Xoco talking:

Después de un buen tiempo sin publicar nada, aquí esta un pequeño drabble que escribí gracias a las ideas (al principio eran chistes, ya es historia) de Lallen, aquí en fficnet.

Los personajes de Saint Seiya pertenecen a Kurumada, Saskia a Lallen/Nina y Ario... ese si es mío, es mi pequeña criatura.

Algunas notas importantes:

Si ya me conocen, saben que Shiva se identifica como mujer y hombre en mis fanfics. Y también que aunque la quiera mucho, sigue siendo una psicópata.
Lo separé en capítulos solo para tener algunas separaciones entre las escenas.
Ningún conejo fue lastimado en la escritura de este fanfic. Los peces si... pero fue culpa de Deathmask.
Disfruten :)


oo1

La tranquila meditación de las doce del día era algo importante para el caballero de Virgo. Nadie le podía interrumpir al menos que fuera algo importante, ni siquiera otros Dorados se atrevían a hacerlo. Shaka estaba tranquilamente en ese trance; podía hacer que sus sentidos estuvieran más despiertos y poder concentrarse en solamente algo, ahora era un pequeño insecto que se movía entre las hierbas que rodeaban el templo. Pero pronto su meditación acabo.

—¿Shaka de Virgo?

Sus ojos se abrieron rápidamente solo para encontrar dos Dorados frente a él. Aún seguía tranquilo, pero ellos podían ver que no estaba muy feliz.

—Shura… Deathmask… —los miró a ambos, que vestían ropa civil como él, mejor dicho, como la gente normal porque él vestía ropa de monje budista. —¿Pasó algo importante?

—Bueno, sí. —Shura contestó con su acento un poco fuerte para después ver un poco preocupado a Deathmask. —Bueno… es algo importante, pero…

—¿Es o no importante?

—¿Qué tan importante son tus estudiantes? —Deathmask sonrió mientras metía sus manos en sus bolsillos.

—Entonces sí lo es. —Shaka se levantó para estar junto con ellos. —¿Acaso Shiva destruyó algo nuevamente? ¿O quizás le rompió las costillas a alguien?

—Me encanta que rápidamente piensas qué pudo haber hecho esa muñeca… —Deathmask se rió hasta sentir el ligero golpe de Shura. —Ah, si… disculpa.

Virgo Shaka lo miraba un poco molesto, si no le gustaba que faltaran respeto a sus alumnos mucho menos que lo hiciera un Dorado… y mucho menos Deathmask.

—Lo siento, Shaka. Y no te preocupes, no pasó nada en sí… es solo que… —Shura parecía tratar de saber cómo explicarlo. —No es por querer entrometerme, pero hace poco vi a tu alumna y parecía un poco fuera de sí. Se ve sería, decaída…

—Como si estuviera en esos momentos raros que les da a las mujeres. —el caballero de Cáncer habló. —Aunque no es una mujer, pero tú sabes.

—No, no lo sé. —Shaka respondió.

—Shiva parece estar deprimida, Shaka. —el otro caballero explicó. —Deberías hablar con ella. Ya lo intentamos, pero ni siquiera nos quiere prestar atención. Incluso le compre chocolate.

Shaka suspiró un poco preocupado porque sabía que Shiva depresiva era una de las peores cosas con las que podía tratar. Todo el templo de Virgo, e incluso los que se encontraban a su alrededor, podían empezarse a sentir con una vibra pesada y triste solamente porque… espera…

—¿Chocolate? —Shaka rápidamente los volteó a ver. —¿Intentaron hablar con ella?

Los dos caballeros de Oro se vieron mutuamente como si se dieran cuenta de su error.

—Es que nos preocupa. —Deathmask dijo rápidamente.

—¿Por qué? —Shaka cruzó sus brazos. —No tiene ningún acercamiento a ustedes.

—Somos amigos. —Shura sonrió y tosió un poco para aclarar su garganta. —Quizás no te lo ha dicho, pero sí, le ayudamos con entrenamientos y…

—A mí me ayuda en mi templo en muchas cosas. —Deathmask soltó una pequeña risa para después recibir un golpe de Shura en su pantorrilla. —Porque es la única que no teme a mis máscaras. Si… Oye, Shaka, la cosa es que ella está deprimida y deberías preocuparte por eso.

