Título: Valiente
Categoría: Transformers
Clasificación: K
Advertencia: Drabble. Spoiler de la película. Bayverse.
Disclaimer: Este Fanfiction no persigue ningún afán lucrativo, todos los derechos de autor de ©Transformers son única y exclusivamente propiedad de Hasbro y Takara Tomy.
Resumen: William Lennox nunca en su vida había visto tanta ferocidad y valentía en los ojos de una persona. Eso, por supuesto, hasta que cruzó mirada con Mikaela Banes. / Drabble. Bayverse. No hay emparejamiento.
Valiente
Por: Phaos-sama
"El valor se encuentra en los lugares más insospechados."
John Ronald Reuel Tolkien
William Lennox nunca en su vida había visto tanta ferocidad y valentía en los ojos de una persona, pero no cualquier ferocidad y valentía, sino esa dosis que te quema con la mirada y atraviesa el alma como una saeta de fuego. No había hallado a ningún portador de esa ferocidad incandescente y valentía aplastante, rasgos que, con tan sólo cruzar mirada, te anclan al suelo y te dejan sin aliento. No es como si los soldados que van a la guerra no fueran feroces ni valientes… pero esa es harina de otro costal.
William Lennox no había experimentado esa parálisis hasta que se topó con los ojos de Mikaela Banes. Esa joven, desconocida y hermosa, lo había detenido con tan sólo una mirada que mostraba el rugido de la ferocidad y el ardor de la valentía marcados en la tinta azul de sus ojos, y que con los rayos de un sol casi escondido, se veían grises y gatunos, como los de un animal inminente. Esos ojos, feroces y valientes, lo anclaron al pavimento, lo inmovilizaron y callaron ante tanta bravura destellando y quemando como lava ardiente a través de ellos.
En ningún momento, ella flaqueó, estaba decidida a cumplir con una misión que ella misma se había encomendado: el ayudar a los amigos y aliados en esa guerra de otro mundo. Y la sentencia que lo dejó ceder y sin nada para argumentar fue:
—No me iré hasta sacar a Bumblebee de aquí.
Entonces lo supo. Mikaela Banes era una joven de armas tomar. Una chiquilla cuya ferocidad y valentía eclipsaba por completo a cualquiera de los soldados con los que haya ido a la batalla. Porque en sus ojos, residía la llama ardiente de un alma indomable y un corazón valiente. En ella vivía el autentico espíritu de un guerrero, el reflejo de un ser humano verdadero.
