Saint Seiya y sus personajes son propiedad de Masami Kurumada. Yo, solo los uso para mis fanficis que son sin intensión de recibir algo por ello.
ADVERTENCIA: En este FANFIC, muchos de los personajes han sido modificados para el bien de mi fic. Por lo que si no les gusta, pues mejor no lean…
El Tiempo que Paso…
Después de tanto tiempo
Lo que se deja pasar, difícilmente se puede recuperar…
Se habían alejado lo suficiente de todos los invitados. Ambos estaban en el jardín de aquella casona, lugar donde se llevaba a cabo la fiesta de cumpleaños de Julián Solo, un amigo en común.
Un silencio incomodo, uno de aquellos que le sigue aún momento desagradable o una conversación que se debe postergar por más tiempo o tal vez no, ninguno de los dos lo sabía…
Si no vas a decir nada, mejor…- sus verdes ojos buscaron la manera de alejar ese incomodo momento y más allá de eso, alejarse de él – yo debo…- quiso decir, más una mirada azul lo detuvo –
Tan incómoda te es ahora mi presencia? – pregunto con aire de indiferencia que trataba de ocultar el dolor, que el saberse una molestia para Mu, le causaba –
…-no dijo nada, ni para negar o afirmar. La noche, las estrellas y luna eran un escenario perfecto para ese momento, lleno de tristeza, dolores y recuerdos. Una noche taciturna–
Bien, solo quería que supieras que nunca quise dañarte…que lo que dije aquel día solo fue un momento de rabia y dolor, más no…- que podía decir en su defensa?, seguro que nada, porque que excusa podría dar para su tan egoísta actuar –
Dolor?, no recuerdo haber hecho algo para provocarte ello – interrumpió, estaba cansada de escuchar reclamos e intentos de animarla. Ella ya lo tenía aceptado y asumido, no había porque seguir dándole vueltas al mismo asunto – no quieras corregir algo que muy en el fondo sabes quisiste hacer, porque vamos cuanto tiempo paso?, bien pudiste ir y buscarlo, más allá de mi por él…- dejo salir un suspiro, tratando de controlar la creciente molestia que le embargaba – renunciaste a tu derecho a él, y me insultaste de la peor manera al hacerlo…pero, es tu derecho y yo…- se mordió los labios antes de continuar sus palabras. Tenía que tomar valor para decirlas – no puedo negártelo – finalizo –
Y que hay de ti? – la mirada azul ahora se concentró en la verde, buscando en ella la respuesta que sabía no escucharía y es que conocía también a Mu, que podía asegurar que se estaba aguantando muchas cosas. La había lastimado de a peor manera y no solo a ella… –
Nada. Todo se acabó el día que tú decidieras, humillarme de la manera que lo hiciste y aun así yo estaba dispuesta a escucharte…a disculparte, pero sabes…si hay algo que termino por matar esas esperanzas, fue el no verte llegar ni siquiera la noche que él nació – sus ojos se nublaron y se odio así misma por mostrarse tan vulnerable – sabes que…- respiro profundo para no dejarse llevar por las emociones que la abordaron cuando vio a Shaka – tratemos de llevar las cosas bien. Si no por los dos por él, si? No quiero que mi hijo se afectado por tontos errores que comenten sus padres – sin más que decir, se dispuso a dejar atrás al rubio y regresar al salón principal. Ya era muy tarde, debía regresar y ver como estaba su bebé –
Espera – el de ojos azules, se sintió la peor basura del mundo por haber dañado a quien antaño fuera su esposa – Mu yo…- sus palabras murieron al no ver que la mujer se detuviera. No estaba interesada en lo que sea que quisiera decir –
…- se arrepintió el haber accedido a ir ese día a esa fiesta –
***M***
Estas bien? – Shura, fue quien la abordo ni bien la vio regresar al salón –
Sí – sonrió tratando de que su amiga no se preocupara de más por ella – todo está bien, pero quiero ir a casa – expreso en un pequeño suspiro cansino, que alerto a la peli negro verdoso –
Entonces vamos – sin más que decir ambas se dirigieron a donde se encontraba el festejado para despedirse, y así poder salir del lugar –
Mu, Shura hace tanto que no veo a mi arquitecto e ingeniero preferidas! – el joven peli azul se veía muy animado como para no darse cuenta que había tomado de más –
También es un gusto Julián, pero ya nos tenemos que ir – hablo la española con calma tratando de no llamar mucho la atención –
Porque! Si la fiesta recién comienza! – grito el menor con cierto enfado – no, de ninguna manera se pueden ir! Sorrento! Sorrento! – llamo a su mano derecha –
Dígame – se presentó la joven –
Diles que hora son y por qué no se pueden ir – ordeno el peli azul –
No le hagan caso – susurro la chica ignorando las ordenes de su jefe – si se tienen que ir, yo me encargo – le sonrió, antes de girarse para llevar al joven billonario del lugar – aun no a saluda a la Srta. Saori, vamos por allá – le indico –
Saori! – Al parecer el asunto de su marcha se había quedado atrás –
Ya vámonos – con esas palabras ambas mujeres, dejaron la fiesta –
***M***
Camus, acaba de llamar el asistente de Minos, dice que necesita hablar contigo y el abogado de la otra parte – anuncio la asistente asomándose a la oficina de la peli aguamarina –
