Disclairmer: Shingeki no Kyojin(進撃の巨人) es propiedad de Hajime Isayama.


—Bastardo—esa voz sonaba algo lejana— ¿Quieres ir a la nueva cafetería?

— ¿Cuál de todas? —Había preguntado mirando al castaño—. Últimamente han aparecido muchas cafeterías por aquí.

—Así es—afirmo—. Creo que se llama "Mistral"

— ¿Mistral? —El asintió— ¿Qué nombre es ese?

El se había encogido de hombros y sonreído para luego golpear su hombro.

—No se bastardo—dijo con simpleza—. Pero tenemos el día libre y no quiero estar encerrado en casa.

—De acuerdo—acepto—. Pero sigo sin saber dónde es, Jean

—Por ahí—siempre me han encantado las direcciones de Jean—. Tu solo sigueme

Entonces habíamos caminado hasta salir del campus de LMU y unos veinte minutos después de la caminata estábamos frente a la pequeña cafetería.

Se veía realmente bien y al parecer no había más de cuatro personas.

—Bueno...sigo sin entender el nombre—dije a Jean que simplemente me había ignorado y entró a Mistral dejándome afuera—. Me alegra que seamos mejores amigos

Entonces lo había seguido, cuando empuje la puerta un tintineo me recibo e hizo zumbar mis oídos.

Nunca me ha gustado el sonido que provocaban esas campanas...

Había arrugado mi nariz y fruncido un poco mis cejas mientras buscaba con la mirada a Jean a quien encontré parado frente al mostrador hablando con la chica que atendía.

— ¡Eren, ven aquí! —no había necesidad de que el gritara, estábamos a menos de tres metros.

Pero a Jean no le importó que los demás clientes se aprendieran mi nombre, porque me volvió a llamar a gritos

Cuando estuve junto a su lado, le di un pequeño golpe en la cabeza: —No entiendo tu necesidad de estar gritando.

— ¡No a la agresión, bastardo! —Exclamo entre risas—. Lo siento, esque estabas parado ahí como estatua

—Pero... ¿qué hacemos aquí? —seguía sin saber porque estábamos frente al mostrador discutiendo frente a la pobre cajera que nos miraba raro.

—Estaba dando nuestros pedidos—dijo tranquilo.

—Oh, eso es nuevo para mi.

—A mi me gusta, vamos a la mesa de allá—y había señalado una mesa cerca de la única ventana que había.

Luego de habernos sentado un chico—sabrá Dios de donde salió, porque no lo había visto—, llegó a nuestra mesa con una pequeña bandeja y el pedido que hizo Jean.

—Disfruten su comida—había hecho un reverencia y luego se retiró.

Eran dos batidos, uno de fresa y el otro de chocolate junto a una pequeña canasta de galletas que según Jean eran de canela y vainilla.

— ¿Qué te parece? —pregunto tomando su batido de fresa.

—Me gusta—acepte—. Creo que podría seguir viniendo de vez en cuando

Y apenas termine de hablar otra vez la campana sonó y el zumbido atacó mis oídos.

Estúpidas campanas.

Mi silla está frente a la de Jean y podía ver sobre su hombro hacia la puerta, dos chicos acaban de entrar.

Uno más que alto que el otro, rubio y parlanchín junto a un pálido pelinegro de baja estatura.

— ¡Bastardo! —Entonces reaccionó y veo al castaño hacerme mala cara— ¿Dónde estabas?

—Lo siento caballo—el negó—. Me distraje un poco.

— ¿Un poco? —sonrió y ladeo la cabeza—. No será que... ¿estabas viendo a alguien?

Mis mejillas se habían coloreado casi de inmediato y me obligue a mi mismo a dejar mi mirada clavada en la canasta con las últimas siete galletas que quedaban.

—No sé de qué hablas Jean ¿A quién podría estar viendo?

—A los chicos que acaban de entrar ¿tal vez? —dijo con gracia y sin disimulo alguno giró su cabeza en busca de los recién llegados.

Y el rubio también volteo a ver, sus mejillas se encendieron y Jean quito la mirada rápidamente.

— ¿Qué fue eso? —pregunte confundido.

—Es muy lindo—susurro tomando de su batido y metiéndose dos galletas a la boca.

— ¿En serio caballo? —reí—. Ah, pero soy yo quien los anda viendo.

