Disclaimer: I don't own anything involving Final Fantasy XIII or Castlevania nor any reference to their characters. They belong to Square Enix and Konami respectively.

Hola a todos! antes de que se tomen el tiempo de leer lo que van a ver aquí quería tomarme el tiempo para indicar un par de aclaraciones. Espero que, a pesar de lo complicado que quizá pueda terminar siendo en un principio, pueda servir para comprender mejor los conceptos que quería marcar en esta historia. :)

1ero. Esta historia es totalmente AU (alternate universe) o universo alterno, o algo parecido, con lo que es poco probable que realmente suceda de forma canónica una pelea entre Drácula y Lightning, como por dar un ejemplo.

2do. A pesar de que se tratan de dos franquicias que no tienen vinculo alguno con el argumento del otro, el argumento de mi historia se basa principalmente en el final de toda la saga de F.F. XIII (por cierto, para los que no terminaron de jugar toda la saga, aclaro que aquí HAY SPOILERS), con un final alterno en el que mi OC (personaje original) en cuestión, ya conoce a Lightning desde el final de la 2da parte, y los ha llevado al final de todo ello hasta donde se encuentran hoy.

3ero. Habrá referencias de la familia Belmont, del juego Castlevania, pero no mas que eso. Mi mayor interés era agregar un OC (Aqui se llamará Rafael Belmont) en el que pueda interactuar con los protagonistas sin vinculo ni ataduras, salvo las que YO les dé. ;)

4to. Irán surgiendo dudas en cuanto al pasado de Lightning y Rafael Belmont, así como la maldición que aqueja a este último, se ira detallando a medida que vaya escribiendo.

5to Y último... habrá mucho explotación de romance de las parejas mas conocidas. Lo que si quería indicar es que van a haber momentos de drama (como el 2do capitulo) lo cual hice para comprender un poco mas la relación de Light con Rafael, y despues pueda esplayarme mas en aquello apenas tenga la oportunidad de hacerlo.

Bueno, creo que con esto ya lo dije todo. A pesar de lo complejo que puede resultar en un principio, espero que puedan disfrutarlo como así disfruté escribiendolo. Cheers!

A veces hay circunstancias narradas, cuentos, que se tornan increíbles comprenderlos fácilmente. Como intentar hacer una retrospectiva permanente de que tan rápido una persona se adapta a una rutina rudimentaria para sobrevivir. Trabajar, estudiar, comer, amar... vivir... son conceptos que la mente humana había empezado a asimilar y a expresar entre sus pares desde el principio de los tiempos. Todo en base a la imagen y semejanza de los dioses, y a como los Fal'cie podían manipularlos con facilidad, o al menos, eso parecía en un principio.

"Aquel que cree en dios, también cree en el diablo", era el dicho popular por aquellos días. Tanto en el Nido, como en el Gran Paals, la creencia de la diosa Etro era incuestionable, pero todos sabían que el lugar de castigo para las almas envenenadas de odio, resentimiento y rencor, merecían volver al infierno dirigida por Samael, antes de ser excomulgadas de todo pecado y redirigididas de vuelta a su nuevo comienzo, a su renacer. Y es con esa base que nacen las leyendas, que recorrían toda la superficie de Paals y del Nido, de hombres y mujeres que, ante todo pronóstico y desafiando a los entes que sustentaban al mundo como los Fal'cie y a los dioses, lograron marcar un antes y un después en la historia del ser humano.

Hoy puedo afirmar, que a mis 27 años de vida en este nuevo mundo, me hubieran dicho esto en un principio, y que yo iba a ser parte de esto, jamás lo habría considerado, porque no soy uno de ellos, nunca fui ni me consideré como un "héroe". Soy un tipo que intentó buscar la forma de sobrevivir, y que antes de que todo esto ocurriera, tomó la senda equivocada, y tuvo que enmendar todos y cada uno de las catastróficas decisiones que lo sucedieron en consecuencia.

No, no soy un héroe, pero eso no es tema que deba plantear en este momento. Los verdaderos héroes estaban detrás de la puerta de esta gran mansión, aquí en la Tierra, en el lugar donde estaba parado hoy, en lo que interpretaba como el final de esta aventura.

Suponía que el 1er paso siempre es el más complicado que dar, pero con todo lo que cargábamos a nuestras espaldas, considero que golpear una puerta no iba a espantar a nadie, no?

Fue en ese momento que vi aquella cabellera rosa tan particular...

-"Rafael? no puedo creerlo! al final viniste!"- me dijo la muchacha abrazándome fuerte, como si no me hubiera visto en décadas, dadas las circunstancias, me alegro que no haya sido así, habría visto un "Yo" mucho más sombrío que el que logró ver cuando me vio con su hermana mayor.

-"Eh! Hola, Serah! Me da gusto volver a ver a la flamante novia!"- le respondí en clara señal de afecto. No podía negar que veía la versión en miniatura de su hermana mayor, pero sin la terquedad y el ceño fruncido. Era el contraste absoluto, una chica muy agradable, al decir verdad.