Oh! Ya me encargo – respondió mientras dejaba de lado sus lentes sobre el escritorio – Marín, puedes ver si Mu está disponible, necesito hablar con ella – pidió a la chica que asintió y salió a cumplir lo pedido –
Camus, esta ocupada? – Afrodita, asomo su cabeza –
No, dime – la peli aguamarina tomo una carpeta de su escritorio y se dispuso a dar encuentro a Dite –
Que paso? – Cuestiono de manera seria, sorprendiendo un poco a Cam -
Que paso, de qué? – se hizo la desentendida y es que no le apetecía hablar de ese asunto en esos momentos –
No te hagas la tonta conmigo – expreso mientras se cruzaba de brazos con enfado –
Dite, ahora no – su expresión muto por breves momentos – tengo que hablar con Mu sobre cierto tema y no creo que sea agradable…– iba diciendo –
Sigue sin haber respuesta? – Dite dejo salir un suspiro al entender que tema iban a tratar –
Si, ya me canse de insistirle pero Mu, tiene todo el derecho y razón – la peli celeste asintió a sus palabras –
Srta. Camus, la Srta. Mu está reunida con el señor Jungfrau – informo la pelirroja, que había ido tras las dos mujeres – y me dijo que había solicitado una reunión con ustedes por la tarde, que no lo olvidaran – agrego –
Bien, dile que necesito hablar con ella y que cuando tenga tiempo me dé una llamada – acepto la abogada –
Ira a almorzar con su suegro? – consulto Dite –
Pues…- Marín no supo que contestar a ello, pues no había preguntado sobre ese asunto –
Ira con él – la ingeniero se sumó en la conversación – tiene un asunto que tratar – explico al ver la mirada curiosa de Dite –
Entonces solo seremos las tres – sin más ambas se retiraron del edificio, dejando atrás a una confundida asistente –
***M***
Haber…- Mu dejaba con delicadeza al dormido bebé – listo, ahora duerme…- sonrió mientras acomodaba la sabana –
Y bien? Que te dijo mi hijo? – Shijima no pudo ocultar la pequeña sonrisa que le había provocado el ver a Mu cuidar con tanto amor a su nieto. Como su hijo fue acometer tremenda burrada. Si solo con ver a Mu, él supo que era la indicada –
Pues…- la pregunta le había traído lo acontecido tres noches atrás, por lo que dejando un suspiro contesto – solo se disculpó –
Enserio? – El pelirrojo se sorprendió al escuchar ello – eso está bien. Supongo que no han hablado sobre el divorcio, cierto? – acertó a decir el hombre en tanto se acercaba al moisés que reposaba junto a Mu, tras su escritorio – quieres mi consejo? – la peli lila solo lo miro con algo de sorpresa – Aarman, merece crecer en un hogar, tú se lo das de eso no hay duda pero…- Shijima alzo su mirada azul a la verde – creo que Shaka y tu pueden darse una oportunidad más, o al menos intentarlo por el bien del niño – concluyo –
Yo…- Mu suspiro no sabía que podía decir a eso, ella era consciente de que su niño necesitaba a su padre, pero Shaka…ese era el problema, no sabía cómo debía actuar con él –
No lo tomes como una orden, sino como una sugerencia, Shaka es mi hijo y lo quiero, pero por Atena te juro que a veces me pregunto dónde dejo su cerebro, como para hacer las cosas tan mal – negó – si tú crees que no puedes está bien, yo te apoyo…más debes estar segura de tu decisión – con el termino de sus palabras, la puerta de la oficina se abrió –
Mu, necesito…- el peli azul que había irrumpido callo al ver al que conocía como es ex suegro de Mu – interrumpo? – cuestiono serio –
Saga, cuantas veces te eh dicho que toques? – la voz de Mu se había tornado seria –
Disculpa – pidió el hombre, mientras se acercaba al escritorio – pero necesitaba hablar contigo urgente y…- sus palabras murieron en su garganta al darse cuenta de que Mu le prestaba poca atención –
Te dije a las 10: 30 am, Shura te iba a asesorar con los planos. No llegaste, lo siento si ella ya no está – expreso sin dejar de buscar en su agenda –
Lo sé, pero… – quiso replicar –
Saga, son la 1:30 pm es hora de almuerzo. Regresa más tarde – corto las palabras del peli azul – le diré a Shaina que te confirme una nueva cita con Shura – sin más envió un mensaje a la asistente de la española – otra cosa? – pregunto por cortesía. No se sentía con ánimos de tratar con alguien que no sea su bebé o su suegro–
Sí, quiero saber si me asesoraras con el diseño de los departamentos? – la mirada verde de Saga era de enfado –
Ya hable de ello con Kanon – respondió mientras se ponía de pie dispuesta a tomar a su hijo y salir de la oficina – sí, necesitas algo puedes decírselo a June – sin más y acomodando a su pequeño en sus brazos salió en compañía del pelirrojo que veía con cierta burla al peli azul –
***M***
PV: hola! :P hace mucho!
Ikki: otra vez?! –
PV: si! Otra problema alguno! xC –
Ikki: disculpe señor ya no lo ofendo…-
PV: más te vale que no estoy de buenas…-
Ikki: porque? Porque Perú empato contra Venezuela y todos culpan a Pizarro? – xp
PV: T.T tenías que recordármelo! –
Ikki: ya empezó xc –