— ¡No te burles bastardo! —Y metió otra galleta a su boca—. Fue muy vergonzoso, seguro ya sabe que estamos hablando de el...ellos, eso.

— ¿Estás nervioso? —dije con burla, amaba molestar a Jean.

—No sé... ¿Está...están viendo para acá? —y comió otra galleta, ahora sólo habían tres.

—El pelinegro miro hace un momento—dije despacio...ese chico era guapo, y el cabello resaltaba su piel, se veía realmente bien.

— ¡Eren! No te pierdas en este momento—pido susurrando.

—Lo siento. El otro chico también es guapo—Jean me miro curioso—. Pero puede ser que sean pareja

Entonces el pelinegro se deslizó sobre la mesa y me miro con un puchero.

—Has matado todas mis esperanzas maldito bastardo—me dijo con reproche.

Yo sólo reí un poco y tome de mi batido hasta que note al pelinegro ponerse de pie y venir en nuestra dirección siendo seguido por la mirada del rubio.

Pero no dije nada a Jean que seguía quejándose como niño y decidí fingir que le prestaba atención.

Maldición, ese guapo chico venía hacia nosotros. Por un momento olvidé como se respiraba.

—Disculpen—y Jean calló de golpe al mismo tiempo que se endereso en su silla cuál resorte.

— ¿Te podemos ayudar? —pregunto Jean con una sonrisa mínima al notar que yo estaba congelado.

—Puedes. ¿Vez al chico de cabello claro de allá? —y señaló al pelir...

Me había dejado confundido, ¿cabello claro? Yo veo que lo tiene rubio y Jean también lo noto.

— ¿El rubio? —entonces el pelinegro pareció percatarse de su error y miro a su amigo con una expresión de muerte apenas sus miradas se cruzaron

—Si...eso—entonces giró su cabeza hacía el pelinegro—. Mira, el es muy tímido y desde que ustedes cruzaron miradas no deja de mencionar lo guapo que te vez y me está dando dolor de cabeza.

Era realmente muy sincero y directo.

Jean y yo nos miramos confundidos y luego miramos al pelinegro.

— ¿Quieres...que deje de ser guapo? —pregunto con duda y el pelinegro sonrió un poco.

Otra vez olvidé como respirar.

—Quiero que vallas a hablar con el por favor. Parece que a ti también te llamo la atención—Jean tenía el rostro como un semáforo pero igual asintio frenéticamente—. Armin, Armin Arlert es su nombre.

En un 2 por 3 mi—estúpido—mejor amigo se había levantado con su batido en mano para encaminarse rápidamente hacia el rubio a quien vi sonrojarse.

Cuando lleve mi mirada al asiento—supuestamente—vacío de Jean me encontré con el guapo pelinegro sentado ahí comiéndose una de las galletas de canela y vainilla.

— ¿Sabes que hora es? —me pregunto al momento en que nos miramos y yo mire mi reloj porque si sacaba mi teléfono lo terminaría botando.

Mi pulso estaba temblando y ese chico pálido era el culpable, lo peor, esque el no sabía.

—Son las dos en punto—el asintió y tomo de su botella de agua, cosa que recién noto.

— ¿Cómo te llamas? —asegurado. Sentía que me iba a desmayar.

— Eren, Eren Jaeger

—Levi, Levi Ackerman—dijo de igual forma y se comió otra galleta. Ahora sólo quedaba una—. Lamento comerme tus galletas

—No pasa nada—asegure y el movió la canasta con la única galleta restante más cerca de mi—. Gracias

Sus manos eran delgadas al igual que sus dedos, largos y huesudos. ¿Tocará piano?

— ¿Porque dijiste "cabello claro"—e hice las comillas con mis dedos—, cuando señalaste a tu amigo?

Lo vi titubear un momento y luego tomar otra vez de su botella con agua.

—El...—hizo una pausa y se quedó pensativo—rubio...si, eso. El color rubio es un color claro, ¿No?

—Bueno... si tiene sentido—oh eso había pensado yo.

Por que en parte quería seguir hablando con el pálido pelinegro con bonita sonrisa que se comía las galletas agenas.

Entonces ambos sonreímos, yo me comí la última galleta y regrese con un nuevo contacto a casa y Jean con una cita para el fin de semana...