-"Gracias! ven, pasa! el resto está en la sala principal"- ella me deja pasar y me dirige a una sala contigua enorme. Parecía un salón oval o algo parecido. Sin duda alguna, ella era la dueña de la casa, su tacto para decorarla era perfecto, yo no habría tenido esa creatividad, ni en lo más mínimo y su rubio novio no creo que sepa más que yo. Era el lujo concreto que por lo visto no pudo darse en su previa casa en Paals, en Budhum. Sin embargo por lo que podía ver, la mansión contaba con un estacionamiento muy amplio, con un gran y maravilloso jardín en la entrada y un patio enorme detrás de la propiedad, con una enorme pileta al aire libre. Si este no era el sueño de cualquier trabajador de la actual clase media, al menos se encontraría un segundo más cerca. Estábamos en plena Europa, Países Bajos. La arquitectura de los edificios era única del viejo continente y lo hacía atractivo al desarrollo y a la fermentación del turismo de distintas partes del mundo. Pero también tenía una tranquilidad única de la que no cuentas en otros territorios adyacentes a donde nos encontrábamos. Por lo que yo tenía entendido, Lightning quería ayudar a su hermana a cumplir con su sueño de una casa perfecta en un lugar único. La conclusión que sacaba mirando el entorno era bastante buena, debería tomar nota de eso para el brindis por la feliz pareja.

Por mi lado y en esta nueva faceta de vida, estaba aceptando lo que era el buen vivir, es parte de las características de mi reencarnación en este nuevo mundo que Lightning y todo este grupo logró generar. No niego que me costaba adaptarme al principio, no sabía en qué invertir el dinero si realmente le diera algún uso, pero la vestimenta formal que existía en este nuevo mundo me facinaba, sacos con gemelos a juego, zapatos de cuero, camisas de diseño importado... la avaricia tenía su grado de tentación.

Desde nuestro primer encuentro ya hace unos meses, la mayoria del grupo había decidido establecerse en las inmediaciones cercanas a la casa de Serah, con excepción de Hope, Fang y Vanille. El muchacho de cabello plateado se encontraba saturado entre los examenes de ingreso a las facultades mas caras de ingenieria y el negocio familiar que el padre quería que asumiera, lo que lo hacía ir y volver por parte de Europa todo el tiempo. Con Fang y Vanille era diferente, ellas eran nómadas, se dirigían a donde les llevaran las circunstancias o la sed de aventuras de lo que este nuevo mundo tenía para ofrecerles y por otro lado, nunca se sintieron comodas asentándose en un solo lugar, como al principio establecía las tribus de Oerba. Aunque como dentro de poco lograría comprender las hermanas Farron lograrían convencerlas para que empiecen a plantar cabeza y empezar a tomar una vida seria en un solo lugar, dandoles hospedaje en la propia mansión de Serah.

-"Pero miren quien llegó, si no es otro que el Conde! bienvenido, Belmont, te estábamos esperando!". Gritaba enfáticamente el prometido de Serah. Todo el grupo se levantó a recibirme, pero a lo que a mí respecta, no hacía falta reverencia. Yo no soy el principal espectáculo en los acontecimientos de hoy, sino ellos.

-"Si, ya... me alegra saber que el novio de la boda también preside como presidente de mi club de fans! vamos Snow, venga un abrazo, hombre! Felicidades!" le dije en broma al novio del día: Snow Villiers, pero no tardó en retrucarlo antes de concretar el abrazo.

-"Muchas gracias, campeón! pero... no vas a morderme, no?" Un muchacho de cabello plateado claro de buen vestir llamado Hope le encontró la gracia, sabía con exactitud quien era yo. Se le veía una sonrisa que era perfecta para una publicidad de una pasta de dientes. Mi sonrisa era idéntica, pero con unos colmillos que eran afilados como cuchillas, perfecta para extracción de glóbulos rojos, en grandes dosis... Afortunadamente dejé ese vicio destructivo, por un tiempo.

-"No, tranquilo. probablemente tu novia me mate antes de que yo intente hacerte algo, y aún más si me arriesgara antes de la boda. Pero en caso contrario, tu cuñada no creo que haga alboroto, o si?"- La carcajada de Hope, y de otro muchacho, de cabello castaño y ojos celestes, que no conozco personalmente, se hicieron escuchar. Me parecía conocido... lo había visto con Serah, saltando por la línea del tiempo... yo no sabía con exactitud.

Snow se encargó de volverme al plano real.

-"Ah! bueno, mira, con Light..."

-"SNOW!, mi hermana quiere que le digan Claire, no le gusta que nos refiramos a ella por su apodo!"- resaltó Serah, a la vez que Snow y yo nos separábamos y yo dirigía mi mirada al resto del grupo.

-"Si, cierto, CLAIRE, si... ahora quieren que le digan así, ya sabes cómo es, no?"- me informaba Snow, por lo bajo, para que no escuchara Serah. Yo asentí confirmando lo que me decía mientras me dirigía al segundo sujeto más carismático que haya podido conocer.

-"Hola hombre! tanto tiempo!" me contestaba un hombre cuya apariencia me recordaba mucho a un músico renombrado de este mundo, llamado Jimmy Hendrix. No podía evadir el parecido... y verlo a Sazh nuevamente me recordaba a él.

