Ki onda gente! Sean bienvenidos a una nueva historia de Citrus. Está vez les traigo un ship quema mundos que varios ya sabrán cuál es: Yuzu xMatsuri *Inserte imagen del planeta en llamas* :v
Por cierto, ando sad porque acabó little witch academia :,v
Advertencia: Au (Universo alterno), posibles Ooc e incesto.
Citrus y sus personajes pertenecen a Saburo Uta.
Yuzu Aihara iba caminando tranquilamente por aquel campus, que sería a partir de ahora su nuevo lugar de estudios. Su madre, había conseguido una gran oportunidad de algo trabajo en esa ciudad, lo que significó tener que dejar su estilo de vida antiguo para mudarse hasta allí, Ahora que había sido trasladada a esa universidad, quería al menos familiarizarse con esta; una pequeña visita venía bien antes de su primer día de clases.
Ignorando miradas curiosas, provocadas por su tono rubio tal vez, miraba y exploraba cada rincón de ese centro de estudios, destacando siempre que era lo que le agradaba y lo que no.
-Bien, parece que es mejor de lo que me imaginaba.- dijo para sí misma.
Terminando su visita, decide volver a casa, sin embargo al voltear en una esquina siente chocar con algo, o más bien con alguien.
-Lo siento, pero tengo prisa- escuchó decir a la desconocida, que se reincorporaba del piso.
-Perdóname también, iba algo distraía- dice ayudando a recoger las cosas de la desconocida.
Finalmente, cuando logran mirarse a la cara, surge un silencio entre las dos.
Por su parte, a Yuzu algo se le hacía familiar en la otra, ese cabello rosa, le llamaba mucho la atención, después de unos momentos nota que la más baja también le está mirando detenidamente.
-¿Pasa algo malo?-pregunta algo desorbitada.
La otra muchacha, sin ningún impedimento se acerca y toma un mechón de su cabello.
-Llamas mucho la atención con ese cabello teñido.
"¡Pero si tú llevas el cabello de rosa!"- fue lo que quiso decir en ese momento.
-¿Qué?
-Eres nueva aquí ¿Verdad?-preguntó la menor.
La rubia seguía aturdida.
-Este… si, empiezo clases mañana, estoy aquí para familiarizarme un poco con la universidad.
Y allí estaba de nuevo, su mala costumbre de hablar de más frente a los extraños.
En ese momento se oye un timbre, haciendo que la desconocida se exalte.
-Parece que llegaré tarde a clases de nuevo-dijo- por cierto, mi cabello es natural.
-¿Eh?
-Bueno tengo que irme-dijo tomando sus cosas. Fue un gusto verte… One-chan- dijo antes de voltear la esquina.
-¡¿Cómo me dijo?!- gritó Yuzu, al ver que se acercaban más alumnos, decidió restarle importancia y seguir su camino, sin embargo, una hoja de papel en el suelo la detuvo.
Al recogerla se encontró con el dibujo de un paisaje marino a la luz de la luna.
-"¡Qué lindo!"- Pensó-"¿Se le habrá caído a esa chica? Ahora que lo pienso, se dirigía a la facultad de arte, espero no sea importante"
Guardó el dibujo y comenzó a caminar.
-Supongo que puedo buscarla y devolvérselo mañana.
-Ya estoy en casa-gritó Yuzu al llegar a su hogar.
Fue recibida por su madre, que se encontraba cocinando.
-Bienvenida ¿Qué tal te fue?- preguntó la señora Aihara.
La ojiverde tomó asiento antes de contestar.
-Pues bien, el lugar es realmente agradable-contestó alegremente.
Yuzu le contó todo lo sucedido a su madre, obviando su extraño encuentro con cierta pelirosa.
-Bueno, supongo que tendrás muchos ánimos para empezar mañana a estudiar.
-No tengo otra opción- dijo la rubia de manera burlesca, ganándose una pequeña reprimenda por parte de su madre.
Después, Yuzu fue se dirigió a su habitación, allí se encontró con un llamativo escenario.
En lugar de una, eran dos las camas que se hallaban en su cuarto, al lado de una de ellas, tres grandes maletas y pertenencias que no reconocía para nada.
-¡Mamá! ¿Por qué hay dos camas en mi habitación? -preguntó bajando las escaleras rápidamente.
Su madre dejó de picar unas verduras, y se dirigió hacia ella.
-¡Oh! Recuerda que antes de llegar aquí te comenté que tu prima, Matsuri, se mudaría con nosotros también- habló la señora.
Pues sí, al parecer otra de las razones por las que vinieron a vivir a Tokio, fue porque la madre de Matsuri había muerto hace poco, y al faltarle tres años para cumplir la mayoría de edad la tutela de esta pasó directamente a la señora Aihara.
A decir verdad, poco recordaba de su prima, solo sabía que le era menor por dos años y su peculiar cabello rosado, a menudo le llamaba "cabeza de chicle" Y la dejó de tener contacto con ella a los siete años.
-Entonces ¿Compartiré la habitación con ella?
-Sí, espero no te importe, ya que no tenemos más que dos cuartos aquí, fue bueno que la mudanza haya traído sus cosas aquí.
No le desagradaba la idea de alguien más en la casa sobretodo tratándose un familiar, pero se le hacía un poco incómodo.
En ese momento, el timbre de la casa sonó
-¡Debe ser ella!- dijo emocionada su madre.
