Hola chicssss! bueno, aquí os traigo algo nuevo. Por primera vez me lanzo a escribir un fic de uno de mis personajes favoritos del manga. Espero no defraudaros con esta historia y que os guste bastante. No será una historia muy larga. No se cuantos capítulos tendrá, pero trataré de escribir todo aquello que tengo en mente. La historia está catalogada como Rating M ya que más adelante habrá escenas fuertes tanto en lucha como de sexo. Si alguien que no deba leer esas escenas las lee, queda bajo su responsabilidad ya que esta avisado. "No quiero reclamaciones luego" :p . Kiss Desam. Y como siempre "Gracias" a aquellos que lean y comenten.

Disclaymer: La historia original de este fic es mio. Los personajes pertenecen a Masashi Kishimoto, el gran creador del manga de Naruto. Otros personajes son de invención mía, así como lugares, armas y otras cosas.

Summary: La gran cuarta Guerra ninja a terminado. Naruto vuelve a Konoha tras una gran batalla. Todos sus amigos están a salvo excepto Hinata ¿Donde está? ¿Que le ha ocurrido? Tras encontrarla, un suceso extraño ocurre y alguien es devuelto a la vida ¿Quién es ese chico rubio que lo observa?

¿Donde estoy? Namizake Vs Uzumaki.

El sol bañaba la vieja aldea de konoha. La gente aún trabajaba en las tareas de reconstrucción. Los ninjas aún no habían vuelto y los aldeanos temían la muerte de todos ellos. La gran cuarta guerra ninja había traído de cabeza al mundo ninja. Se podía oír los golpes de los martillos y a los niños correr por las calles. Sus risas inundaban aquellos momentos tristes. Todos aquello seres humanos, deseaban de todo corazón ver aparecer aquellos trajes azules, chalecos verdes y bandanas de konoha.

Lejos de la aldea, en algún lugar sin especificar Gaara encontró a Naruto. El kazekage pelirrojo, observaba al rubio de ojos azules. Durante la gran batalla, los dos habían dado lo mejor de ellos. Gaara admiraba a aquel muchacho.

-Naruto.- El pelirrojo le tendió la mano.

-Gaara.- Una sonrisa se dibujo en su rostro.- ¿A que se debe el honor de que el Kazekage de Sunagakure venga a visitarme?- El muchacho se frotó la nuca.

-La batalla a terminado.- Gaara miró divertido a Naruto.- La alianza shinobi a llegado a su fin.

-Pero.- Una chica de pelo rosa se acercó con pasos cortos pero firmes.- Han decidido apoyarse unas a otras. Ya no habrá competencia entre nosotros y los ataques cesarán.

-Sakura.- Naruto miró a la muchacha con admiración. Aunque entre ellos siempre estuviera la sombra de Sasuke Uchiha, el rubio jamás dejaría de admirarla y amarla.- Ahora no podemos pensar en estas cosas.- El joven miró a su alrededor.- Solo en los heridos y en volver a casa.

Sakura miró a Naruto y asintió con la cabeza. Ella era una ninja médico, y como tal debía sanar las heridas de cualquier ninja que pusieran a su alcance. Durante horas, los heridos no dejaron de llegar. Fuego, tierra, agua, viento y rayo. Daba igual de donde fueran, solo debía salvar sus vidas.

Gaara se despidió de Naruto. El muchacho de ojos claros, se dejó caer contra el suelo y suspiró en voz alta. Había conseguido controlar el zorro de nueve colas. Kurama le había prestado su poder. Ahora se sentía completamente un Jinchüriki. Le debía mucho al Jinchüriki de las ocho colas. Killer-Bee se había esforzado mucho para ayudarlo.

Naruto cerró los ojos y la imagen de Sasuke apareció en su mente. Su mejor amigo, su compañero, su vinculo. Ese hombre de ojos negros jamás dejaría de sorprenderle. Una sonrisa se asomó en sus labios, Sasuke Uchiha no le había decepcionado ¿Donde se habría marchado?

