Hola a todos...No se si me sigan siguiendo por que últimamente no tengo reviews nuevos ni nada, pero esta idea se me cruzo por la cabeza y no perdí tiempo y comencé a tipear

La historia tiene de protagonista principal a Scorpius Malfoy, los capítulos serán un poco mas extensos que un drabble pero cortos a los que se acostumbran muchas veces en otros fics. No tendrá un tiempo definido, lo que quiero decir que pueden estar leyendo algo durante tercer año y el siguiente capitulo saltarnos a séptimo, y luego regresar a primero.

Gracias a todos los que me leen.

Nanda

Recuerden que los personajes le pertenecen a JK.

Iphone

- Buenos días Amo Draco, necesita que le traiga algo para desayunar?- un elfo doméstico algo viejo pero sumamente bien cuidado se le presentó apenas bajo las escaleras de su mansión.

- No muchas gracias Polly, dime algo mi hijo ya bajo?.

- El joven Scorpius está en el jardín con la Señora Astoria. - informó rápidamente. - Y se encuentra algo molesto, en realidad está molesto desde anoche después de que cenaron. - termino el informe, de todos los elfos domésticos que vivían en la mansión Malfoy, Polly era el único que tenía el trabajo especial de informar a Draco alguna novedad extra de la mansión. Como decía Astoria muchas veces molesta al escuchar a Polly hablar con Draco, que vivía con una espía en su propia casa.

- Excelente. - sonrió al muy estilo Malfoy. debe seguir molesto por lo que acompañaré a ver su famoso aphone, puedes seguir con tu demás trabajo. - y enseguida vio como el elfo desapareció. - Estas listo Scorpius?.- salió al jardín como si no supiera nada, Astoria tomaba su primer té del día, mientras su hijo estaba sentado junto a ella con la seriedad Malfoy.

- Papá! Yo si estoy listo pero tú no deberías estarlo. - se quejo el chico de 13 años recién cumplidos, acaba de llegar a sus vacaciones, con sus ojos grises, tez blanca y rubio platinado, las marcas reconocidas de todo Malfoy. Pero con la mirada y expresión calmada, herencia genética de su madre Astoria. - En verdad no quiero que vayas conmigo, es zona muggle! Tú siempre te comportas extraño frente a los muggles y te quedas viendo todo! - se quejó el joven, recordando salidas anteriores.

- Insinuando que me da asco compartir con ellos?- se molestó Draco. - Ya cuantas veces y a cuantos más tengo que gritar que no me interesa si son muggles, mestizos o puros.!- el tono de Draco era molesto, odiaba la discriminación, y no se lo esperaba de su propio hijo. - Estoy cansado que por cualquier cosa me tachen de ser un purista de mierda! Ya la guerra acabo, ya no existe ni Voldemort ni sus puercos mortifagos de los cuales me tocó formar parte, estoy...

- Papa!- lo interrumpio Scorpius. - No repitas otra vez tu discurso, ya sabemos que eres otro hombre, que cambiaste tu ideologías hace mucho tiempo, tampoco necesitamos escuchar nuevamente la historia de nana Narcissa salvando a Harry Potter, y como mi abuelo decidió por voluntad propia recibir el beso del dementor para que el apellido Malfoy sea visto de otra forma aceptando cada uno de los delitos que lo acusaban, tambien ya sabemos como tú compartes en trabajo con más de un hijo de muggles y aceptas que yo comparta también con ellos. - Astoria sonrió al ver la cara de Draco cada vez más enojado escuchando a su hijo decir cada cosa. Ella disfrutaba cada vez que ese par discutían.

- Entonces por qué dices que me comporto como un extraño con ellos?. - preguntó clavando la mirada a su esposa, que seguía riéndose de todo.

- Por qué es cierto, todo lo vez con sorpresa, como si nunca en la vida hubieras visto eso, y yo se que hay cosas raras para ti, pero sinceramente pareces un idiota viendo hacia todos lados con la boca abierta.

- Astoria te das cuenta como nuestro hijo me está tratando?.

- Mi amor. - dijo terminando su último sorbo de té.

