Drabble de Julio para The Battle of Fire With Fire. Variables de los Licántropos:
Color: Verde
Lugar: Mystic Falls
Palabra: Arrogancia
#PALABRAS: 471.
DISCLAIMER: Los personajes no me pertenecen, son propiedad de la CW.
AVISO: Este fic participa del reto de Julio de "The battle of fire with fire" del foro "The Vampire Diaries: Dangerous Liaisons".
Espero que os guste :)
A NORMAL LIFE
Bonnie se dejó caer en la cama de su antigua habitación. Había echado de menos la casa de su familia de Mystic Falls. Su casa, se recordó. Ahora ella era la única que podía habitarla. Porque nadie de su familia había sobrevivido a la llegada de los Salvatore a Mystic Falls. Bueno, su madre no estaba muerta. Más o menos. Bonnie prefería no pensar en ello.
La bruja pensó cuando vio morir a su abuela, a su padre, a su madre, que nunca dejaría de sentirse sola. Que nunca estaría totalmente bien. Y había tenido razón.
Pero ahora, además, se sentía doblemente sola. No sólo había perdido a su familia, sino también a Elena. No volvería a ver a su mejor amiga, y si ella no despertaba en sesenta años, sería por su culpa.
Sin embargo, incluso si era la pena lo que dominaba el carácter de Bonnie la mayor parte del tiempo, a veces también se sentía aliviada. Desde que Elena no estaba en Mystic Falls, ella se había alejado de los Salvatore y de todo lo sobrenatural, y estaba mucho más tranquila. Y, sobre todo, estaba a salvo.
Aún recordaba la última vez que había estado a punto de morir, a manos de Kai Parker. Por suerte, Damon la había salvado. Bonnie todavía no comprendía cómo había podido caer tan fácilmente ante Kai, cuando previamente lo había herido. Varias veces.
A veces se sorprendía pensando en él. No porque lo echara de menos, o porque quisiera que volviera a la vida, sino por las cosas que aprendió gracias a él. Aprendió sobre los Gemini, sobre los mundos prisión, y sobre todo, aprendió a pensar en sí misma.
Era por eso que ahora estaba feliz. No tenía que hacer frente a Damon, con su habitual arrogancia y mal humor. No tenía que soportar ver a Caroline y a Stefan juntos y olvidándose de todo a su alrededor. No tenía que ver cómo Matt se metía en una espiral autodestructiva intentando alejarse de todo lo sobrenatural. Sólo tenía que preocuparse por ella misma.
Y eso hacía que estuviera mucho más tranquila. Ahora, la chica llevaba una vida muy tranquila. Estudiaba a distancia; trabajaba en el Mystic Grill para poder pagar las facturas de su casa y de la de su abuela; visitaba a su madre siempre que quisiera…
Y sin embargo…
Sin embargo, procuraba visitar a Elena una vez al mes. Iba hasta el panteón, deshacía el hechizo que lo protegía momentáneamente y contactaba con Elena para hablarle de cualquier tontería que hubiera sucedido. Y eso también la hacía feliz.
Porque Elena la comprendía. Era su mejor amiga, claro que lo hacía. Y eso sólo lograba que Bonnie se sintiera más tranquila. Tranquila porque, por primera vez, alguien le hacía creer que buscar una vida tranquila y normal no estaba mal.