Disclaimer: Nada de lo que conoscan es mío, eso pertenece al mundo mágico de JK Rowling... *suspiro dramaticamente largo* Para mi mala suerte.
»×« Su tiempo paso hace años »×«
× Prólogo ×
Albus, Lily y Scorpius. Siempre era así. Y según ellos, así sería.
Nadie entraba. No hablaban el uno sin el otro. No se les veía un pelo si no era juntos. Y aunque no estuvieran ninguno en la misma casa, no tuvieran nada en común, se pelearan casi a diario, y se hicieran bromas pesadas (cosa que era rara, pues siempre estaban juntos), ninguno podía vivir sin los otros dos.
Albus Severus Potter. Calmado, comprensivo, observador, fiel, protector y súper inteligente. Morocho con un cabello indomable, con ojos verdes, no era muy alto pero tampoco muy bajo, delgado, aunque con un poco de musculo. Se llevaba bien con casi todos, y era el mismo con su familia y fuera de esta. 'Al el correcto', 'Al el perfecto', 'Al el callado' y muchos otros más, pues su familia no lo entendía como él querría, pero no le molestaba. Nunca dejaba una tarea para otro día, y no hay problema que no pueda resolver. Era el típico Ravenclaw, solo que provenía de una larga descendencia de leones. Siempre estaba al pendiente de todos, quizás un poco más de sus primas y hermanita, pero eso era un gen Weasley. A pesar de que no le gustaban los lugares ruidosos ni las fiestas, nunca estaba solo. Toda la paz que él quería y necesitaba estaba con ellos dos, aunque a veces quisiera enterrarlos.
Lily Luna Potter. Alegre, traviesa, despreocupada, valiente, ruidosa, sobre todo muy testaruda. Cabello pelirrojo ondulado, ojos verdes idénticos a los de su hermano, alta y esbelta y un con un cuerpo por el que muchos matarían. Tenía un genio capaz de hacer que Voldemort deseara nunca haber nacido. Era una alborotadora de primera, como solo un Gryffindor podía, pero nunca se la vería en un aula de castigo, ya que era muy inteligente. La gente solía pensar que era una mimada e incluso malcriada, o que solo buscaba atención, pero una vez la conocías sabias que nada de esto se le aplicaba. Se llevaba con todos, era muy competitiva, y adoraba el Quidditch. Pensaban que era raro que sus mejores amigos fueran su hermano y el mejor de este, la verdad no le importaba, no le importaba para nada. Solo quería divertirse y ser feliz, y sabía que eso solo lo encontraría con ellos dos.
Scorpius Hyperión Malfoy. Frío, calculador, astuto, arrogante, egocéntrico, pero sobre todo tenía un buen humor casi siempre, claro está, casi. Cabello rubio platinado despeinado, ojos grises de tormenta, alto, delgado y fornido, todo un dios griego. No hablaba con muchos, más bien no todos hablaban con él, gracias al pasado de su familia, pero eso ya no lo avergonzaba. Su familia no sería la mejor ni la más perfecta, ni cerca, pero los quería a todos y estaba orgulloso de ella. Era todo un coqueto, pero no le gustaba salir con nadie, y usaba, o intentaba usar sus encantos con su mejor amiga. Todo un Slytherin, lo que hacía que sin quererlo se metiera en problemas, pero eso ya no importaba tanto tampoco. Su primer año fue difícil, pero salió adelante. Sabía que estaría con esos dos hasta el fin de los días. Por eso ya nada importaba, gracias a ellos.
No tenían nada en común. Y aun así encajaban como si fueran las únicas tres piezas de un rompecabezas.
Es por esto que muchos los envidiaban, e incluso, odiaban.
Simplemente no entendían como esos dos Potter se llevaran tan bien, no teniendo ninguna similitud, o como un Malfoy de todos en el colegio, fuera el único capaz de entenderse a la perfección con ellos. No entendían como el gran Harry Potter y el despreciable Draco Malfoy permitieran semejante amistad. Claro, habían tratado de separarlos, pero no venía al caso. Parecía como si se leyeran la mente, siempre sabían dónde estaba cada uno, lo que hacía o si necesitaba ayuda.
Durante el primer año de los dos chicos, estos dos habían formado una fuerte amistad. El morocho no buscaba fama, solo tranquilidad; el rubio no quería ser conocido por ser el hijo de un ex-mortífago. Y solo… se encontrón y apoyaron mutuamente.
Al siguiente curso, entro Lily, y era la chiquilla más popular que hubiera pisado Hogwarts, aunque no le gustaba que le buscaran por su apellido, si no por quien en realidad era. Así que un día de visita a Hogsmade, aburrida, se encontró con su hermano y mejor amigo, desde ese día son inseparables.
Louis, Lucy, James, Fred, Roxanne, Rose y Hugo, habían tratado de unirse a ellos, un poco tarde. Al principio tampoco aceptaban y para ellos era como la peor traición, en especial para Rose y Hugo, quienes habían nacido y crecido con Albus y Lily. Los Weasley-Potter ahora tenían su propio grupo de amigos, pero de vez en cuando se reunían en familia, Scorpius ya era como parte, y a pesar de ese tiempo que pasaban todos juntos, se notaba de lejos que solo eran ellos tres contra el mundo.
Ahora, cinco años después, Al y Scorp en sexto y Lily en quinto, seguían siendo los mismos que cuando empezaron a andar juntos. Albus un poco menos reservado, menos callado, y hasta jugaba al Quidditch. Scorpius más arrogante y egocéntrico. Y Lily un poco más alborotadora y mucho más coqueta, para dolor de James, Al, Hugo y, por su puesto Scorpius.
Pero con los años, la envidia y el odio crecieron también. Y los que en aquel tiempo solo les lazaban piedras, ahora lanzaran peñones… Y de qué manera.
Con la ayuda de un objeto no visto en más de veinticinco años, los borraran del mapa.
¿Qué loca aventura tendrán estos tres?
N/A: Fue algo que vino de momento. Estaba empezando a escribir un proximo capi de mi otro fic cuando luego de dos párrafos, empecé con esto. ¡Espero les guste!
¡Gracias por leer y que Papito los cuide! :D
~^¤^ Moone ...Lilu ^¤^~