Levi A

«—Si puedo. Solamente que quiero dormir más la Universidad me esta matando, ¿no podemos dejarlo para mas tarde?—»

16:25

Jaeger

«—Claro que se puede. Pero tiene que dejar de ser tan perezoso, nos vemos a la hora acordada por mi—»

16:28


Tire mi teléfono a un lado del sofá y luego coloqué mi mano derecha en mi pecho, sobre mi corazón que la tía frenético y parecía estar apunto de saltar de mi pecho.

Desde aquel día en la cafetería estuve al menos dos horas frente a mi teléfono pensando en si debía enviarle un mensaje a Levi tan pronto.

Al final Jean—compartimos el departamento—se cansó de verme y me quito el teléfono para enviarle un simple "Hola" que fue respondió dos minutos después...

Estuvimos hablando por un mes y...maldición este hombre contesta los mensajes más rápido que una mujer enojada apunto de mandarte al demonio.

Me encanta.

— ¿Por qué tiene esa cara de estúpido?

—Seguro está pensando en Levi Ackerman

Siento mis mejillas calentarse al igual que mis orejas cuando Jean responde eso tan a la ligera.

— ¡No digas esas cosas! —casi le ladro. Estúpido Jean burlista.

—Yo creo que Jean tiene razón—dice Farlan riendo—. Desde que empezaste a hablar con ese chico estas en las nubes...más de lo normal

— ¡Yo no me la paso en las nubes! —les reclamó y ambos rien.

— ¿Ah si? —Yo asiento— Jean y yo estábamos hablando de la nueva película del C.A ¿Cuál fue el nombre que te dijimos?

Mi mente se queda en blanco instantáneamente: — ¿Estaban hablando del C.A?

Entonces un cogin se impacta contra mí rostro.

—Gracias a Dios que Levi no estudia en LMU—dice el rubio ceniza y Jean a su lado asiente.

— ¿Dónde estudia? —pregunto Farlan y otra vez me quedo pensativo.

—Voy a preguntarle—otro cogin se estrella contra mi cara—. ¡Dejen la agresión!

Entonces tomo mi teléfono y me doy cuenta de que hay un mensaje de el que aún no e leído.


Levi A

«—Eren...de verdad, tengo cosas que hacer, sólo una hora—»

16:30

Jaeger

«—De acuerdo.

¿Dónde estudia?—»

16:58

Levi A

«—En LMU. ¿Porqué?—»

16:59

Jaeger

«—Curiosidad.

¡Nos vemos Levi!—»

17:04


— ¿Entonces? —dice Farlan sentándose junto a mi en el sofá.

—Está en LMU—susurro.

— ¿Qué?

—Está en LMU—repito más alto.

Ambos chicos me miran un momento antes de intercambiar miradas entre ellos, entonces Jean abre sus ojos más de lo normal.

— ¡Yo no le pregunté a Armin! —Grita levantándose del sofá—. ¡Voy a Llamarlo!

Entonces salió corriendo hacia su cuarto, Farlan y yo empezamos a reír a carcajadas.

— ¿Te gusta ese chico? —me pregunta el rubio ceniza mirándome seriamente.

—Desde que atravesó la puerta de la cafetería—confíeso.

— ¿Tú le gustas?

—Ni idea—respondo encorbandome un poco, colocando mis codos en mis muslos y mirando al suelo.

—Le gustas—repite.

—Ya te dije qu...—pero el me corta negando con la cabeza y diciéndome que me calle.

—No es una pregunta Eren—ríe—. Te lo estoy confirmando

— ¿De qué hablas? —respondo con el ceño fruncido.

— ¿Recuerdas a Isabel? —Asiento, la chica pelirroja que le gusta a Farlan—. Es la hermana menor de Levi

— ¡¿Porque no me dijiste?! —reclamó y el me dice que me calme

—Porque no estaba seguro. Pero cuando Jean dijo "Ackerman"—hizo una pausa—, me di cuenta de que era el mismo Levi... ¿anda pelinegro verdad? Hace tiempo que no lo veo.

— ¿Por qué?

—Sabes que e tenido muchas presentaciones y el a estado muy ocupado en su pasantía—y de un momento a otro ríe—. Espero que Isabel no piense en teñir su cabello de nuevo.

— ¿Porque? A mi gusta como se ve con el cabello negro

—Sí, pero Isabel es muy necia y Levi no se resiste a ella—con esas palabras me deja completamente deslocado

— ¿De qué hablas? Acaso Levi no se mira a los espejos —noto al rubio tensarse en su lugar.