-"Sazh Katzroy! un gusto volver a verte, como va el tema del pilotaje de aviones? y tu hijo?" Nos dimos un abrazo sentido... tuve la oportunidad de escuchar parte de la historia en las afueras del casino Serendipity una vez cuando todavía todo este asunto tenía un curso de colisión hacia el desastre. Aquel entonces, me había contado cómo fue que su hijo se había transformado en un Lu'cie, para posteriormente convertirse él también. Era el ejemplo perfecto del sacrificio de un padre por su hijo, se merecía mi admiración.

-"Hola Belmont! Es increíble verte de nuevo, hombre! mi hijo está bien, está durmiendo en el cuarto del fondo. En cuanto a los aviones, estoy trabajando en eso! sabes, manejo una escuela de oficiales de vuelo que les enseño maniobras de combate en la fuerza aérea y todo eso... Por ahora no es gran cosa, pero el salario es bueno y disfruto lo que hago."

-"Eso es lo más importante, Sazh. Me alegro que te hayas armado un camino!" le confirmaba con suma sinceridad. Dejé a Sazh y me dirigí a saludar a los otros dos chicos que resonaban en coro ante un chiste malo, como los que salían de mi boca. La hermana de la novia, así como Vanille y Fang brillaban por su ausencia, seguramente estaban organizando algún evento para la potencial pareja en matrimonio. Aunque verla a "Claire" Farron, comprometida al 100% con el regalo para su hermana sería algo digno de verse, conociéndola como la he llegado a conocer, estaría tan colorada al presentarle el regalo a la pareja, como un flan a punto de reventar por magia súper potente. Ya me daría el gusto de atestiguarlo.

Terminé de saludar a los restantes de la sala. Hope estaba tentado en iniciarle una serie de bromas a Snow con el tema del club de Fans, aunque yo no habría ido tan lejos, podría haber explotado otras facetas del rubio novio en cuestión si se me diera posibilidad, pero tampoco era la idea humillarlo, al fin y al cabo era su día y su fiesta, tenía que disfrutarlo como todo "HEROE" que se digne, o como le gustaba nombrarse a sí mismo. Ya tendría la posibilidad de hablar con Hope en privado de ello.

Por otro lado, el nombre del chico de cabello castaño era Noel Kreiss era uno de los guardianes de la Oráculo de la línea del tiempo. Había escuchado hablar sobre él pero nunca puse la debida atención, sabía que venía de una ruta alternativa del tiempo en el que era el último hombre del mundo, pero no más que eso. Tenía entendido que tenía una confrontación contra Caius Ballard, su maestro en aquel mundo alterno, por la vida de ella, una chica cuyo nombre es Yeul. Prefería no ahondar en el tema, era un asunto muy trágico y angustioso, a pesar de que al igual que todos los presentes ella había reencarnado, lo importante era el HOY y el AHORA, en el momento en que ella y él estaban juntos de nuevo. Ya habría tiempo de ahondar en mas drama y a diferencia del mundo anterior, ahora tiempo sobraba como para ponerse al día. Cuando me informaba de que Yeul estaba al cuidado del hijo de Sazh que descansaba en la última habitación de aquella mansión, fue entonces cuando siento dos delgados y femeninos brazos abrazarme por la espalda, a la altura de las costillas, en arriba voz y al grito bien en alto de...

-"RAFAAAAA!"- en ese momento, me veo interrumpido por un grito que me ensordeció

-"AAAHHH!"- Podría haber pegado un salto como el de un chocobo a 30 metros de altura de haber recordado cómo se hacía, supongo que mis reflejos no estaban poniendo atención, por ende mi guardia estaba baja. No iba a negarlo, tenía una lágrima emotiva, pero no una muy obvia...

-"Vanille! gracias por el saludo, supongo..."-le agradecía mientras me daba vuelta para saludarla con un beso como merecía. Su mirada era esplendorosa, irradiaba un júbilo en sus ojos celestes a un punto que era empalagoso pero sin duda admirable, no así su felicidad y su manera de expresarla por muy obvia que sea incluso en los momentos más adversos, se merecía mi más profundo reconocimiento. Si hubiera tenido la oportunidad de tener una hermana menor, habría sido ella. Envidiaba su sonrisa.

-"Aunque con el susto que me diste, me sacaste el hipo por los próximos 30 días..."- le terminé de contestar, mientras el grupo se reía. Fue entonces cuando aparecieron las ultimas 2 faltantes anfitrionas de la potencial boda: Claire Farron y Oerba Yun Fang. Se dirigían caminando hacia el grupo, se nota que Vanille vino a saludarme desde haber estado reunida con ellas. Se escuchaba un ligero murmullo. Seguramente cuestiones femeninas que yo hice caso omiso.

"Vaya, vaya... pero mira la oveja descarriada que decidió volver al redil..." escuché decir de la chica de cabello oscuro con un top negro, cubierto por un Sari de color azul marino. Algo cambió en ese momento, como la aceleración de mi pulso cardiovascular o algo parecido (si hubiera tenido tal cosa), era como tener un freno de mano en un Eidolon de un Lu'cie para que solo te mire y no reaccione en el medio de un combate, antes de que te aplaste un Cie'th, así me sentía al verla. Estaba preciosa, como siempre la había recordado. Como siempre la había visto.

