Never think

By

Claudia Granger

"Por que a veces suceden cosas maravillosas que nunca pensé que podrían pasar"

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Dedicado a todos mis amigos de la FCV y a la nueva oportunidad de amar que me ha dado la vida

Claudia Granger

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Never think

By

Claudia Granger

"Por que a veces suceden cosas maravillosas que nunca pensé que podrían pasar"

1.- Y llegaste tú

"Yo solía pensar que sabía quien eras tú, no sabía que dentro de ti yo iba encontrar la luz"

"Ella"

"Después de tanto tiempo deambulando sola por la vida, no pensé que esto me podría pasar a mi, la vida pasaba de largo sin emoción, sin animación, solo hundida en medio de esta terrible soledad."

"No había nadie que me esperase en algún lugar, nada, no habían emociones que compartir, solo la misma historia de soledad"

"Mi vida no ha sido lo rosa que esperaba el mundo, después de tantos fracasos y decepciones, de comenzar de nuevo sobre las cenizas de mi error anterior, ya me había cansado y resignado al hecho de que quizá, jamás hallase a alguien importante para mi, y la verdad lo hubiera creído el resto de mi vida de no ser por un afortunado suceso."

"Aun recuerdo el momento en que todo cambió"

"Era un encuentro casual al que no quería asistir, todos vestidos con sus mejores túnicas: parloteo y frivolidad en bandeja de plata. Si bien es cierto que antes me encantaba ese tipo de eventos, la verdad es que para estas alturas de mi vida no significaban lo mismo. Había cambiado muchas cosas que antes eran parte de mi, a veces me miraba al espejo y la imagen que este me devolvía no la podía reconocer"

Si, yo: Pansy Parkinson no era lo que una vez fue."

Estaba allí, junto a Theodore Nott, quien fue la única amistad estable que conservaba de mi época anterior, cuando arribaron ellos: Ginny Weasley, Lavender Brown y él…

Michael Corner

Si, le conocía poco, por la diferencia de casas mientras estuvimos en el colegio. El iba a Ravenclaw y una vez fue novio de Ginny, mientras que Lavender le conoció fue por ella. Tenía un aburrimiento mortal mientras intercambiaba una mirada con Theo, yo no sabia muy bien para que había venido, pero no quise ser tan descortés así que finalmente acepté la invitación.

Fue una de las mejores decisiones de mi vida

Saludé a Brown y a Weasley cuando le vi. Y también me acerqué a saludarle cuando no sé, a pesar de no ser nada, me vi impulsada a saludarle como a un viejo amigo. Theo arqueó una ceja en señal de sorpresa e incredulidad mientras abrazaba también a Michael. La verdad en ese momento no me detuve a analizar los motivos de mi inusual reacción pero pude disfrazar muy bien aquello como entusiasmo, cosa que sinceramente no sentía. A veces puedo ser muy buena actriz.

- ¿Qué mas? ¿Entramos? – Interrumpió Ginny previendo una mala reacción en Lavender, con quien últimamente había tenido no pocos problemas

- Si claro, vamos – Le hice una seña a Theo y nos encaminamos a la entrada.

Allí estuvimos dispersos, yo estaba más bien con Theo y Ginny quienes se llevaban muy bien, mientras que Lavender y Michael andaban lejos de nosotros, deambulando por otro lado. Sin embargo luego de un par de horas Lavender se desapareció y Ginny igual. Theo estaba algo fastidiado así que estaba paseando solo por lo que de repente nos quedamos solos Michael y yo

- Así que, cuéntame ¿Qué ha sido de tu vida? Tenia tiempo sin saber de ti – Comentó el rompiendo el hielo

Lo miré por unos segundos antes de responder – Bueno, salí de vacaciones hace poco, estuve en Irlanda tres semanas -

- ¿En serio? ¡No puedo creerlo! – Exclamó sorprendido – Estoy allí desde Enero de este año haciendo un curso, actualmente estoy trabajando en el Departamento de Seguridad Mágica.

