Fantasía
" Para de mirarme" – le obligó ella casi con enojo. Ella alzó una ceja y la miro fijamente, no podía estar hablando en serio…
Su mejor amiga, Ino Yamanaka, estaba saliendo con alguien mas no le contaba con quién, hasta ese momento. La había ido a visitar de sorpresa, sin una segunda intención pero justo la rubia estaba en algo con alguien. Y por eso es que ahora estaban hablando en la puerta de la pequeña casa de la Yamanak.
"Dime quién es…A H O R A"- le rogó Sakura son una sonrisa picarona de oreja a oreja.
"Shikamaru" – contestó sonrojada a más no poder.
"No jodas" – le comentó la pelirosada
"Es enserio maldita frentona y baja la voz".
Sakura nunca había visto a Ino sonrojarse así, siempre era su amiga quien hacía a los hombres quedar casi como tomates y ahora…mirenla, hela ahí, Ino Yamanaka hecha nervios por haber hablado con Shikamaru Nara.
"Shikamaru Nara"
"Sí frontona, sí. No sé cuándo se volvió tan coqueto"- le contó la rubia, casi perdida en sus pensamientos, casi perdida con el recuerdo de ÉL. Aquel castaño al cual más ignoro mas ahora no podía dejar de mirarlo.
"Es que no lo puedo imaginar, suena a fantasía"
"Ejem"- se escuchó una toz desde la puerta, Ino se volteo y Sakura husmeo para encontrarse con la imagen de Shikamaru con el pelo suelto hasta los hombros, tronco descubierto y una mirada llena de deseo hacia su amiga Ino a quien Sakura vio se derretía en el momento.
"ME VOY, ESTAREMOS HABLANDO" – gritó la pelirosada mientras salía del casi corriendo del lugar, dejándoles las privacidad que tanto querían.
"Llego sin querer, te juro por dios que yo no le dije nada Shika"- le comentó la rubia, quien se acerco al moreno y acaricio con sus manos el torso de arriba hacia abajo.
"Problemática, me da lo mismo si sabe" – dijo cortante Shikamaru, quien trataba de controlarse ante los movimientos de Ino
"Me alegro…pero me alegraría más si no te controlaras" - le susurró seductoramente la Yamanaka y en menos de lo esperado el castaño la tenía sujeta a su torzo y comiéndole la boca a besos apasionados.
Besos, que Ino adoraba desde que su fantasía…se había hecho realidad.
Fin