Cartas a mi amada
Ranma había ido a otro entrenamiento sólo, lejos del dojô Tendô. Siempre era bueno tomar las distancias de vez en cuando con Akane. Un suspiro salió de su boca al recordarla, a pesar de lo insoportable que llegaba a ser la quería demasiado. Incluso la decisión de volver a entrenar después de todos los enfrentamientos peligrosos que llegó a tener era por ella, en el último combate contra el rey Saffron casi la perdía.
Comenzó el entrenamiento sin contenerse, retándose en cada oportunidad, usando todo a su favor sin importar usar la apariencia de chica o de chico. Pero cada noche sacaba papel, tinta y un pincel.
" Querida Akane Tendô:
Me he enfrentado a cada ser que presentaba un peligro para mí teniendo te en mente. Creyendo firmemente que por ti derrotare a cualquier mal para verte sonreír cada día. Espero que cada día que pase aquí me haga ser capaz de cuidarte, de protegerte y de amarte como nunca has visto
Con amor Ranma Saotome"
"Mi amada Akane:
Hoy he encontrado un lugar hermoso al escalar una da las montañas. Me encantaría traerte aquí algún día, sé que no te sería difícil seguirme pero me daría mucho miedo que te lastimaran por lo testaruda que llegas a ser conmigo. Lo pensaré con calma antes de volver a mencionar el lugar. Cuídate.
Ansiando verte de nuevo Ranma"
"Las luciérnagas han venido constantemente cerca de mi tienda, te llevaré algunas para demostrarte que tú eres como ellas en mi corazón, Akane, iluminando cálidamente no ser incluso en la más húmeda y oscura noche"
"Te encontré en el cielo cuando miraba a las estrellas. Si te preguntas por que miraba a las estrellas fue por culpa de un oso que destrozó la tienda, pero lo ahuyente a tiempo, no hubo daños aparte de la tienda de campaña."
"Tal vez sea demasiado pronto pero quiero volver para oírte, hablar contigo, discutir, perderme en tu mirada y hacerte reprochar. Quiero regresar para ver todas las facetas de ti que me muestras. Por qué las amo todas, porque te amo completamente Akane, y deseo estar contigo por siempre"
Antes del amanecer Ranma se levantó antes de amanecer, guardo todas sus cosas dejando afuera las cartas, que venían en un sobre cada una con la dirección de dojô Tendô a nombre a Akane. Se colocó la mochila y encendió la fogata que había usado la noche anterior. Lanzó cada una de las cartas al fuego y cuando termino de arder la fogata regreso a donde Akane lo esperaba.