¡Hola papá!
Primero que todo: tranquilo. Estoy bien, ya llevo una semana aquí y sé que he acertado con mi elección. Sé que no estás de acuerdo conmigo y que te preocupa mucho que haya elegido trabajar en un psiquiátrico, y más en uno que está tan lejos de casa.
Lo que se ve aquí día a día no es nada bonito de ver, pero me gusta mi trabajo. Bueno, ten en cuenta que solo llevo una semana, puede que dentro de un mes esté de nuevo en la granja llorando en tus brazos como un corderillo asustado porque no he podido con ello o puede que por otro lado, llegue un camión para el traslado de Atenea, lo cierto es que la echo de menos, a ella y a todos, si llega a venir me daría pena separarla de Tristán, pero es un burro fuerte, estoy segura de que lo superará.
Echo de menos la granja, y te echo de menos a ti, por favor, no te enfades conmigo y no tardes en escribirme.
Te adora, tu hija.
Norma Trammer.
