Your head is running wild again

My dear, we still have everything

And it's all in your mind

(Yeah, but this is happenin´)

(Just give me a reason, P!nk feat Nate Ruess)


Restriegas las manos por tu cara y, como si fueras un niño pequeño, la oscuridad te produce pavor cuando tus ojos quedan tapados. El sudor baña tu frente pegándose a los mechones de tu pelo, de un pelirrojo mucho más claro que el de la mayoría de tus primos; además sientes como si la corbata a rayas verdes y plateadas te asfixiara y te encuentras totalmente desorientado.

¿Qué demonios te está pasando?

Desde que el Sombrero Seleccionador te mandó a Slytherin asumiste que eras distinto a los demás Weasleys; ni tan perfecto como tu hermana mayor, ni tan abrumador y extrovertido como tu hermano pequeño. Tan solo eras Dominique: el tímido Dominique, el que se sentía más libre con música sonando en sus oídos y una pluma en su mano izquierda que sintiendo el viento sobre una escoba, el que era capaz de escribir cualquier cosa que se propusiera, pero no de contar un chiste en condiciones, el muchacho en el que pocos se fijaban, el que siempre iba acompañado de Lysander Scamander. Eras, y sigues siendo, todo eso y más.

Sin embargo nunca fuiste el extraño y oscuro Dominique. Hasta ahora.

¿Empezó cuando te enamoraste de ella? No, entonces tan solo te sentías como un perturbado cada vez que te miraba; la primera vez que te habló sentiste como la gravedad tirase de ti hacia abajo impidiéndote moverte y aunque estabas más callado que de costumbre no eras ni la mitad de solitario de lo que eres ahora.

Realmente todo comenzó hace unas pocas semanas cuando ella, entre lágrimas y palabras seguras, te contó lo que iba a hacer. Y pese a que te horrorizó te ofreciste a apoyarla sin pensarlo dos veces. La apoyarás desde las sombras, desde la sinrazón que produce el amor; sin que nadie se entere, porque si lo hicieses ya no serías el tímido Dominique. Serías Dominique el traidor.

Ni siquiera ha empezado a actuar y ya te sientes culpable, porque aunque has dado tu palabra y ya no puedes volver atrás. Pero la oscuridad en la que te estás sumergiendo te atormenta, las sombras nublan tu vista cuando hay luz y te miran con sonrisas maliciosas, las pesadillas te acechan cada noche, convirtiendo el dormir en una tortura y ganándose las miradas preocupadas de Lysander. Y sin duda lo peor son las voces: cada vez se parece a la voz de una persona; la que se parece a la de tu primo James te susurra con malicia que no mereces ser pariente de Harry Potter, el hombre que venció al más oscuro de todos los tiempos; la de tu padre te recuerda día tras día que por culpa del lado oscuro tiene esas cicatrices en el rostro; también oyes la del menor de los Scamander, que te dice que no todos los Slytherin deben seguir el camino equivocado, y te asegura con preocupación que no debes dejarte llevar por las habladurías. La más espeluznante de todas es la de ella, no dice nada, tan solo ríe como la malvada bruja de aquella película muggle.

Y aunque sabes que solo es cosa de tu cabeza esas voces hacen que sientas asco hacia ti mismo, aunque ya da igual lo que digan, es la tuya propia a la que haces caso, esa que te dice con tristeza que ya no hay salvación para ti.


NDA: Esta historia es para Cris Snape, la cual pidió en el foro La noble y ancestral casa de los Black una historia sobre Dominique chico. Está es mi propia visión del personaje, espero que le guste.

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