De unos llamativos ojos verdes, de carácter algo vanidoso pero agradable a la vez, con un sentido del humor menos sarcástico que el que me tiene caracterizado. Sabía que era la imagen de una fachada que escondía una ternura enorme. La había visto con su hermana, ambas de la localidad natal de Oerba, del Gran Paals. Ella cargaba el tatuaje en su hombro izquierdo como insignia de la tribu de cazadores de Paals. Con los brazos cruzados me miraba con una ligera sonrisa, que quería intentar fingir pero incluso podía sospechar que su sonrisa la traicionaba. Se alegraba de verme, aunque no sería capaz de demostrarlo. Mucho menos frente a mí. Mientras su mirada perforaba mis ojos, la materia gris que se encontraba dentro de mi cráneo intentaba procesar palabras aleatorias que consiguieran algún sentido lógico a lo qué saldría de mi boca.

Qué ironía, esperaba verla a Lightning sonrojarse, y el que estaba sonrojado era yo por Fang. Mi hasta entonces amplio vocabulario se encontró abrumado y consumido en dos abruptas palabras que no pasaron el control de calidad de mi mente...

-"Hola... Fang...!"- la saludé con una ligera sonrisa levantando torpemente mi mano derecha. Mi mente no logró comprender tanta información conjunta para un saludo... Ella se encogió de hombros en respuesta, suspirando cansadamente para luego cruzarse de brazos. Ahora que lo pienso, siempre la vi en esa postura cuando se dirige a mí, quizá porque no termina de asimilar lo preciosa que termina siendo cuando se ofende.

-"Como? nada mas eso? ni un chiste malo tuyo o un abrazo...?" si esa pregunta era la metáfora de una transmisión de un vehículo, al menos logró sacarme de punto muerto, para pasar a 1era marcha, pisar el embrague y empezar a arrancar. Me ayudó a tomar coraje.

-"Yo... en serio? bueno, te doy un abraz..."-.

-"QUE NI SE TE OCURRA! NO TE ATREVAS A TOCARME!"- Me gritó ella, sacando el bastón que la caracterizaba y apuntándome al cuello. De haber visto al grupo... se reían de mí ligera desgracia... Hope parecía que le vendría un infarto de tanta risa mientras se contenía el estomago junto con Vanille y Snow, y hasta Serah se tapaba la boca tratando de ocultar la carcajada. Pero la ironía de la vida yacía en ver a Light... CLAIRE Farron sonriendo... se nota que había pasado el Día del Juicio, para que tal acontecimiento tuviera lugar.

-"Tranquila Fang, estoy desarmado... "- le digo pasando a 2da marcha de transmisión en mi cabeza, y levantando las manos - "No sería tan estúpido de confundir una reunión de Ex- Lu'cie, con un congreso vecinal para reclutar gente armada..."

-"Si, bueno, mejor guárdate esa sonrisa tonta que tienes... ya te hiciste esperar bastante para decir alguna estupidez de las tuyas, sabías? Debe ser la edad, no así tu cuerpo lo disimula lo suficiente... sería inteligente que empieces a trabajar en tu tarjeta de presentación, vampiro..."- Fang sabía donde golpearme tácitamente, a más bajo, mejor. Supongo yo que tenía debilidad por una cara bonita, por ende iba a dejarlo pasar, por ahora. De otra forma era una partida perdida de antemano. Me dirigí hacia Claire, antes de que le diera a Fang una razón comprensible como para que me ataque. Afortunadamente bajó el bastón en el momento que conduje mis pies hacia la hermana mayor de la novia del día, Lightning.

-"Hola Rafael! Esperaba que vinieras. Esperaba que no fuera la última vez que nos viéramos"- Me dijo Light estrechándome la mano en señal de saludo. Demasiado formal, después de la cantidad de cosas que pasamos juntos, pero no me corresponde a mi cuestionar.

-"Hola Claire. Me alegra verte, sinceramente" - le digo en respuesta, ella notaba la sinceridad del saludo y la firmeza de mi mano. Solo nosotros recordamos el calvario de los minutos más aciagos que tuvimos que enfrentar al dios supremo Bhunivelze. Dos guardianes de bandos absolutamente contrarios, unidos a un factor común, que milagrosamente desencadenó en la realidad que vivimos hoy por todos los que estábamos aquí en este momento. No obstante no nos engañemos, la verdadera heroína era ella, Lightning. Yo solo hice lo que pude para ahorrarle tiempo. Ese momento marcaría mis últimos momentos de tormento eterno en ese mundo, para iniciar de cero en uno nuevo.

-"Después necesitaría hablar contigo a solas, de acuerdo?"- Esa mirada seria y ese tono suave era característico, directamente proporcional a la firmeza de sus suaves dedos en mis manos en el saludo. - "Ahora necesitábamos tu ayuda para algo especial que tú conoces mejor que nosotros"

-"Yo? de acuerdo. Pero no entiendo, en que te puedo ayudar?", en ese momento Serah intervino para informarme de lo necesario.

