Nota de Axl: Hola a todos, este es mi nuevo fic espero que les guste, Pokémon no es propiedad mia y esto lo hago por puro entretenimiento y aburrimiento mio.
Un Saludo
Redemption
Escrito por: Axl
Acto I: In the Beginning
"Es impresionante como cada vez tarda menos tiempo" Comentaba un joven en la entrada de un edificio esperando por alguien.
"Pensé que solo era un rumor" Le respondía su compañero.
"No te culpo, es una persona muy poco sociable, desde su ingreso a la organización no ha aceptado ningún tipo de compañero"
"¿Es en serio?, ¿me estás diciendo que el solo capturo al líder del Equipo Flare hace cinco años?" Repuso emocionado.
"No solo lo capturo, según los informes de la época, el pobre tipo a duras penas respiraba, duro casi 5 meses hospitalizado luego de su captura."
"¡Pero nuestras políticas impiden el uso desmedido de violencia!" Exclamo sorprendido el muchacho.
"Lo sé, lo sé, pero su eficacia es tal que los altos cargos lo pasan por alto."
En ese momento la conversación se ve interrumpida al abrirse las puertas del edificio para dar entrada a un hombre vestido de negro, su traje consistía en una botas de uso militar, un pantalón de color negro, un cinturón con un pequeño bolso atado a él, un Jersey negro cubría su pecho y como detalle final usaba una capa del mismo color. Tenía el cabello alborotado y de color azabache y como rasgo distintivo unas marcas en forma de z en las mejillas.
Junto a este hombre se encontraba uno un poco más bajo el cual demostraba en su rostro señales de haber recibido uno o más golpes, este hombre se encontraba esposado y era empujado sin ningún tipo de delicadeza por el hombre vestido de negro.
"Bienvenido detective Ketchum" Saludo cortésmente uno de los jóvenes agentes al tiempo que colocaba su mano en su frente a manera de saludo militar, su compañero se paró al lado e imito el gesto.
"Nos haremos cargo desde aquí, el Agente Looker lo espera para recibir su informe sobre la captura" Luego de escucharlo Ash dejo al sujeto en manos de los agentes y se dirigió a entregar su reporte.
"Parece que esta vez te contuviste" Comentaba algo aliviado un Agente Looker entrado en años mientras observaba el informe del personal médico, su escritorio totalmente lleno de dossiers sin revisar.
"Cada vez me das objetivos más débiles" Comento fastidiado el pelinegro.
"Quizás te has vuelto demasiado fuerte" Le respondió Looker en tono condescendiente mientras se levantaba de su lugar y se dirigía a la ventana. "De momento no tengo ninguna misión que darte, tomate un descanso, visita a tu madre, sal a divertirte con tus amigos."
Ash se levantó de su lugar y se dirigió a la puerta de aquella oficina.
"¿A dónde iras?, ¿pueblo paleta?" Pregunto interesado Looker.
"Tengo un asunto pendiente en Kalos" Respondió a secas antes de dejar la oficina.
Looker suspiro.
"No le haría daño disfrutar un poco de la vida" Comento para sí mismo en tono de queja.
Despertó violentamente de su sueño, el sudor descendía por sus mejillas y su respiración agitada y entrecortada, de nuevo el mismo sueño, cada tanto tenía aquel sueño que lo castigaba y le recordaba el mayor de sus pecados, de repente una mano en su hombro capto toda su atención.
"¿Se encuentra bien señor?" Le pregunto una mujer joven uniformada con un traje azul, de inmediato recupero la noción de donde se encontraba. "¿Necesita algo?"
"Estoy bien" Respondió el joven pelinegro, luego de meditarlo poco le pidió un poco de agua a la Auxiliar de vuelo, la cual se fue inmediatamente a conseguirla, el joven Ketchum aprovecho para recuperarse y se volvió a acomodar en su asiento, se encontraba en un vuelo con destino a Kalos.
Fue sacado de su mundo cuando la Auxiliar de vuelo volvió con el vaso de agua para luego retirarse, Ash dio un sorbo al tiempo que observo las revistas colocadas en frente de él, no podría volver a dormir esa noche así que sin muchas ganas tomo una de ellas para entretenerse un rato.