Días después, los heridos comenzaban a mejorar. Cada país, se fue retirando a sus aldeas y los heridos iban en descenso. Naruto estaba cansado de estar acostado en aquella cama improvisada, dentro de una tienda de campaña.

-Naruto.- la voz de Iruka resonó en su cabeza.- Es hora de marcharnos a Konoha.

-Maestro Iruka.- Naruto se levantó de aquella cama y le sonrió.- Jamás creí que esas palabras fueran dichas tan pronto.

-Las demás villas, ya se han llevado a sus heridos y a sus fallecidos.- Iruka miró el cielo y sus ojos se entristecieron.- Nosotros debemos hacer lo mismo.

-¿Han habido muchas bajas?- Naruto cerró fuertemente los puños y miró el suelo.- Hay mucha gente que todavía no he visto y...

-Volvamos a la aldea- Iruka posó la mano sobre el hombro de Naruto en gesto de apoyo.

Durante el trayecto de vuelta, Naruto vio muchas caras conocidas. A algunos los transportaban en camillas aún muy graves. A otros los ayudaban a caminar y otros simplemente caminaban por inercia hacía la aldea.

-¡Naruto!- Una voz llamó su atención.- Me alegro mucho de verte.

El rubio observó al muchacho con alegría. Lee " El cejacas como lo llamaba él" estaba a su lado.

-¡Lee!- Naruto lo estrechó entre sus brazos- ¿Donde están los demás?- Preguntó preocupado.

-Kiba está bien.- Lee miró hacía atrás.- Akamaru resultó gravemente herido en la batalla. No se separa de su perro.

-¿Y Shikamaru?- Los ojos de Naruto se abrieron desmesuradamente.

-Shikamaru descansa en una de las camillas. Se quedó sin Chakra y fue un objetivo fácil a última hora. Se recuperará.

-¿Los demás?- Naruto observó cada rincón donde su vista llegaba a alcanzar.

-Ino, Chõji, Tenten, Neji, Sai y Shino, también se están recuperando de sus heridas.- Lee miró con tristeza a Naruto.

-¿Hinata?- Naruto se había dado cuenta que no la había nombrado.

-De ella.- Lee miró sus manos.- No se nada. No estaba en el campamento donde estábamos los demás. Creo que estaba con Kakashi.

-A él tampoco lo he visto.- El rubio volvió a mirar a su alrededor.- Ni a Gai.

-El maestro Gai esta bien.- Lee le levantó su pulgar y le sonrió.- La juventud aún le llena.

-¡Mira!- Sakura se acercó a Naruto y le señaló unos metros más adelante.- Ya se ve la aldea.

Naruto sonrió al reconocer la montaña donde estaban tallados los rostros de los cinco Hokages. Ya faltaba menos para llegar a casa. El resto del camino decidió hacerlo en silencio. Deseaba poder hacer un clon de sombras y buscar a los demás. Poder verlos aún que fuera un solo instante.

-No lo harás.- Sakura agarró a Naruto del brazo.- Ya falta menos. En cuanto lleguemos, todos irán al hospital y podrás verlos.

-¿Como sabes...?- El muchacho guardó silencio. Al fin y al cabo, ella era su compañera de equipo.- Me preocupa que nadie sepa nada de Hinata.

Sakura al escuchar el nombre de la muchacha en voz alta, giró el rostro y observó la puerta principal de la aldea.

-Ella está bien. Es fuerte y a luchado increíblemente bien.- Sakura se separó de Naruto y entró en la aldea junto a los heridos más graves.

Por un instante, Naruto se detuvo ante la puerta y fue viendo pasar uno a uno a todos los ninjas de la batalla. Pudo ver a los amigos antes nombrados, a Kakashi en una camilla. Incluso a la vieja Tsunade caminando junto a Shizune.

-Naruto.- La quinta Hokage se acercó a él.- Vamos al hospital.

-Si.- Mientras caminaba junto a Tsunade, sus pensamientos solo eran para una persona "Hinata Hyūga" ¿Donde estaba?