—No es nada. Olvídalo—y ante de que siga indagando en el tema, Jean aparece

— ¡ESTA EN LMU! ¡¿Cómo es que nunca e visto a ese Ángel?! —grita tirándose en el sofá principal de forma dramática

—Porque Armin quiere ser bioquímico—le dice Farlan como si nada—. Compartimos varias clases. Es muy difícil que alguien del edificio de ciencias se topé con alguien del de contaduría.

—Tiene razón—apoyo y mi cerebro hace click—. ¿En qué edifico están Levi?

—En el mismo que nosotros—dice pero algo no cuadra—, ya se lo que piensas, nuestro edifico está dividido en dos ¿recuerdas? no lo has visto porque la entrada y salida del de leyes esta contraria al de nosotros

—Tiene sentido—ahora es el turno de Jean para apoyarlo—. Espera... ¿conoces a Levi y Armin?

Y terminamos explicando la situación del porque Farlan conoce a nuestros crush y porque no dijo nada.


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—Te vez muy bien Eren—dice el pelinegro en cuento estoy frente a el y una sonrisa se me escapa.

—Tú también Levi—alago y él sonríe poco pero lo suficiente para dejar al descubierto sus dientes.

Es tan lindo.

—Eren ¿vamos? —pregunta señalando con su cabeza la entrada al cine y yo siento caminando junto a él.

— ¿Qué película veremos Levi?

—Eso te iba a preguntar—dice mirándome sobre su hombro—. Tú me invitaste después de todo.

Por un momento mis orejas se ponen rojas al recordar lo mucho que me costó pedirle está salida—Cita—pero no había pensado en ese detalle.

—Que tal...El espacio entre nosotros—y señaló la cartelera.

— ¿De qué trata?

—Ni idea—el ríe suavemente y yo me quedo en shock al escuchar su hermosa sonrisa.

—Iré a comprar las palomitas ¿Quieres mixtas o sólo mantequilla?

—Mixtas por favor. Iré por la entradas—el asiente y se da vuelta para ir a hacer fila.

Yo planeaba lo mismo, lo juro. Pero mis ojos se desviaron y terminaron clavados en el trasero de Levi.

Maldición, que bonitas piernas que tiene, el pantalón negro de cuero se adhiere perfectamente a su cuerpo y parece una segunda piel.

Cuando logró reaccionar me encamino a comprar las entradas; dos en F8, ósea que en el medio estará perfecto.

—Sigo sin saber de que trata la película—la profunda voz de Levi me hace pegar un respiro, entonces le miro feo—. ¿Qué?

—Levi, tu voz es muy profunda. Me asustaste—el se queda pensativo un momento pero no deja de mirarme.

¿Dije algo malo?

—Eren, tu voz es más gruesa que la mía—dice con seguridad—. No veo razón para que te asustes

—Es que...—suelto un suspiro y me miro con una sonrisa—. No importa, mejor entremos ya.

—Tiene muy bonitos ojos esa chica—susurro cerca se su oído—. ¿Qué piensa?

Levi se inclina hacia mí, imitando mi acción: —Yo los veo todos grises

— ¿De qué hablas? —pregunto confundido.

—Yo veo todo gris, ya sabes...—y señala sus ojos.

—No. No lo se—entonces me doy cuenta de que el se tensa en su lugar

—No es nada. Olvídalo—las mismas palabras de Farlan

La curiosidad me está matando, quiero saber de que hablan estos dos

—Levi

— ¿Uhmm?

— ¿Nos vamos? Me estoy aburriendo

—Espera. Quiero saber si regresa a Marte o se muere—dice y sigue comiendo palomitas.

Diez minutos después somos los últimos en salir de la sala, ambos en silencio hasta que decido terminarlo

— ¿Le gustó la película Levi?

—Sí. No fue tan mala—aún está serio.

Una sonrisa se cuelga en mi rostro y sin poder evitarlo rodeo los hombros de Levi con mi brazo izquierdo y el me mira con una ceja arqueada

—Levi, vamos a sentarnos. Quiero preguntarle algo—al parecer el capta rápidamente sobre lo que quiero hablar así que sólo asiente y seguimos caminando hasta una banca cerca de la puerta del Mall

—Sabe—digo llamando su atención—, hace poco me di cuenta de que usted es amigo de Farlan

— ¿Conoces a Farlan? Que pequeño es el mundo—susurra—. No me digas que ahora conoces a mi hermana también—dice con cara de fastidio y yo río

—No. Sólo de vista porque Farlan me contó que le gusta Isabel—entonces Levi me mira como si tuviera tres cabezas.