-"Necesitaríamos que lleves a Snow a un modista para que empiece a tomar las medidas del traje para la boda. Tu eres el que más protocolo sabe de nosotros, y nos estamos quedando corto de tiempo a fecha de la boda... y dado a que eres Conde, quizá podrías ayudarnos, Rafa?" - Como negarme a la petición de la novia? no iba a entrar en una contradicción con ella. Si podía extender una mano, iba a hacerlo. Aunque si lo analizo en retrospectiva, la situación era similar a saltar directo a un pozo lleno de tiburones.

-"Si, no hay problema, Serah. Tendría que ver en qué momento tu novio está dispuesto y partimos. Supongo que ya están elegidos los Caballeros y las Damas que representen al novio y la novia?"- yo había preguntado, esperando una respuesta conclusiva.

-"Bueno... digamos que estamos viendo quienes vamos a ir en qué orden, no nos ponemos de acuerdo totalmente!"- Resumía Vanille, con su encanto tan especial -"Esta boda va a ser totalmente maravillosa para ti Serah, ya verás! no es así, Fang?"- La conducción de la conversación de Vanille a su hermana mayor de Oerba, la había agarrado desprevenida, cosa que no se hizo mostrar más de lo obvio.

-"Que? ah, si... sí, claro. Será una bonita fiesta... al menos si estamos cortos de presupuesto para un modista, no nos faltará un bufón para animarla"- Esa mirada de reojo de Fang hacía mí, lo decía todo, y su lenguaje corporal, mostraba lo poca reacia que era de aceptarme tan sencillamente dentro de la organización de la boda.

-"Yo también te quiero, Fang"- Le dije en un tono ligero de broma. Vanille saltaba de ansiedad como si tuviera un resorte pegado a los pies, mientras el grupo podía ver en nosotros como una obra de teatro improvisada en comedia se daba entre nosotros. Hope y Vanille habrían tomado nota como para hacer un guión de comedia con autoría compartida si alguien les hubiera dado el incentivo suficiente...

-"Oh, yo también te quiero, Rafael... te quiero... quiero que regreses DE VUELTA DEL POZO DEL QUE SALISTE!" Hacía años que no veía esa expresión de Ira personificada en una mujer que no llevara cabellera rosa. Se podía comprobar que yo tenía un don para sacar de sus casillas a las mujeres equivocadas... había comprendido aquello cuando continué una conversación que no debía... un impulso errático que me salió del alma.

-"Sabias que eras más bonita cuando te ofendes? resuma el color de tus mejillas en una combinación perfecta."- Se escucha un "OOOHHHH!" en el grupo como si fuera una clara señal de desafío. Me hago cargo que esas palabras salieron solas de mi boca. Al contrario de esto, debería haber pensado mejor en no haberla ofendido así. Noel se encargó de hacérmelo ver, golpeándome ligeramente el hombro.

Ya era tarde... la calma antes de la tempestad se había anunciado. Las facciones de la chica se transformaron completamente, aunque... quién sabe, quizá su imagen de Ragnarok podría desatarse por 1era vez en este mundo y de forma anticipada gracias a mi causa.

-"Sabes una cosa, Belmont?, porque no te vas a ..."- Se nota que la había ofendido, era capaz de cargar con el bastón para empalarme con ella de ser necesario.

-"YA BASTA USTEDES DOS! Rafael!, tu vas a ir con Snow al Modista AHORA y no, no es una situación negociable, está claro!?"- Gritó eufórica Lightning, ante la poca paciencia al "intercambio de ideas" entre Fang y yo. No la juzgo, no puede interpretar lo que es "amor" por medio de sarcasmo como Fang y yo lo hacemos. Mejor que así sea, o me arrancaba la cabeza y la habría colgado en la puerta de la casa, como alternativa.

-"SI, CLAIRE!" asentimos todos ante el grito imperativo de Lightning.

-"Uy... lo que te espera ahora...!"- confesaba Noel a mis oídos.

-"Si, hombre, te compadezco!"- se justificaba a la par Sazh, dirigiéndonos a la puerta para movernos en dirección al modista cuya dirección yo conocía con dirección guardada en el GPS de mi smartphone. Me esperaba un día largo por delante.

-"Bien, y yo me compadezco de ustedes si les toca estar cerca de Lightning en la boda... ya quisiera verlos a ustedes en ese lugar"- respondí en tono de gracia. Se reían por lo bajo, ya que la jefa mayor de cabellera rosa podría desatar nuevamente su ira. cuando me apuntó con su dedo índice, pensé que lo iba a hacer...

-"Rafael... recuerda que tu y yo tenemos que hablar en privado, de acuerdo?"- Los ojos celestes de La hermana mayor de la novia se pulsaba sobre mi rostro.

-"Si, Claire, no hay problema. Cuando vuelva lo hablamos."- ella me asintió y se dirigió al grupo de chicas, que tenían interés de continuar elaborando junto a la novia, el armado de la ceremonia y ensayo de la boda, mientras el resto de los muchachos íbamos marchando hacia el modista, cuan corderos marchaban a una purga hacia Paals por orden del Sanctum.

