PRÓLOGO

2010, Azotea de la Universidad Jubban

¡Bombón!

Yo…creo que debería irme Seiya—dijo Serena con un nuedo en la garganta, apunto de llorar.

Pero es la verdad…—Seiya dice con la repiración agitada de tanto correr—Yo te amo Sere, no sé cómo ocurrió, cuándo ni dónde; pero sé que me enamoré de ti…Lo siento dentro, siento algo que no siento cuando estoy junto a otra persona. Dame una oportunidad, por favor—decía con ojos suplicantes.

Seiya…

Era un ambiente cálido y tenso a la vez, los cabellos rizados de Serena se movían al compás del viento, Seiya trataba de convencer a Serena de darle una oportunidad de quererla, amarla.

Yo no puedo, y sabes por qué.

¡Ya sé!

Déjame reemplazarlo.

¿Qué? —exclamó Serena con los ojos abiertos como platos.

¿Qué no soy lo suficiente bueno para ti? —preguntó con voz dolida.

No es eso, yo…

¡Déjame reemplazarlo! Él no te merece, formaríamos una buena pareja, seríamos perfectos.

No.

¿Qué hizo él para ganarte? ¿Qué tiene él que no tenga yo?

Yo…no puedo—tenía las lágrimas agolpando sus bellos ojos.

¡Te amo! Y haré lo que esté a mi alcance para tenerte, nos podemos ir ahora mismo de aquí y…

¡No puedo! —gritó interrumpiéndolo bruscamente.

¿Por qué?

¡No puedo! ¡No puedo!...

El viento había dejado de estar presente, y el ambiente se había vuelto más tenso de lo que estaba.

No puedo. No podría estar junto a alguien a quien no amo. Aunque me ames, sería injusto para ambos. ¿Cómo estar con alguien que me ama pero yo no a él? Tal vez suene egoísta, pero quiero ser feliz, siento que sería mejor para los dos. Tú tampoco serías feliz, sabiendo que la persona que amas no corresponde tus sentimientos.

Entiendo…

El sol se estaba metiendo, había una hermosa vista desde aquel lugar, testigo de una triste escena. Ambos personajes se quedaron en silencio un corto tiempo.

Pero, cuando me necesites estaré para ti…bombón.

Seiya—levantó la mirada mirándolo maravillada.

Seiya le devuelve la sonrisa y la tiende la mano.

Hola, soy Seiya Kou, mucho gusto en conocerte nueva amiga.

Seiya…Hola soy Serena Tsukino, mucho gusto…nuevo amigo—ambos amigos sonríen.

Gracias.

¿Por qué?

Por enseñarme el verdadero significado del amor Sere.

No te entiendo Seiya—dijo confundida.

Sólo prométeme algo—cambió de tema, no quería recordar, algún día se lo contaría, pero por ahora no.

¿Qué Seiya?-preguntó sonriente.

Que no volverás a llorar por ese patán.