Aquí vengo con un kanokido medio emo XD ¿Por qué algo así a esta pareja tan kawaiimasoquistatsundereblablabla? Ni siquiera yo lo sé, pero me pregunté ¿Kano haría algo así por un mal de amores? No se! El no es kuroha XD
Viva esta OTP forever and ever *w*
Como sea, ¡Disfruta! (eso espero)
Aclaracion: Los personaje que no me pertenecen en este one-shot serán los tres miembros principales del Dan, de allí todo me mío :3
"Ultimas noticias. El asesino de jóvenes chicas fue finalmente capturado por la policía hoy en la tarde. Las autoridades quedaron absortas al darse cuenta que es se trata de un joven de dieciocho años el causante de esos homicidios. Se espera la sentencia del jurado. Más información en el noticiero de las 4:00"
La abogada caminaba, casi trotaba, por los pasillos vacíos de la corte. Jamás en su vida había tenido que llevar un caso que la pusiera entre las leyes de su trabajo y sus propios sentimientos. Sin dejar de ver los expedientes que traía, abrió la puerta de la oficina del fiscal.
—Vengo por el caso del homicida-la abogada entró sin detenerse a saludar al hombre que allí se encontraba. Tiró los expedientes sobre el escritorio y clavó sus ojos en los del hombre.
—No fue difícil tener a todo los miembros del jurado en su contra-dijo sin mucha interés el hombre mayor-será condenado a cadena perpetua.
—¡Tengo que decir que estoy en contra de eso! El chico es joven, nunca antes ha tenido algún historial policial.
—Se llevó la vida de adolescentes con engaños, no creo que el ser "joven" lo libre de recibir lo que merece. Además, ya tiene dieciocho años, fue juzgado como un adulto.
—Es que el problema es mental.
— ¿Cómo dijo?-El fiscal apoyó los codos sobre la mesa y enterró el mentón en sus en sus manos. Frunció el ceño indicando a la bogada que continuara.
—Hablé con él, y no estaba bien. Le pedí a la psicóloga del juzgado que lo analice y encontró que…tal vez…su problema es mental. No necesita ir a la cárcel, necesita ir a un psicólogo o un psiquiatra.
—Un año entero tras él, ¿y su problema es mental? Tonterías abogada, el tiempo en la cárcel lo ayudará con su "locura".
—Escúcheme, por favor. No solo se requiere tiempo, también necesita ayuda. Si estuviera bien mentalmente no habría cometido estos homicidios.
—La sentencia se dará mañana, y no parece que el jurado cambie de opinión.
—Por favor fiscal, déjeme presentar el caso una vez más.
—¿Por qué tanto intereses en ese chico?
La mujer se quedó con la mente en blanco. Después de todo ¿Por qué tanto interés?
—Con su permiso.
Recogiendo el expediente sin mucho ánimo, la abogada asignada del joven homicida salió de la estancia con cierta cólera recorriendo sus venas. ¿De verdad tenía que sufrir ese chico más de lo que ya estaba? Viendo el reloj de pared, decidió visitar una vez más al chico antes de irse.
—¿Se puede?
—¡Ah! Mi abogada, no esperaba visita suya.
—Más bien, quiero hablar contigo.
—¿Hablar? ¡Claro!
La mujer acercó la única silla de la celda al lado de la cama del chico, se veía sonriente a pesar de estar en ese lugar ¿Por qué sonreía?
—No tienes que hacer esto, Shuuya
—¿Hacer qué?
—Sonreír. Yo entiendo que esto debe estar afectándote totalmente.
—No sé de qué me habla, estoy bien~
—Escúchame, mañana intentaré presentar tu expediente en la corte, si los convenzo te enviaran a un psicólogo.
—Que conversación más aburrida me vino a dar.
—¡Tu vida depende de mí! ¡Si no apelo a tu favor te pudrirás en la cárcel durante toda tu vida! ¿Quieres eso para ti, para tu familia?
—¿Familia? Tenía una…
—¡Kano Shuuya!
—Déjame, no tengo idea de donde están, donde está el, donde esta…ella.
—Pero que…
—Ah~ ¿Hablando entre dientes de nuevo, ¿por eso cree que estoy loco?
—¡Déjame ayudarte!
—Jajaja~
El chico de cabellera rubia soltó una carcajada, dejando a la abogada sin saber que pensar o decir. Mientras se limpiaba algunas lágrimas provenientes de su risa desenfrenada, continuó hablando.
—Usted es tan interesante. ¡Me gusta!
—No puedo creer que reacciones así.
—No le veo la gravedad, ¿nunca le enseñaron a que las cosas malas se deben castigar?
—Tú no eres malo.
—¿No lo soy? Soy un monstruo. La gente odia a los monstruos~
—Shuuya…
—Déjeme señora, estoy bien, y puede hacer lo que quiera mañana en la corte, no cambiará nada jajaja ¿vio sus caras? ¡Parecían que iban a comerme vivo!
Sin mencionar palabra, la abogada salió de la celda. Una vez más, Kano se encontraba solo.