- Vaya, es interesante, yo estoy haciendo el curso de Ley Mágica Internacional para entrar al Ministerio – Admití – Me costó algo decidir que iba a hacer conmigo

- ¿Y como fue posible que estuvieras en Irlanda y no me avisaras? ¡Podíamos habernos visto! – Exclamó aun incrédulo y luego se quejó – Lavender no me dijo nunca nada

- Bueno… Se le olvidó – Contesté para esquivar la verdadera razón: Lavender Brown y yo estábamos en conflicto hacia varios meses, apartando que tampoco tendría motivo ni sentido decirle que yo estaba en Irlanda igual que el

- Si, seguramente – Admitió el

Seguimos conversando de temas banales: Quidditch, política, El Ministerio, Hogwarts… todos fluidamente como si toda la vida hubiésemos mantenido algún tipo de amistad, pero no me incomodaba a pesar de todo, quizás debí haber notado esa señal de peligro.

En un momento, nos quedamos solos Ginny, Michael y yo, el nos condujo hábilmente entre la multitud, finalmente mientras veíamos una presentación del show previo al final de la reunión, discretamente sentí una mano en mi espalda, una mano que se ceñía a mi cintura. Volteé el rostro ligeramente y lo vi de pie, tranquilo viendo el espectáculo y también vi que su otro brazo sujetaba a Ginny. Lo tomé como un gesto algo protector, dada la multitud que se aglomeraba en el lugar, aunque la presión en mi cintura me decía que era algo más posesivo.

- ¡Pansy! – Viré rápido en dirección del sonido y me di cuenta que Seamus Finnigan, un antiguo Gryffindor, estaba saludándome muy cordial. Detrás de el se hallaban Miles Bletchley junto a Tracey Davis, dos Slytherin consumados. Me acerqué

- Hola, Miles, Tracey, Seamus ¿Cómo están? – Les saludé

- Todo bien, que extraño verte por aquí – Comentó Miles como quien no quiere la cosa y alzó una ceja

- Si, ando con algunos amigos – Repliqué algo cortante, no tenía deseos de ser interrogada – ¿Y ustedes?

Miles miró pero antes de que pudiera decir algo Seamus tomó la delantera – Amigos eh… ¿Ginny Weasley y Michael Corner? No sabía que estaba saliendo nuevamente – Comentó

- No salen – Repliqué fastidiada – Estamos varios aquí por casualidad

- Vaya vaya – La mirada de Seamus se detuvo en Michael – Los saludé hace rato pero creo que no puedes alejarte mucho de "tu grupo"

Volteé y vi a Michael dirigiendo una seria mirada al trío, me volví a enfrentar a Finnigan y una gélida mirada fue mi respuesta, Seamus se encogió de hombros

- Bueno lo siento, es muy agradable estar aquí con ustedes, pero debo estar con quienes vine – Repliqué dándome la vuelta

- No te preocupes Pansy será en otra oportunidad – Se despidió Seamus con una mirada burlona. No contesté

Me alejé un poco, volviendo al lado de Ginny y Michael, este me sostuvo la mirada inquisitoriamente pero la ignoré y continué viendo el espectáculo

Ya entrada la noche nos disponíamos a retirarnos, el plan era irnos todos a cenar a algún lugar del Callejón Diagon, Theo se disculpó alegando que tenía que marcharse a atender unos asuntos, pero antes habíamos discutido

- No pienso ir a ninguna parte, me voy como vine – Se quejó testarudamente

- Pero ¿Por qué? Podrías venir – Insistí

- No puedo, además últimamente no me agrada estar en el mismo lugar que Brown durante tanto tiempo – Me miró de forma significativa mientras torcía el rostro en un gesto

- Ok te entiendo vale pero ¿No podrías…? – Intenté persuadirlo pero la mirada que me dedicó, me demostró que no había vuelta atrás

- No, definitivamente no –

Supe que no lo sacaría de sus trece así que resollando lo arrastré de vuelta a donde los demás nos esperaban, la mirada que me dedicó Michael al volver me pareció extraña, una mezcla de alegría y algo mas oculto que no supe descifrar en ese momento.

