Disclaimer:Los personajes son exclusiva propiedad de J.K
A James siempre le han gustado las cosas simples de la vida, darse pequeñas satisfacciones. Entrenar día si día también al Quidditch, escuchar los Beatles por las mañanas mientras espera durante unas aproximadamente dos horas a que el Chucho desocupe el baño, comer chocolate en la biblioteca sabiendo que está prohibido… "Prohibido", esa es una de sus palabras favoritas, está en su lista de palabras favoritas al menos, alineado debajo de "Lily" y encima de "bromas" Le encanta desafiar lo prohibido, quebrantar las reglas, ser un gamberro, que él piensa que es para lo que ha nacido, que es lo que él es. Un merodeador, Cornamenta.
Por eso, cuando escucha el grito histérico de Evans, sabe que ha hecho bien su trabajo, que todo está bien en su mundo. Y le encanta su mundo, ama estar con sus amigos, escuchar a los Beatles y jugar al Quidditch. Adora hacer bromas y joderle un poco la vida a Quejicus, pero por sobre todas las cosas, incluso más que comer chocolate y meter bengalas en los pantalones de Lucius Malfoy, James ama el aspecto que adquiere Lily cuando se cabrea. Sus ojos brillan y su pelo se alborota, saliendo del apretado rodete que generalmente tiene puesto, y, aunque ella no se dé cuenta, cada vez que discute con él su cuerpo se va acercando más al de James, mientras le señala molesta con el dedo índice y le grita que es un idiota. Esos momentos son los que él aprovecha en acercarse fingiendo que la está conteniendo con sus brazos para que se tranquilice y se le pase el cabreo en su contra, mientras disimuladamente huele su perfume y apoya su pecho contra el de ella, que sube y baja irregularmente, por el enojo que lleva encima.
Esa pelirroja tiene un carácter de los mil demonios y eso a James le gusta, le gusta discutir con ella por todo y por nada, preparar respuestas para sus preguntas y oír como ella lo llama desde el otro lado del pasillo, aunque no sea para declararle su amor eterno, más bien lo contrario. Lily Evans simplemente le gusta y él disfruta de cada una de las cosas que la pelirroja le hace sentir, desde mariposas en el estómago hasta vértigo, confusión y dudas. Le gustan todos los momentos que pasa con ella, por mas simples que sean, desde una pelea a gritos en la sala común, una tarea en grupo para Transformaciones, oír cómo contesta a las preguntas del profesor Slughorn o, simplemente, por pura "coincidencia" sentarse junto a ella en una que otra comida.
Pero lo que a él más le gusta, y eso está seguro que no lo cambiaría ni por un millón de escobas, es la expresión de desconcierto y algo más que adquiere Lily cada vez que él, aprovechando un descuido suyo, le dice al oído que la ama.
Hace mucho que no escribía de esta pareja :3
Muchas gracias por leer.
Saludos :)