- Dije "parece" no que era uno. - agacho la cabeza el joven Malfoy al escuchar la única intervención de su madre.

- Igual, no puedes decirle a tu padre ni que parece ni que es nada peor si es grosero, tienes que respetar a tus padres y a los mayores mi querido Scorpius, tú ya sabes todo esto, te hemos educado para que seas un hombre de bien y no alguien que no respeta ni a su propio padre. - retó a su hijo adolescente con la voz más angelical de todas. - Ahora en verdad que cuando vamos a Londres muggle te quedas viendo todo y estás como perdido.- se dirigió a su esposo.

- Es lógico! Soy mago! Paso metido en otro mundo y salgo a ver lo muggle máximo tres veces al año. - explicó rápidamente a su esposa y primogénito. -Cualquiera de los dos díganme. Por qué no puede sorprenderme ver cómo se visten? Sus colores de cabello? Sus modas raras y extravagantes?.- Draco Malfoy estaba alterado, su hijo lo sacaba de si.

- Yo solo digo, que debes comenzar a controlar tu expresiones de sorpresa, por qué quedas como un loco, y mi esposo no es ningún loco ni nada que se le parezca. - le lanzó un beso volado, haciendo que el rubio Malfoy suspire y baje las revoluciones del enojo. Astoria Greengrass tenía un poder tranquilizante en los hombres Malfoy. - Ven te sirvo una taza de tu café favorito. - Draco Malfoy se sentó junto a ella y le tomó la mano libre y se la beso.

- Hijo me tomo todo el café y nos vamos a comprar tu aphone.

- IPhone. - corrigió Scorpius Malfoy al puro estilo Albus Potter a él. - Por favor en verdad te lo pido papá, No vengas conmigo a comprarlo solo dame el dinero.

- Ayer dije que aunque somos millonarios no iba a darte tanto dinero muggle para algo que te va a servir como una lechuza o la red flu. Quedamos que necesito verlo y comprobar yo mismo que mi dinero será invertido en algo útil por más muggle que sea.

- Si es por dinero, me compro el modelo viejo o el de menor capacidad, así sale más barato y no tendrías que acompañarme. - Scorpius Malfoy con tal de ir solo estaba sacrificando todas las cosas que su mejor amigo le explico. Su plan original era comprar su iPhone y luego ir donde Albus para que le explique todo, además de ver a Rosie Weasley que estaba de visita.

- Aún no entiendo por qué necesitas uno de esos aparatos, vas a Hogwarts y puedes hablarte con tus amigos a cada momento, con nosotros cartas, y durante las vacaciones de seguro en casa Potter tienen chimenea. - Draco Malfoy sabía que su hijo compartía mucho con los integrantes de esa familia. para que tener un teléfono móvil con aplicaciones, juegos, música, fotos. - Draco añadió repitiendo las palabras de su hijo durante la cena.

- Amor, anoche ya aceptamos comprarlo, sus amiguitos lo tienen y se nota que en verdad lo quiere. - Astoria dijo sonriendo a su hijo, ella siempre estaba de acuerdo en darle todo lo que su bebé no tan bebé pedía.- Ahora no discutan más y vayan juntos a comprar ese aparato de marca frutal que todo muggle quiere.

Esa tarde en la mansión Malfoy no solo Había un iPhone nuevo, Draco Malfoy compro tres, uno para cada uno de los integrantes de la familia, con forros de cuero y accesorios mágicos como los audífonos sin cable y un cargador donde solo dejabas el aparato puesto. Y junto con los iPhones y ellos, llegaron los hijos del trío de oro. Ya que iban ayudarlos a instalar todo lo necesario a la vez de explicarles.

Draco Malfoy estaba feliz de saber que al fin tenía la agenda perfecta sin tanto peso para llevar a La Oficina, y que podría llamar a su esposa y verla no distorsionada por las llamas de la chimenea.

Si me estan leyendo, No se olviden de dejar algun review comentando que les parece la idea, y alguna novedad muggle que quisieran. Les adelanto que en proceso estan capitulos sobre: Netflix, Youtube, Spotify, uno dedicado a videollamadas. Si tienen alguna sugerencia no duden en decirla que estoy abierta a ideas.