—Como lo odio…
Aprovechando su soledad, deshizo la habilidad que se había hecho una costumbre usar. Ya ni se acordaba que era lo que debería sentir en momentos así.
—No puedo ser salvado, ¿ok?
Algo frustrado por la visita, se acostó en la dura cama, dejando su brazo colgando por uno de los lados, casi tocando el suelo.
—Oye tú, levántate, tienes visitas-un policía golpeó los barrotes con fuerza, haciendo que el sonido de las vibraciones lo haga volver en sí.
—¡Kano!
—¿Se-seto?
Seto esperó a que el policía se vaya para luego entrar y abrazar fuertemente a su hermano, quien no sabía cómo responder. Los recuerdos de una noche, en donde de igual manera lo había abrazado y dado su apoyo, la única vez que lo vio vulnerable, volvió a su mente igual que un cuchillo. Luego de algunos minutos, Seto rompió el abrazo, pero lo sujetó por los hombros.
—No puedo creer lo que escucho.
Kano se sintió miserable, pero aprovechó su habilidad para mostrar todo lo contrario, como siempre lo hacía. Seto presionó los dientes con desesperación. Nunca cambiaria.
—¿Qué te ha pasado?
—¿Cuándo regresaste? No sabía que llegarías a la cuidad, el departamento está hecho un desastre. Seguro Kido se pondrá furiosa.
—No, Kido no vino conmigo.
—¿No? ¡Ah! De la que me he salvado. "Lo sabía, a ella no le importa"
—No pude comunicarme con ella, pero estoy seguro que vendrá pronto…y seguro que te mata a golpes.
La manera tan estúpida de intentar decir algo gracioso solo empeoró el silencio que se estaba formando. Seto aun sentía dudas sobre si usar o no su habilidad, lo conocía desde su infancia y sin embargo nunca lo entendería.
—No intentaste llamar a Shintaro-kun~
Seto captó el problema. La manera en cómo ponía énfasis al mencionar el nombre del ex integrante del grupo siempre había llamado su atención, pero hasta ese momento no lo había tenido claro.
—Shuuya…
—Eh~…De todas formas, se enterará mañana si prende la televisión.
—¡No seas un idiota!
Kano no pudo evitar que su máscara se deshiciera un poco, mostrando el rostro sorprendido por la inesperada reacción de Seto. Ya a estas alturas le temblaba la mandíbula.
—¿Qué se supone que piense de ti? ¿Por qué, Kano?, ¿hay algo que no me has contado? ¿No te he dicho que contaras conmigo para cualquier cosa? Recuerdas ese día en el cementerio…
—Fue hace unos años. Por Dios, que esos lugares ponen muy triste a uno…
El de mirada gatuna le dedicó una sonrisa traviesa.
Seto, con el cuerpo temblándole ligeramente, pestañeó repetidas veces. No tenía más opción que "robarle" algo de información.
"Vete, no quiero seguir con esto. Perdóname, por favor."
—Será mejor que me vaya, el policía me dio solo pocos minutos.
—¿Verdad que es un cascarrabias?
—Asistiré al juzgado mañana. Lo prometo, si es necesario pasaré a testificar.
—Eres un bueno chico, pero no necesitas hacerlo, Kousuke.
"Vete, por favor ¡Vete!"
—Hasta mañana, Kano.
—Seguro, te veré luego.
—¡De pie para recibir al Juez!
Era el día. Una multitud de gente se encontraba en la corte, entre periodista, familiar de las víctimas, policías, testigos y muchas más que serían importantes para su elaboración. Lentamente, Kano fue llevado por dos policías hacia su lugar asignado, sujetado por unas esposas. Aunque intentaba ignorarlo, sentía las miradas de odio por parte de mucha gente. Antes de sentarse, pudo ver a Seto en la primera fila, sonriéndole débilmente.
"Aquí estoy"
Ya todos en silencio, cada abogado empezó a departir. Uno en contra, otro a favor. Kano ignoró por completo las preguntas que se le hacía, dedicando solo una sonrisa relajada o inocente a quien se la formulaba. No tenía sentido responder. Ya sabía que ocurriría.
—Diez víctimas en total, todas con las mismas contusiones, heridas y cortes. Se las encontró en varios callejones de la cuidad. La última de ellas, de unos dieciséis años, tenía un corte en el abdomen y se presenciaba evidente intento de abuso. ¿Hay algo más que deba decir para que este criminal sea llevado a cadena perpetua?
—¡Objeción! Señoría, tengo en mi mano el expediente médico de Kano Shuuya, y puedo justificar que…
—¡Justificar! La evidencia es más que clara…
Y hubiera seguido así todo el rato, si no hubiera escuchado una voz femenina que lo llamaba a gritos.
—¡Shuuya!
—¿Tsubomi…?
Si ya sé, no hubo nada de KanoKido *esquiva un tomate*Juro que se hacía largo así que lo partí. Sé que arriba decía one-shot, pero será uno de dos parte ¿sip? Un two-shot *bum dam tss*
Ya está, en unos días subo la segunda y última parte. Espero sus review OwO siiiiiiii Lindos y deliciosos review UuU ¡Bye!
