Dos seres que no encajaban en ningún lugar, salvo uno al lado del otro.

Muchas cosas cambiaron en aquel tiempo, puesto que abandonaron aquel asqueroso callejón dos años después de conocerse, y ahora se encargaban de vigilar los pasillos de Hogwarts juntos. Y formaban el mejor equipo posible.

Y aquella noche, durante el Baile de Navidad, celebraron su aniversario como lo hacían todos los años, bailando un vals juntos. Ya fuera en un callejón mugroso, en la intimidad su habitación de Hogwarts o delante de todos los habitantes del castillo.


N/A:

Situé la historia en el 1971, puesto que no es hasta el 1973 cuando supuestamente Argus Flich se convierte celador en Hogwarts. La señora Norris que da nombre a la gata, es una trabajadora del orfanato dónde se refugió Argus cuando lo echaron de su casa.