Sin duda, mirando la reacción abrupta y el carácter de Lightning, mi conclusión era que podrán cambiar los mundos con Día del Juicio de por medio, pero hay hábitos que se pierden tarde, yo debería saberlo mejor que nadie. Así como yo gozaba de poder caminar a plena luz del día, generalmente la suerte viene con una etiqueta con el precio, y su valor era la insaciable sed por la sangre humana. Sabía que si regresaba a ese hábito, volvería a transitar un oscuro sendero trágico, en el que me convertiría en una sombra de lo que era en este momento, perdiéndolo todo, y volver a la foja cero. Estaba en mí aprender a controlar la sed, por muy difícil que fuera. Era la maldición con la que tendría que vivir de por vida. Encantador por fuera, muerto y entumecido por dentro. Nunca supe si ese realmente era mi verdadero destino. Todos tienen un muerto en el armario, ninguno de los presentes era un santo, pero supongo que yo tenía que cargar con mi propia cruz. Como todos los demás. Desafortunadamente mi pacto de sangre con el monstruo que me dio este horrible don, permanece inalterable a pesar del tiempo y espacio. Quizá los Lu'cie hayan dejado de existir y los Fal'cie mucho antes también hayan quedado extintos para dejar paso al mundo del hombre. Pero mi pacto demoníaco seguía su curso, inalterado por las paradojas y apocalipsis y génesis aparte. Sea como fuere, Lightning lo sabía tan bien como yo, y solo esperaba que cuando llegue el momento para mí de transitar ese viaje nuevamente, esta vez, yo tenga la sabiduría de elegir la decisión correcta, y no volver a caer al infierno que me atormentó durante siglos, antes de transitar mi camino de redención que comenzó en Valhala. Mi sarcasmo era una forma de esconder mi verdadero yo, de esconder ese monstruo, uno que de ser llamado iba a despertarse y de ser así, iniciar el fin del mundo cuando todavía este no se había solidificado sus bases completamente. Me sentía como una bomba de tiempo cuyo reloj era de una era incierta, y el segundero se movía tan rápido como mi deseo de sucumbir a la tentación. Y no podría contenerlo por siempre, necesitaría ayuda. Sea como fuere, tendré que hablar con ella lo más pronto posible al volver.

Todo el plantel masculino se dirigió a mi auto aparcado en el estacionamiento del predio, mi vehículo era un BMW M6 de 4 puertas cuyo cromo del chasis resplandecía a punto tal que podría destriparme el corazón de un golpe si con 1/4 de ese material fuera empleado para crear una estaca. Me sentía afortunado que en este nuevo mundo todavía nadie había considerado hacerlo, o al menos, eso creía si yo terminara convirtiéndome en la nueva amenaza latente. Traté de no pensar en eso, este era un momento de paz, había que sacarle provecho.

Nos dirigíamos a un par de kilómetros de la casa de Serah. Entré a ver al modista junto con todo el grupo y presento al cliente en cuestión para que inicie los preparativos. Ya estaba anunciado que yo iba a cargar con el presupuesto del traje de Snow, el problema no era el presupuesto en sí mismo, sino mantener quieto al novio para que el pobre empleado, un hombre de apenas 50 años de barba importante, haga su trabajo. Sin duda Snow demostraba ser todo un desafío, cosa que terminamos averiguando al pasar los minutos.

-"Dios mio, es realmente necesario esto? o sea, es para un traje que usaré una sola vez, no voy a irme a dormir con esto puesto, o si?"- resoplaba disgustado Snow. Sentado junto con el resto y con mi saco en la mano y con los ojos entrecerrados, no tenia empleado gastar mucho aliento en contestarle.

-"Sr. Villiers dejé de moverse por favor!"- Sin duda el hombre en cuestión ya se iba sintiendo molesto, y mi paciencia iba cayendo a la par.

-"Snow, el asunto es muy de simple: podemos estar aquí por una década hasta que te llegue el momento de tu jubilación, o puedes ponerle empeño y terminar esto rápido, de acuerdo?"- le respondí ya molesto de verlo moverse cada vez que el modista intentaba emplear el largo de metraje sobre las extremidades del cuerpo.

-"Sí, bueno... ya me entenderás cuando seas tú el que se case un día!"

-"Si, te enviaré una postal cuando eso suceda, con dedicatoria y toda la parafernalia, pero ahora COMPORTATE y deja trabajar al pobre hombre, Villiers, maldita sea!" le dije al rubio, ya me encontraba molesto por el tiempo perdido.

-"Bien, de acuerdo! qué carácter tienes...!"- el novio me miraba como si yo lo apuntara con un fusil, no era para menos, me daba cada vez más motivos como para que llegue a la noche de bodas pasando la puerta con los dos pies por delante.

El reloj marcaban 3 horas desde que partimos de la mansión de Serah, de allí nos extendimos una hora, dos horas... pasaban el mediodía, la tarde... la vida pasaba por la vidriera del negocio, y seguíamos esperando...

"Dios mío, Hope, puedes ayudarlo? o nos quedaremos haciendo guardia nocturna hasta la madrugada con él dentro..."

-"Oye, pero porque yo, si tu nos trajiste aquí!?"- me respondía ofendido el muchacho de cabello plateado. La respuesta que le ofrecí fue determinante y sencilla...

-"Es eso o la alternativa es que le digo a Lightning que gustabas de ella desde que eras un crio..." la cara de Hope era la del mercurio de un termómetro a punto de estallar. No se esperaba que le dijera eso. Reticentemente se dirigió a donde estaba Snow, y empezó a ayudar a tomar las medidas.