—En eso tienes… —Shaka lo miró un poco molesto. —No, no te daré esa satisfacción. —suspiró y volvió a estar en posición de loto. —En el momento en que la vea, hablaré con ella. Gracias por avisarme… aunque aún lo veo extraño.

El caballero de Capricornio y el de Cáncer solo sonrieron y decidieron seguir su camino por las escaleras de Virgo, seguramente a casa del primero. Claro que Shaka pudo escuchar como ambos se decían cosas por haber 'dicho demasiada información'. Pero tenían razón en algo, Shaka no podía preocuparse por eso ahora, sino en su alumna.

Mientras tanto, una amazona igualmente disfrutaba su tiempo libre después de comer. Seiya había llegado con bastante comida para ellos dos y para la otra amazona de Plata, pero que nunca llegó. Marín de Águila cerraba sus ojos para quizás dormir un rato antes de seguir con los entrenamientos de otros alumnos nuevos. Pero su destino era igual que el de Shaka...

—¡Marín!

Rápidamente se levantó de su cama para correr a la entrada de la pequeña casa que tenía en el Santuario. Ahí estaba Misty con cara de susto.

—Misty, ¿qué sucede? ¿Pasa algo importante?

—¡Qué bien que te encontré! —entró sin más para tomarla del brazo y jalarla fuera de la casa, incluso sin su máscara puesta. —Necesitamos tu ayuda. Shaina da más miedo que de costumbre.

—Espera, Misty… respira, tranquilo.

—¡No! No entiendes, ¡Shaina está loca! —el caballero de plata se movía de un lado a otro frente a Marín mientras trataba de explicar. —No sé qué ocurrió, pero desde la mañana está de un humor terrible. Estamos acostumbrados a verla entrenar duro a los pobres reclutas, entre ella y Shiva los hacían sufrir, pero ¡esto es otro nivel!

—Bueno, explícame.

Marín estaba tan tranquila que parecía que esto enfurecía aún más a Misty.

—¡No tengo que explicar! ¡Shaina ha perdido la cabeza! —dijo para detenerse frente a la amazona. —Tú eres la única que la puede calmar. Ya van varios reclutas que están en enfermería y hay uno que no quiere siquiera salir de la cama porque sabe que Shaina le está buscando.

—Bien, Misty… no debes de perder tú la cabeza también. —Marín sonrió y colocó su mano sobre el hombro del caballero. —Iré a hablar con ella en cuanto pueda, mientras tanto trata de que no lastime a más personas.

—Más te vale hablar con ella. Entre eso y Shiva que solo por diversión se puso a destruir más columnas, no sé qué haremos.

—¿Shiva qué?

—La loca se levantó en la mañana y vino directamente a romper columnas. Ni siquiera estaba entrenando, solo las rompía. —suspiró molesto. —Puedo apostar que los guardias que están en enfermería trataron de detenerla.

La amazona no necesitó pensar mucho al escuchar esto.

—Bien, ya sé a dónde ir. Por el momento trata de que Shaina no ande de un lado a otro lastimando gente. Aunque… si la vez, dile que la estoy esperando en casa de Aries.

—¿Casa de Aries? Bueno, quizás un dorado la pueda tranquilizar. —Misty rió un poco. —No sé cómo puede Seiya con ella.

—Yo tampoco. Pero así es el amor, ¿no?

—Bueno, tú aguantas a Aioria. —volvió a reír, pero esta vez al ver la cara de seriedad de Marín, prefirió parar. —Iré a hacer eso que me pediste. Nos vemos luego.

Marín decidió darse la media vuelta para poder entrar a su casa por la máscara que, aunque era opcional usarla, estaba bastante acostumbrada a ella. Además, ahora tendría que hablar con el caballero dorado de Virgo y en ocasiones él o su alumno Ágora se sentían nerviosos al ver a una amazona sin máscara.