Al abrirla se dio cuenta que era una revista sobre el mundo de la farándula, desinteresadamente paso hoja tras hoja hasta que capto un título que le llamo la atención dado que el articulo trataba sobre alguien que él conocía.
"Dawn…" Susurro para el mismo el pelinegro al tiempo que comenzaba a leer dicho artículo.
"¿Qué ha pasado con la gran Coordinadora Dawn desde su misterioso retiro hace 2 años?" Rezaba el título del artículo.
"¿Retiro?" Pensó Ash al leer el título, desde que se alejó de todos se enteraba de muy pocas cosas y cuando lo hacía era pura coincidencia. Recordó la última vez que la vio, curiosamente fue hace dos años, ella podría haberle dicho algo acerca de su retiro, pero él no recordaba nada, era cierto que su último encuentro no fue agradable para ninguno de los dos, probablemente fue después de aquel día, algo interesado Ash siguió leyendo el artículo.
"La ganadora del Gran Festival de Hoenn y Sinnoh, decidió retirarse hace dos años en una pequeña rueda de prensa donde renunciaba a su estado de Maestra de Concursos para perseguir nuevas metas.
Al ser preguntada por estas metas evadió la pregunta y simplemente dijo que era algo que no podía dejar atrás sin importar lo que le costara, al día de hoy dos años después no tenemos información de a que se dedicó luego de esto.
Viajamos hasta el Pueblo Hojas Gemelas, allí nos encontramos con su madre Johanna, al preguntarle sobre la ex-coordinadora simplemente nos dijo que se encontraba absorta en un proyecto personal y que prefería no ser molestada.
Buscando en archivos supimos que si queríamos saber algo acerca de ella deberíamos indagar con sus mejores amigos, en esta caso elegimos al joven entrenador de pueblo paleta Ash Ketchum y su principal rival Zoey."
Al leer su nombre Ash hizo una mueca de burla, si no fueron capaces de encontrar a Dawn mucho menos lo lograrían encontrar a él, después de todo no por nada se había convertido en uno de los mejores agentes de la Policía Internacional.
"Sin embargo nos encontramos con un nuevo problema y es que Ash Ketchum ha sido imposible de localizar, al entrevistar a la coordinadora Zoey solo nos comentó que ella está muy entregada a su proyecto actual y no volverá del retiro si es que vuelve hasta lograr sus metas actuales.
Finalmente obtuvimos fotos de aficionados que la han visto en estos años, sin embargo dada la calidad de la imagen no podemos decir si se trata de la real."
Ash fue sacado de su lectura por la voz del piloto anunciando la llegada a Kalos y pidiendo que los pasajeros se colocaran el cinturón de seguridad, luego de alistarse para el aterrizaje Ash decidió que continuaría su lectura luego así que sin ser visto arranco la hoja en la que se encontraba el articulo y la guardo en un bolsillo total solo le interesaba aquella pagina.
El volumen de gente en el Aeropuerto de Ciudad Luminalia era asombroso al ser esta la ciudad principal de Kalos, mientras caminaba hacia la salida del Aeropuerto Ash recordó la ocasión que visito esta ciudad para enfrentar a Clemont, al recordar al joven inventor y líder del Gimnasio de Ciudad Luminalia le trajo a la mente algo y rápidamente busco en el bolso que cargaba en su cinturón.
"Creo que debería reparar esto" Dijo al tiempo que tomaba un artefacto en forma cuadrada con una pantalla en medio el cual tenía bastantes signos de maltrato.
Decidido tomo rumbo hacia el Gimnasio de Cuidad Luminalia.
"Vaya, está hecho un desastre" Comento un joven rubio mientras revisaba el interior del artefacto con una lupa.
"¿Puedes arreglarlo?" Pregunto interesado el pelinegro, Clemont era de las pocas personas que conocían su trabajo y además de ello el rubio decidió apoyarlo a su manera obsequiándole algunos de sus inventos que pensó le serian útiles.
