Hi!
Amai sama otra vez con ustedes, o Pamcho ewe (?.Bueno es para el reto de McSemes, con mucho cariño para Juancho, pepito, la Ortensio, vraian kun y less-chan. Los personajes no me pertenecen porque si fuesen mios tuviéramos un concierto de style five por todo latinoamerica ewe- seria multimillonaria! :3-
Perdón por los horrores que encuentren n,n
HARUSAGI
-Haru-chan~ ya regresé- abrí la puerta del departamento, lo único que podía visualizar eran las luces que se colaban por las ventanas de nuestro nuevo hogar. Quizás Haru todavía no llega de su entrenamiento.
Dejé los zapatos casi cerca del umbral de la puerta, ahora poniéndome unas pantuflas; el día había sido demasiado pesado ya que me sentí muy fatigado y lo único que quería era ir a descansar. Sin ni siquiera prender las luces del departamento, empecé a caminar en dirección de mi habitación; pero un pequeño ruido hizo que todos mis sentidos estén más atentos y la necesidad de querer dormir se disipara rápidamente.
-Qui…quien es!-di un paso hacia atrás, pisé algo y resbalé-ahh!- grité más por el susto que por el golpe que había recibido, tanteando el piso me encontré con una zanahoria?- que hace esto aquí?- me cuestione tratando de hacer memoria en que momento sucedió que dejé ese vegetal en el suelo- quizás habrá sido Haru-chan-
-Pero que listo eres Makoto- esa voz era de mi mejor amigo, apenas podía distinguir su silueta en medio de la oscuridad. Suspiré más tranquilo al saber que él estaba a mi lado pero la sorpresa fue demasiado cuando Haru encendió las luces
-Ha…Haru!- tapé mis ojos al ver como estaba vestido el de cabellos azabaches, apenas traía puesto unas orejitas de conejo y algunos accesorios que le hacía ver más violable- que haces vestido de esa forma!-exclamé muy alterado
-Esta vez no escaparas Makoto…-Haruka me lanzó otra vez al suelo y empezó a desabrochar el cierre de mi pantalón, mientras yo tenía la mejor vista del cuerpo de é acariciar su miembro, dar algunos pequeños besos en sus piernas mientras sentía la lengua de Haruka rozar en mi hombría. Algunos suspiros inundaron aquel lugar, pero fue interrumpido por una voz cantarina.
-Haru-chan! Mako-chan! Vinimos a visitarles!-el sonido de la puerta cerrándose me dio a entender que ellos habían entrado al departamento, porque no cerré con seguro!
-Haru!- exclamé mientras me acomodaba para levantarme; pero era en vano, Haruka no tenía intenciones de moverse- Nagisa acaba de entrar!- posé mis orbes en aquellas personas, cogí una zanahoria y les lancé para que no vieran esa escena tan íntima.
-Koto…Makoto…- aquella voz, abrí los ojos de golpe y lo primero que miré fue a Haru mirándome algo molesto y preocupado- acabas de tirarme un almohadazo- susurró mientras señalaba el área afectada por el impacto de la almohada.
-Lo siento, Haru-chan es que solo tuve un sueño muy raro- me acerqué y besé su frente, un pequeño sonrojo apareció en sus mejillas. Ante la atenta mirada de Haru, le conté mi sueño tan raro; al terminar mi relato Haruka empezó a reír.
-Y después dices que yo soy el de los sueños raros verdad?- se acostó en la cama y susurró- algún día haremos realidad tu sueño, pero primero aseguraremos bien la puerta- con una sonrisa traviesa, me acerqué donde Haru para demostrarle mi gran amor a hacia él.