-¿Qué? ¿Tan pronto?- preguntó Yuzu sorprendida.
-Deja de decir tonterías y ve a abrir- le dijo su madre.
La ojiverde se paró de su asiento y fue a hacer lo que ordenó su madre..
Se dirigió a la puerta y la abrió esperando encontrar a su pequeña prima.
-Hola.
Pero la que estaba en la puerta era esa muchacha de pelo rosa con la,que chocó esta mañana.
-¡¿Tú qué haces aquí?!-preguntó la rubia esmeradamente.
-¡Matsuri-chan! ¡Bienvenida!- La voz de su madre y esas palabras la dejaron en shock.
-"¿Espera qué?"- fue lo que pensó.
-Buenas tardes Tía-dijo la menor entrando a la casa-Gracias por dejarme quedar aquí.
Yuzu seguía sin asimilar la situación.
-Es un gusto verte de nuevo, Yuzu one-chan-habló tranquilamente Matsuri.
Y eso fue lo que necesito para salir de su confusión.
La chica de cabello rosa con la que se encontró este día, en realidad era su prima menor Matsuri.
Mientras almorzaban, Yuzu comenzó a explicar a la señora Aihara la razón de su anterior comportamiento.
-Bueno, es una coincidencia que estés estudiando en la misma universidad que Matsuri, así podrán irse juntas todos los días-comentó alegremente la mayor de las tres.
-Pude, reconocer a Yuzu al instante, sin embargo, no entiendo por qué ella no lo hizo conmigo- dijo la pelirosa.
Yuzu seguía comiendo sin mencionar nada.
-Bien Yuzu, puede ser algo boba en ocasiones-dijo su madre.
-Sí, creo que tienes razón Tía.
Y la verdad no le gustaba que hablaran así de ella.
- Yuzu ¿Podrías llevar a Matsuri a la habitación?
Sus pensamientos fueron interrumpidos por su madre.
-Cla…claro…Matsuri, acompáñame- dijo parándose de la mesa.
Ambas chicas comenzaron a subir las, escaleras, hasta llegar a la habitación.
-Bueno, aquí es- dijo Yuzu abriendo la puerta y entrando seguida por la menor.
-¿Compartiremos?-preguntó la pelirosa.
-Sí, lamentablemente esta casa solo dispone de dos cuartos y una la ocupa mamá.
Matsuri comenzó a inspeccionar el cuarto.
-No importa-dijo sentándose en la que predijo era su cama, pues allí estaban sus cosas.
Por su parte Yuzu se quedó en la puerta observándola detenidamente; enserio estaba totalmente cambiada desde la última vez que la vio. Seguía manteniendo ese aire infantil, pero con un toque de madurez, tenía en los ojos una chispa de picardía que la hacía estremecer que iba muy bien con su cabello acomodado hasta los hombros. No podía decir mucho de su cuerpo (Nota de autor: Eso sonó raro xD) pero debía admitir que no le sentaba nada mal ese aspecto, en algún momento llegó a pensar que era linda.
-Si sigues mirándome así, voy a empezar a creer que eres una pervertida.
Y esas palabras la sacaron de sus pensamientos. Acto seguido, su cara se tornó de rojo.
-¿Qué dices?
Ahora recordaba que de pequeña, Matsuri siempre gustó de jugarle bromas.
-Jeje, nada.
Yuzu se relajó.
-Bien, termina de acomodarte, yo bajaré a ayudarle a mamá con los platos-dijo Yuzu, para después comenzar a bajar.
-Yuzu- llamó su madre mientras lavaban los platos.
-¿Si?
-Sabes, mi hermana murió hace poco, debio ser un duro golpe para ella, peronosotras somos ahora la única familia de Matsuri, así que, por favor ayúdame a darle una vida normal, sé que debe ser incómodo, alguien más en esta casa, pero; es nuestro deber como familia.
Yuzu dejó de lavar y le sonrió fuertemrnte.
-Tranquila, ¡Daré lo mejor de mí!- dijo levantando su dedo pulgar.
La noche había caído y ahora Yuzu y Matsuri se preparaban para dormir.
-¡Ah Matsuri!-dijo buscando entre sus cosas- me parece que esto es tuyo. Le extendía el dibujo que había encontrado.
-Oh, fue un golpe de suerte que lo hayas encontrado tú-dijo Matsuri recibiendo la hoja.
-Espero que no haya sido algo importante; ¿Un trabajo para presentar?
Matsuri guardó el dibujo en su carpeta.
-No, solo lo hice por pasatiempo- dijo acostándose en la cama.
Yuzu hizo lo mismo, no sin antes agregar otro comentario.
-Es un hermoso trabajo, tienes un gran talento.
Quedaron en silencio por unos momentos.
-Gracias-dijo la pelirosa- ¿Te digo algo?
-¿Qué?
La menor volteó a mirarla.
-El rubio te queda mejor que el castaño.
Y no supo porque ese comentario hizo que se sonrojara.
-Buenas noches.
-Bu…buenas noches
Final del primer capítulo, ¿Qué tal? Y que opinan de este Au :3
Espero esto tenga su apoyo.
Por cierto no tengo idea de cómo funcionan las universidades en Japón :v
Ah sí, ¿Cómo se llama la madre de Yuzu y Mei? Me olvidé y solo tuve internet para publicar :v
Autor de la imagen de portada: kiosayuki