"Por supuesto, yo lo invente, repararlo será fácil" Respondió Clemont "¿Te ha sido útil?" Pregunto mientras comenzaba a buscar las herramientas necesarias para repararlo.
"Más de lo que imaginas" Respondió Ash mientras observaba algunos de los inventos que el rubio tenia allí. "¿Qué tal el gimnasio?" Decidió que ya que se encontraba allí no sería mala idea enterarse de algunas cosas.
"Aburrido, han venido pocos retadores que me hagan esforzar" Sonrió el rubio mientras empezaba a trabajar en las reparaciones. "Si ves algo que te guste puedes llevártelo" Le invito al verlo observar sus inventos.
"Por cierto, ¿Qué te trae a Kalos?" Inicio el rubio levantando un poco la vista.
"Tu mejor que nadie deberías saberlo" Contesto el azabache de manera melancólica.
"Lo sé, lo sé" Respondió calmadamente y con una expresión triste en el rostro.
De repente se oyen pasos rápidamente y alguien que salta abrazando al azabache por la espalda.
"¿Quién soy?" Preguntaba alegremente una voz femenina.
"Es difícil confundir tu voz, Bonnie" Respondió tranquilamente Ash mientras la rubia lo soltaba.
Bonnie, la pequeña Bonnie había crecido en esos seis años convirtiéndose en una jovencita hermosa con su largo cabello rubio, bella figura quizás no era tan voluptuosa como lo pudo ser May pero aun así era notoria, desde aquel fatídico día hace seis años Bonnie incremento sus atenciones hacia el joven Ketchum, cada que lo veía se ponía muy cariñosa con él en un intento por aliviar la pena que este sentía.
"¿A qué se debe tu visita?" Preguntó alegremente la rubia mientras se agarraba del brazo del joven Ketchum.
"Tenía un favor que pedirle a Clemont" Respondió Ash con simpleza, haciendo que la atención de Bonnie recayera en su hermano.
"Vaya, un invento de mi hermano que no explota" Dijo en tono bromista luego de ver como este trabajaba en las reparaciones del artefacto luego miro de manera coqueta a Ash. "Ash, ¿por qué no tienes una cita conmigo mientras Clemont termina?". Propuso alegremente la rubia.
Ash estaba a punto de abrir la boca para negarse pero fue interrumpido por Clemont.
"De hecho, necesito que me traigan algunas piezas que hacen falta" Pidió Clemont luego de acercarse a él y darle una lista con lo que requería dejando sin opción a Ash el cual era arrastrado por una alegre Bonnie.
Luego de comprar las piezas necesarias, Ash y Bonnie se encontraban sentados en una silla frente a la Torre Prisma tomando un helado, Ash observo detenidamente a Bonnie y sin quererlo una sonrisa se formó en su rostro.
Junto con su hermano eran de los mejores amigos que tenía a pesar de que intentó alejarlos como al resto de sus amigos, ellos conocían la verdad detrás de este comportamiento por lo cual fracaso y ellos siguieron en contacto, con ellos no surtía efecto la máscara que usaba para proteger a los demás de sí mismo.
Aunque el joven Ketchum había madurado forzosamente generando una actitud bastante odiosa para todos los que lo rodeaban el par de hermanos rubios eran capaces de ver a través de ella.
Al estar encerrado en sus pensamientos Ash no pudo evitar el contacto del frio helado de Bonnie sobre su mejilla seguido por una cara de enfado por parte de ella.
"No me estabas escuchando" Protesto la rubia fingiendo sentirse ofendida.
"Lo siento, en serio" Se disculpó el pelinegro. "¿De qué me hablabas?".
"Te estaba preguntando si tenías novia, en estos seis años alguna mujer debió intentarlo"
"No, no estoy interesado en nada de eso" Respondió tranquilamente el joven Azabache, los últimos seis años trato de alejarse de todo el mundo especialmente de las mujeres.
Él era consiente que era algo más atractivo para las mujeres que hace seis años después de todo el duro entrenamiento no solo había desarrollado habilidades, varias mujeres trataron de conocerlo sin embargo él se encargó de alejarlas rápidamente, después de todo así no sufrirían por su culpa.
