Hace tiempo que no escribía nada de Naruto. Y así como para retomar mi plan "Desgraciemos a Sasuke" se me ocurrió este pequeño drabble. Nah, si en el fondo el Uchiha lo disfruta… ;)
Advierto en el rating que posee contenido no apto para menores, así que queda bajo su propia responsabilidad. No quiero quejas estúpidas después…
Inspirado en una imagen ItaSasu que me pasó la Aye xD. Reviews con sus opiniones! Cada post es un paso que la perversión avanza en nuestras vidas, coopera con esta noble causa x3
Disclaimer: Naruto no me pertenece. Por suerte.
Pequeño Desertor
Preguntándose en qué minuto cambió el orgullo por el placer, lo único que salía de su garganta eran gemidos, mientras él le apretaba las nalgas en un intento divertido de degradarlo aún más.
De todos modos ya no le quedaba nada por lo que luchar. No estaba seguro si deseaba acabar con él, después de todas las cosas que le hacía sentir.
— ¿Te gusta, Sasuke-chan? —le oyó preguntar con voz jadeante. Y le pareció una consulta muy lasciva.
No respondió. Porque primero, la respuesta era evidente. Luego, hacerla más evidente aún era humillante hasta el cansancio y no quiso darle ese gusto.
Pero no pudo reprimir un grito cuando las manos de su hermano estrujaron sus glúteos para dirigirse a continuación a su miembro erecto.
Dominación total.
—Te he preguntado si te gusta…
—No pienso contestarte.
Y sin previo aviso, Itachi le penetró. Otro grito intentó salir de la garganta cansada de Sasuke, pero éste le puso barricada con los dientes. No iba a gritar de placer por un acto tan convulsivamente vergonzoso… Lo único que tenía en mente era escapar y matar a ese desgraciado, pero su cuerpo no respondía, sumergido en la droga de las caricias de su hermano.
—Ni siquiera pienses en arrancarte. Mucho menos en matarme, sabes que no puedes. No quieres…
El menor cerró los ojos, mordiéndose la lengua. Privándose del aire casi.
El mayor movió la mano con la que encerraba a su presa. Arriba y abajo. Cada vez más rápido. Moría de ganas de hacerlo con la boca después…
— ¿Qué harás con tu vida ahora, pequeño desertor? Ya no tienes objetivos, Sasuke. Ya no quieres matarme, te gusta el uso que puedo darte, y te entregas a ello…
Sasuke olvidó pensar. Gemía y jadeaba al ritmo que marcaban la mano y las caderas de Itachi. Su vista se nubló, y un éxtasis profundo se apoderó de él. Un apretón final… Y se liberó. Junto con él. Al mismo tiempo…
Perfecta sincronía.
Cuando abrió los ojos, todo lo que vio fue a su hermano mayor lamiéndose la mano con el hambre condensada en la cara. La imagen sólo ayudo a hundirlo más en su humillación, pues algo dentro de él despertaba.
Estaba conociendo otro tipo de venganza.
Y tan rápido como lo pensó, se desvaneció. Un golpe sordo en la nuca le dio dos segundos de lucidez antes de desvanecerse.
—Suficiente por hoy. —dijo Itachi, calzándose de nuevo las prendas negras características de Akatsuki. Con una lentitud desesperante. Dejando la invitación abierta, bastante cruel considerando el estado soporífero de Sasuke. —Mañana te daré más motivos para quedarte.
Y se durmió en la inconsciencia.
Era un maldito desertor después de todo.