Mayo, 20, 1979
Lily y James habían decidido tener un bebe desde que se casaron y su sueño se hizo realidad cuando Lily salió embarazada a los veinte años, siempre habían tenido un debate en cómo se llamaría pero no tenían ni siquiera mente para pensar en eso, James estaba más chiflado que nunca, deseaba un hijo y deseaba enseñarle todo lo relacionado con el Quidditch, travesuras y etc. Por otra parte la cariñosa Lily imaginaba a una niña, tal vez sería traviesa como su esposo o inteligente, pero quien sabe, tal y como era la iban a querer mucho.
Los días pasaron y los padres se veían cada vez más felices, el frio comenzó a irse para dar paso al calor y las hojas verdes de los árboles.
Eran las ocho de la mañana cuando Lily comenzó a quejarse y pronto fueron a San Mungo, donde felizmente sus seres queridos comenzaban a llegar y las preguntas a enfermeras y doctores no se acababan ¿Cómo está? ¿Es un niño o niña? En especial el ''tío'' Sirius que con unos regalos esperaba la noticia que pronto llego: era una niña, una bella niña pelirroja y de ojos Miel claros, muy claros, casi se podía decir que eran amarillos.
Había una gran coincidencia en ese mismo hospital y era que Narcissa Malfoy también estaba teniendo a un bebe y la sorpresa, también era niña, claro que ninguna de las dos familias sabían, Narcissa estaba en lo que era la otra parte del hospital, la sala de Maternidad ya que se había preparado todo con anticipación, mientras que Lily estaba en una sala normal, porque llego como emergencia
Los que estaban en la sala de espera oyeron el grito de una enfermera que estaba en la sala de los bebes, nadie se movió todos estaban congelados por el grito, pronto cinco doctores fueron casi corriendo con sus varitas en mano, una de las niñas no estaba respirando y los doctores hacían todo lo que podían.
-¿Creen que será Amelia?- pregunto James sus amigos.
-Creo que si fuera ella ya nos hubieran avisado- contesto Remus mientras le daba unas palmaditas en la espalda haciendo que James se tranquilizara.
Los cinco doctores que habían entrado salieron con las cabezas llenas de sudor y mirando al suelo, James creyendo en las palabras de Remus no se atrevió a preguntar y llevaban a una bebe a la sala de emergencias rápidamente.
-¿Hora de muerte?- pregunto uno de los doctores.
-7:00 p. m.- contesto una enfermera.
Mientras tanto en la sala de los bebes una enfermera había llevado a una de las bebes a checar que todo estuviera bien, las dos cunas se quedaron solas, los doctores devolvieron a la niña muerta a su cuna pero no sabían cuál era ya que las enfermeras que se encargaban de apuntar los nombres y datos no estaban así que la pusieron en donde creyeron que era.
Unas horas más tarde cuando Lily estaba ya estable, James pasó a verla.
-Cariño, hay algo que tengo que decirte- dijo James- La bebe sufrió unos problemas con sus pulmones.
-¿Está bien? ¿Qué le paso?- pregunto Lily desesperadamente
Pero las lágrimas lo dijeron todo al final, dos corazones se rompieron ese día y la idea de un hijo se esfumo hasta un año después que nació Harry James Potter.
Por otro lado, Narcissa recibía a su niña en brazos.
-Es pelirroja- dijo Narcissa con una sonrisa mientras Lucius también se acercaba a la beba- Nuestros antepasados, algunos eran pelirrojos.
Lucius no dijo nada, se encargó de cargar a la pequeña y besarle la frente con ternura.
