Almas
- Bueno, Buffy, ¿qué hacemos ahora? – preguntó Faith.
Buffy sonreía con tristeza y alegría al mismo tiempo. Habían perdido y ganado tanto a la vez que le abrumaba la mezcla de sentimientos.
- ¿Qué tal si… guardamos silencio… por los que han caído? – giró la cabeza mirándolos –. Se lo merecen.
- Me parece bien – Dijo Faith de nuevo, asintiendo con la cabeza.
Todos hicieron lo propio, y siguieron a Buffy cuando ésta empezó a caminar hacia el borde del cráter.
Unas débiles lágrimas asomaron a sus ojos y cayeron lentamente por sus mejillas.
Un leve gemido escapó de sus labios sin que pudiera evitarlo, y Dawn la miró con compasión poniéndole una mano en el hombro, tratando de animarla.
Lentamente, Buffy se dio la vuelta y miró uno a uno a todos los que allí se encontraban con los ojos cristalinos por las lágrimas.
Se fijó en que Xander también lloraba y miraba el cráter como momentos antes ella lo había hecho.
- ¿Anya? – Preguntó Buffy débilmente.
Xander solo asintió y bajó la cabeza. La rubia avanzó hasta él y se abrazaron con dulzura y cariño. Al separarse, vio que los demás que aun estaban en el autobús se habían acercado y se colocaban a su alrededor formando un pequeño círculo.
- Estoy orgullosa de todos vosotros, ¿sabéis? Sin vuestra ayuda jamás lo habríamos conseguido…
- Juntos lo hemos conseguido. - Añadió Xander apretando la mano de Buffy.
Más lágrimas caían por su rostro, aunque ahora no era la única…
Las demás cazadoras se cogían de las manos unas a otras y la miraban agradecidas mientras lloraban silenciosamente comprendiendo que el dolor y el sufrimiento habían llegado a su fin.
Willow se acercó a Buffy y a Xander y se fundieron los tres en un abrazo, al cual se unieron Dawn y Giles cuyas caras mostraban surcos de lágrimas.
Faith, que ayudaba a Wood a sostenerse en pie, tuvo que enterrar su cara en el hombro de éste para evitar que las lágrimas llegasen más allá que sus ojos. Y Wood por su parte le acariciaba la cabeza sonriendo.
Andrew lloraba también a moco tendido, solo, hasta que Xander lo atrajo hacia ellos con una sonrisa de compresión.
Fue entonces cuando Kennedy señaló al cielo, sobre el cráter.
- ¡Mirad!
Todos levantaron las cabezas y se quedaron mudos.
Muchos haces de luz empezaron a alzarse como impulsados por el viento, surgiendo desde lo más profundo del cráter y elevándose lentamente hasta el cielo…
- ¿Qué son? – Preguntó Dawn.
Buffy se acercó más todavía el borde y sonrió de alegría subiendo los brazos por encima de su cabeza.
- Son sus almas… que van a un lugar mejor…
Los demás se colocaron a ambos lados de Buffy, también sonriendo.
Una de las luces se paró un momento. En su interior había algo que brillaba mucho más que todo lo demás, y Buffy supo de quién era esa alma.
- Gracias, Spike…
La luz emitió un último brillo y continuó subiendo, hasta perderse con las demás. Juntas, se fundieron con la cegadora luz del sol y desaparecieron.
Era el momento de empezar una nueva vida…
Una vida acompañada de buenos amigos y de buenas cosas, todos juntos… pero, sobre todo, una vida acompañada de recuerdos.
Por que cuando pierdes a las personas a las que quieres, solo quedan de ellas sus recuerdos. Los recuerdos de aquellas cosas que juntos conseguisteis, que juntos hicisteis.
Así, siempre estarán contigo y jamás te abandonarán…
"Eras un campeón, y ahora eres un héroe, Spike.
A ti, a Anya, y a las demás Cazadoras que cayeron…
Gracias."