-"Por cierto, porque no se lo dices de una vez? no creo que te mate, o si? Deberías aprovechar ahora cuando ella se encuentra más sentimental que de costumbre y todavía no te gradúas de ingeniero...!"- le dije en broma, Hope se hacía el ocupado, le seguí la corriente.

-"Qué?! no te escucho desde aquí!"- gritaba el futuro ingeniero... no me compraba su actuación. Estaba a una distancia de menos de 4 metros. Podía escucharme perfecto.

-"Eh! que te estoy haciendo un favor! ya me lo agradecerás más adelante!"- le respondo con una sonrisa. Se nota que no le gustó que tocara el tema, pues el muchacho siguió escuchando al modista y dando vueltas sobre Snow.

De repente, siento la voz de Noel llamándome con voz baja, y me acerco a él. Ya que no tuvimos mucha relación previa al encuentro de hoy, no lo culpo en absoluto. El único momento en que me vio fue en una confrontación contra Snow en el coliseo del tiempo, del cual me vio perdonarle la vida. Considero que debe tener muchas dudas de quién soy y de cómo me llegué a conocer con todos.

-"Belmont! Rafael!, ptzzz!"- si quería llamarme la atención, solo le faltaba poner un maniquí de una playa de estacionamiento como para que todo el mundo se enterase. Pobre chico, me caía bien, pero la sutileza no era lo suyo.

-"Si, Noel, dime"- Mis ojos hablaban por mí, de lo casi cerrados que estaban, sino me quedaba dormido allí o preferentemente en un sarcófago. Con algo de voluntad intenté escuchar a Noel.

-"Es necesario que hagamos esto para la boda?, o sea, tanto preparativo como para un casamiento?" - La ingenuidad de Noel era proporcional a que tan en serio se tomaba su anterior papel de Guardián de la Oráculo. Con la vida sombría que tuvo, no había logrado tener oportunidad de ver una boda realizándose, por ende tuve que dedicarme a darle un curso acelerado en pocas palabras de como era el ritual del "sagrado matrimonio" y todo eso. Obviamente de la consumación de la misma, eso es algo que él y su pareja deberán descubrirlo por sí mismos cuando tal momento corresponda. Mi boca permanecería cerrada al tema.

Fue entonces cuando salió con otra pregunta que no fue tan ingenua, esa me abrió los ojos sumisos al cansancio a la par .

-"Aquí Sazh me dijo que tu eres un vampiro, que eras el encargado de proteger las puertas del infierno, en nuestro anterior mundo, era eso verdad?"- Esa era la pregunta del millón de dólares, o la que no quería escuchar en ese momento. tendría que agradecerle a "Jimmy Hendrix" por tocar un asunto delicado que no quería tocar hasta verlo con la muchacha "peli-rosa" en detalle.

-"Si, Noel. Mientras Lightning era la protectora de la diosa Etro, yo estuve custodiando las puertas del infierno durante eones, mucho antes del surgimiento de los Fal'cie, así es. Éramos guardianes cada uno en su campo, Etro al fallecer la eligió a ella como protectora del Valhala, y yo estaba condenado a proteger nuestro reino de sucumbir en el infierno, en las puertas del limbo"- No me sentía cómodo hablando de eso, pero era mejor eso antes que quedarme dormido, por otro lado el chico debía saber la verdad de lo que pasó.

-"Pero de ser así, cómo pudiste poner un pie en Valhalla? O acaso, cuando se desató el caos al fallecer Caius...?"

-"Cuando eso sucedió, Valhala generó una cadena consecutiva de paradojas de espacio tiempo que consumirían el mundo, eso ya lo sabías. El problema radica en que ahora con ese suceso, las almas impías podían poner un pie en el reino de los cielos si estos pudieran alcanzarlo. La fina red entre la realidad y el infierno empezó a expandirse sobre el limbo y parte de Gran Paals mientras ustedes luchaban en otras etapas de espacio-tiempo. Sin la diosa como autoridad y sin Lightning..."- reconozco que titubee cuando iba a comunicarle mi decisión -"El Espejo del Destino me mostraba el final de los días del hombre, y la caída del Nido. El Armagedón abriría sus puertas con el infierno, y lo consumiría todo. Fue ahí cuando rompí mi pacto de sangre y por medio del Espejo, pude llegar a Valhala a despertar a Lightning de su sueño de cristal. Teníamos que retomar el control del pandemónium que se había generado... Nosotros somos los guardianes del cielo y del inframundo respectivamente, ese era nuestro rol y responsabilidad, y este problema de la diosa, despertó al demonio Samael de querer reclamar las almas de nuestro mundo..."

-"El caos por la muerte de Etro, permitió la muerte de Yeul y de Serah. No pude hacer nada para evitarlo..."- recordó Noel con cierta tristeza, con una lágrima de angustia cayendo por sus celestes ojos. No había necesidad, las aguas habían vuelto a su cauce de aquel hecho caótico. No pude evitar poner mi mano derecha sobre su hombre y mirarlo a los ojos.