- ¿Nos vamos? – Preguntó Lavender irritada - ¿Qué van a hacer?

Iba a responder cuando Michael se adelantó

- Pensé que podríamos ir a comer algo no sé ¿Al Caldero Chorreante? – Propuso rápidamente – Me apetece tomar algo antes de despedirnos

Me miró y yo asentí – Si, me parece buena idea, la comida de este lugar es fatal, no la probaría ni que me pagasen

Ginny me miró y luego a Theo quien seguía con la mueca de desagrado y se encogió de hombros, ella iría esa noche a donde le provocara a Lavender

Nos aparecimos en el Callejón Diagon, Michael no se apartaba de mi lado, lo cual no me desagradaba, aunque ni yo misma lo podía entender ¿Porqué reaccionaba así? ¿Por qué no huía rápido de él o el de mí? ¿Por qué parecía que no importaba mas nada? No podía concebir que reaccionara así

Mientras paseábamos por el Callejón caminando rumbo al Caldero, iba con estos pensamientos rondándome, la mirada de Ginny era fugaz pero me daba temor ¿Alguien se habría percatado de todo esto? ¿Estaría siendo notorio o era mi imaginación? Vi de reojo a Lavender quien tenía el ceño fruncido como últimamente, era extraño, pero estaba más amargada que nunca. Peor que cuando Weasley la dejó mientras estábamos en Hogwarts, pero no le di importancia, a fin de cuentas, era asunto suyo.

Durante la noche todo fue igual, Lavender iba con Ginny, Theo se había marchado no más antes de que apareciésemos en el Callejón y Michael iba al lado mío platicando de cualquier cosa, no dejaba de prestarle atención a todo lo que decía, aunque sin embargo, a lo que más le prestaba atención era a… él

No lo había detallado antes lo suficientemente bien pero había algo en el que me llamaba la atención en ese momento no sabía decir de que se trataba, pero de que existía, existía. La mirada intensa que me dedicaba Corner no la podría descifrar a pesar de ser buena interpretando esa clase de detalles.

- Es hora de marchar, es tarde – Anunció Lavender con voz mandona

- ¿En serio? Vale pero la estamos pasando bien – Se quejó Ginny

Consulté mi reloj: Eran las 2:45 AM, estaba en lo cierto, era tarde. Pero a pesar de estar tan cansada, no quería que la noche se acabara, no sabía cuando volvería a verle y eso fue un ligero peso en mi estómago, algo que rápidamente acallé como buena Slytherin. No podía permitirme ningún tipo de sensación que pudiera llevarme por mal camino.

- Me parece que lo mejor será que tomemos unas habitaciones aquí en el Caldero Chorreante y nos vayamos mañana por la mañana – Dejó caer Lavender como quien no quiere la cosa

Lo medité unos momentos, solo me esperaba mi almohada así que donde durmiera daba perfectamente igual, asentí y le hicimos señas a Tom para que nos buscara unas habitaciones. Solo tenía disponibles dos, así que Ginny, Lavender y yo tendríamos que dormir juntas, mientras que Michael tendría la habitación contigua

- Bueno chicas, espero que descansen – Se despidió, cuando volteó hacia donde estaba yo, me percaté que se había inclinado ligeramente hacia mi para darme un beso en la mejilla, traté de actuar normal mientras me despedía

Todos dijimos adiós con un rápido "Buenas noches" y cada uno desapareció detrás de la puerta de la habitación respectiva

Cuando puse la cabeza en la almohada, el pensamiento que ocupaba mi mente esa madrugada, tenía nombre y apellido y sobre todo, estaba durmiendo al lado: Michael Corner

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La canción (Y melodía recomendada) que titula este capítulo es "Y llegaste tu" de Sin Banderas

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Esta es la primera historia que voy a ir publicando a medida que la escribo, espero sea del agrado y por favor… Dejen sus comentarios

Claudia Granger