Saliendo de sus pensamientos Bonnie le hablaba sobre la ventaja de tener una relación y de como si no consideraba tener una terminaría solo en un cuarto con inventos defectuosos como su hermano.
"Claro que yo siempre estaré dispuesta a estar contigo" Dijo la rubia al tiempo que lo abrazaba afectuosamente, Ash solo sonreír nerviosamente mientras le pedía que lo liberara de su abrazo.
"Lo he reparado y he añadido algunas funciones nuevas" Explicaba Clemont mientras le devolvía el artilugio. "Hay otra cosa que quiero que te lleves." Dijo Clemont al tiempo que le indicaba que lo siguiera, al llegar junto a una mesa de un cajón saco una pequeña caja gris.
"He trabajado en esto, contiene todo lo necesario para curarte las heridas y en tamaño reducido" Comentaba orgulloso de su invención. "Aunque debes recordar que solo hay suficiente para una persona." Le explico al tiempo que le entregaba la caja.
"Está bien, lo tendré en mente, gracias por todo Clemont" Se despedía del inventor.
"Sabes que eres bienvenido en cualquier momento, vuelve cuando quieras"
Ash se dirigió hacia la salida pero antes se topó de nuevo con Bonnie.
"¿Ya te vas?" Le pregunto con cara de tristeza, Ash acaricio el cabello de la rubia y le dedico una sonrisa.
"Tranquila, volveré a visitarlos".
Luego de salir de Ciudad Luminalia Ash caminaba calmadamente por la ruta cuatro hacia Ciudad Santalune aún se encontraba muy lejos de Pueblo Vaniville, transitar de nuevo por allí no le provocaba un sentimiento muy agradable, luego de pensarlo tomo una pokébola de su cinturón
"Yo te elijo, Charizard" Exclamo al tiempo que el Pokémon era liberado, como de costumbre al estar libre este hizo gala de su fuerza rugiendo y arrojando fuego por la boca ante lo cual Ash simplemente sonrió, luego se acercó y se colgó a la espalda de este. "Charizard, vuela lo más rápido que puedas en dirección al sur hay un lugar al que debo llegar rápidamente." El Pokémon cumplió al pie de la letra y despego para alejarse de allí rápidamente.
Luego de un par de horas volando Ash diviso su lugar de destino ordenándole a Charizard que descendiera pocos metros antes de la entrada del pueblo, luego de estar en suelo firme Ash lo regreso a su Pokébola.
"Gracias amigo, tomate un descanso" Él no era el único que había entrenado, sus pokémon también lo habían hecho eran más fuertes, resistentes y agiles que antes.
Ash se dirigió a paso lento hacia el pueblo, al llegar allí para su suerte encontró una vendedora de flores, luego de comprar un ramo compuestos de flores variadas se dirigió hacia el sur del pueblo, a la parte más tranquila de este.
En este lugar habían múltiples monumentos de piedra, todos representando a una persona, Ash camino sin poner mucha atención a estos total él sabía de memoria cuál era la que venía a visitar.
Al llegar allí se encontró una lápida bastante cuidada en comparación al resto que se encontraban allí y a pesar de que él sabía que allí no se encontraba ningún cuerpo comenzó a hablar como si hubiese alguien allí presente.
"Lamento no venir más seguido a visitarte" Comenzó al tiempo que colocaba las flores al lado de la lápida. "He estado ocupado con varias cosas, pero prometo venir más seguido" Siguió hablando.
"Esta vez no olvide traerte flores" Comento con una sonrisa que disimulaba la tristeza en su rostro. "Seis años, ya han pasado seis años desde aquel día".
"Solo hace falta uno y todos habrán sido castigados" Comento con una mirada algo vacía la cual cambio a una mirada cariñosa cargada de culpa. "Cuando consiga encontrar al último vendré a contártelo".
"Tú solo espera por mi...Serena" Dijo lo último en un susurro para sí mismo.
Continuara…
Acto II
Despedida bajo la lluvia…
"Solo eres un estorbo para mi"
No es necesario que cargues con esto…