Advertencia: Los personajes de Strawberry Panic le partenecen a:

Sakurako Kimino (historia)
Namuchi Takumi (dibujos)

Regresa, por favor

Hikari tenía una voz preciosa, de eso nadie lo dudaba. Pero últimamente estaba apagada, y con la mirada perdida en algún lugar de los recuerdos guardados en su memoria. Quería entender el porque Amane se había ido así porque así, sin darles explicación alguna. Por más que Yaya, Shion y las mismas Nagisa con Shizuma le hablasen de que se calmara y no tome decisiones tan apresuradas, Hikari ya había tomado su decisión final.

—Le es muy duro comprender el motivo que llevo a Amane irse sin decir nada repentinamente —dijo Nagisa como un comentario a las demás.

—Yo quisiera entender que pasa o pasó por la cabeza de Amane. Es que quiero matarle —comento Yaya muy irritada.

De a poco y con el pasar de los días, Hikari perdió todas las ganas de seguir viviendo. Agotó todos los recursos de Fe y Esperanza, y simplemente se rindió a las decisiones del destino. Como cada día, y cada noche, ella cantaba hacía la luna, con los ojos cerrados, con una milésima luz de esperanza que se rehusaba a morir.

Una noche, de tantas, y después de haber pasado una tarde amena junto con las chicas, decidió ir al balcón de su habitación a cantar como era su costumbre. Y a las 8:00 pm ella empezó a entonar una canción triste, sin percatarse de que había alguien más en su habitación. De repente, dejo de cantar y abrió los ojos. El silencio reinaba.

—No dejes de cantar, princesa. Quiero escucharte.

—¿Amane?

—Sí, soy yo.

Hikari la miraba como mirar un fantasma. Amane presentaba golpes y estaba apoyada con un bastón. Hikari se acercó para tocar a su amada, y al descubrir que era ella, la abrazo rompiendo en llanto. ¿Por qué tardó tanto en volver?

—No quiero volver a recordar todo lo que pase. Déjame estar contigo, rehacer mi vida.

—¿Y tu familia, Amane?

El silencio de Amane delataba que su familia había sido el problema del ausentismo de ella por mucho tiempo. Hikari la trato como si fuese un bebé. Cuando las chicas se enteraron, decidieron olvidar aquello y simplemente la aceptaron y le dieron el apoyo que Amane necesitaba. Star Bride, el caballo blanco de Amane, vivía en el establo que tenía ella, y corto toda comunicación con su familia.

Amane tardó mucho tiempo en cerrar esas heridas, pero lo iba haciendo gracias al amor de Hikari. E Hikari volvió a cantar como era su costumbre y como cada noche, cantaba a la luna y a su amada.

Notas de la Autora:

¡Aquí estoy!

Y con historia nueva. Bueno, en realidad es una pequeña historia de esta pareja que me gusta mucho. Y con un anime diferente al acostumbrado.

Espero que les guste, como a mi me gustó escribirlo.

Me despido, espero que disfruten de la lectura y por favor, dejen un Review, me harán una escritora feliz.

See you...