—Le gusta—dice y pone una mano en mentón—. Mi hermana...le gusta mi hermana...

Se queda un momento en silencio y entonces recuerdo lo que Farlan dijo cuándo me contó sobre su enamoramiento.

"No le digas a nadie, ni siquiera el hermano de Isabel lo sabe"

Y yo se lo acabo de decir.

—Lo voy a matar—dice de repente como si nada— ¿Sabes a qué hora terminan sus clases mañana?

— ¡Levi! —exclamo y el me mira serio—. No puedes hacer eso. Además, como podría saber su horario

—Tienes razón—suelto un suspiro de alivio—. Mejor hablo con Armin que comparte clases con el

— ¡No, Levi! Usted está desviando el tema—el ríe.

Lo sabía, lo está haciendo a propósito

— ¿Qué querías hablar entonces?

Por un momento me quedo en silencio pensando las palabras correctas pero...Bah, no se como decirlo.

—Farlan dijo algo parecido cuando estamos hablando y se dio cuenta de que saldría con usted—el me hace un gesto con la mano para que continúe—. Dijo que esperaba que Isabel no le tiñera el pelo cuando le dije que eras pelinegro...

Hago una pausa cuando noto como Levi habré más de lo normal los ojos y toca su cabello despacio

—Y el dijo que seguro Isabel intentaría cambiarlo algo así...—él no dice nada, desvía la mirada—. Lo mismo paso en la cafetería con el asunto del "cabello claro"—hago las comillas con mis dedos—, cuando era rubio. El rubio es un color claro, pero fue raro.

— ¿Algo más? —pregunta despacio ahora mirándome a los ojos.

—Cuando te dije que la protagonista tenía bonitos ojos, dijiste que todo lo vez gris—suspiro.

— ¿Qué piensa tu? — Esta mordiendo su labio inferior y Dios...me están dando ganas de morderlo por el.

—No se... ¿eres ciego? —el ríe un poco y niega—. Uhmm... ¿Tienes cataratas en tus ojos y vez manchas?

Nuevamente niega: — ¿Eres un alíen que no distingue colores?

—Algo así—dice sonriendo y yo le miro confundió haciéndolo reír a carcajadas.

— ¿Eres un alíen?

—N-no—responde entre risas.

— ¡No te rías Levi! —exclamo y el limpia pequeñas lágrimas en las esquinas de sus ojos.

De verdad...es muy lindo este alien.

—No distingo colores Eren, no los puedo ver—dice cuando logra dejar de reír pero aún así no entiendo y el lo nota—. Tengo daltonismo acromático

—Pero...se supone que los daltonicos si ven los colores—gracias clases de verano de biología.

—Hay diferentes tipos de daltonismo—ahora tiene más sentido—. El daltonismo acromático quiere decir que yo solo puedo ver en blanco y negro.

— ¿Blanco y negro? —pregunto aún asombrado.

—Más bien, gris porque negro del todo no veo—ya entendí—. Veo solamente en escala de grises Eren.

—Entonces no sabías que tienes el cabello negro—el niega.

—Recién me doy cuenta, según mi madre es mi color de pelo natural, es más, yo solo sé que tener el pelo negro es normal—suspira—. El día que te conocí Armin me dijo que tenía el pelo rubio, pero preferí decirles que tenía cabello claro por aquello... ¿es normal tener el pelo rubio? No espera...sigo sin saber que es color rubio

—Olvídalo, Levi—el me mira con ambas cejas arqueadas—. El color que andas te sienta muy bien, ahora entiendo porque sólo andas de blanco y negro... ¿Cómo haces cuando vas a comprar ropa?

—Algunas veces Isabel me ayuda a combinar colores pero, normalmente les pido a quienes entienden que me ayuden con eso, pero tengo que explicar mi daltonismo y...—entonces suelta un suspiro y seguro un gruñido que me hacen reír.

—Tienes una mirada daltónica...

—Tengo una mirada daltónica...


« ¡En la segunda parte viene el lemon!

Aquí quería desarrollar un poco la historia del EreRi.

Además, esta es la pequeña adaptación de mi fanfic orinal que es un TaeGi que está en Wattpad