-"Oye, Noel, arriba ese ánimo, hombre!. Ese problema lo hemos superado. Míranos donde estamos hoy! Ambas están vivas, y una de ellas se va a casar con el peor enemigo de diseñadores de telas importadas de este mundo"- Noel sonrió levemente. - "Ya vamos a tener tiempo de hablar de esto con detalle. En este momento dejemos eso detrás, hay una boda que organizar, correcto?"

-"Si, claro"- dijo el muchacho, limpiándose las lágrimas. Lo conduje a donde estaba el resto tratando de tomar las medidas al novio de cabello rubio que jugaba a disimular a un mimo frente a un espejo de 2 metros cuarenta.

-"Eh, Rafa! las cosquillas que me hacen estos dos es terrible! me siento muy incomodo! en serio tenemos que hacer esto, y no hay otra forma?"

-"Mira Snow, por lo que veo vamos a tener que estar aquí todos ayudándote para que al final te tomen las medidas del traje, o tendremos que cavar trinchera y pasar aquí el resto de la noche, por ende agradecería que te movieras lo menos posible, de acuerdo?" Cuando miro de reojo a alguien, es clara señal de que algo no va muy bien, o que la paciencia se me estaba culminando.

-"Vamos Rafa, no te ofendas... El problema con Snow es que es hiperactivo porque está ansioso por la boda!" decía Katzroy, muy tranquilo desde la puerta del negocio, mientras fumaba de lo suyo, con un mini-chocobo estornudando desde su cabellera.

Seguramente el seguro de vida de ese pobre animalito debe gozar de muy buena cobertura, para que siga en tan buen estado dado a su dueño. Yo ya me encontraba molesto de estar allí estancado durante tanto tiempo, mi tono de voz empezaba a cambiar.

-"Si Sazh, ya me di cuenta como hace 1 hora, gracias. Y tú Villiers, la próxima vez que te muevas aunque sea una décima de segundo, voy a tener que comunicarle a tu novia que va a terminar casándose con una lápida en lugar del novio, fui claro?"

-"Ouch! Eso ha sonado muy Lightning, sabes? pero esta vez no me muevo mas lo prometo! Pregúntale a Noel! él sabe que tengo palabra, verdad? "-

-"Belmont, no le tomes la palabra! ya dijo lo mismo una vez cuando estuvimos con Serah en una paradoja peleando contra un flan enorme, y como cabezota intentó pelear contra él, y SOLO!"- Parece que Snow no sabía elegir bien a sus aliados en cuanto a buscar un apoyo en su argumento. Yo lo único que quería era irme, o me quedaría dormido allí. Dada las circunstancias, era el momento de tomar iniciativa. Como se suele decir, si quieres algo bien hecho...

-"De acuerdo aquí vamos, Noel por favor, pásame el canasto de alfileres del mostrador y tu Hope, toma la medida de largo por la cintura..."-

Y así fueron los siguientes 30 minutos hasta que al fin terminamos con semejante empresa, dando órdenes a mis amigos como si fueran mis empleados de costurería. Qué situación extraña era todo aquello, no me quisiera imaginar la cara de alguna de las hermanas Farron o de Vanille o Fang viéndonos así, y aún quedaba el resto de los muchachos por tomar medidas.

Mientras mis manos trabajaban, tuve la ligereza de considerar que si lo de ser "un monstruo que resguardaba las puertas del infierno de que volvieran a abrirse", no estaba muy bien cotizado en el mercado laboral, al menos la costurería siempre me quedaría como opción.

El cielo ya mostraba las primeras etapas antes de iniciar el atardecer, el sol se acercaba a la otra punta del cielo y mi cansancio se hacía cada vez más notorio. El negocio cerraba temprano, y las persianas y cortinas hacían coro de bajarse a cubrir las vidrieras de la misma. Al acercarnos al auto, recibí una propuesta de la persona que hasta entonces, yo menos esperaba que mencionara siquiera una letra.

-"Rafael, no hay problema si conduzco? ya tengo licencia, la he obtenido hace menos de un mes!"- nunca lo había visto tan entusiasmado a Hope por una licencia de conducir, al indagar un poco comprendí el porqué.

-"Hace menos de un mes? quien te enseño a conducir?"-

-"Bueno... fue Light, ya sabes que hace ya un tiempo estaba insistiendo con que quería conducir... bueno, ella se encargó de enseñarme"- Al principio creía que era una broma, pero al mirar a Hope tan colorado como estaba en ese momento lo entendí y no me parecía mal. No creo que todos tengamos la posibilidad de que la persona de la que nos enamoramos perdidamente, nos enseñe a conducir. Dentro de mí lo felicité, se merecía el esfuerzo.

-"Es en serio? Estamos hablando aquí de la misma persona?"- la conversación con Hope me hizo abrir los ojos, ya me sentía algo incrédulo, pero me sacó de mi estado somnoliento.

-"Si Rafa! Ella me enseñó todo lo que necesito saber para transitar en la vía pública! me prestas las llaves? puedo mostrarte, en serio!"- La verdad no tenía ganas de conducir con el cansancio me abrumaba, así que le tiré las llaves.

Nos subimos al auto y empezó a conducir. Lo reconozco, lo estaba haciendo muy bien. Me hizo pensar que entre todo aquello que nos definía desde antes de reencarnar, en relación a la vida ordinaria que llevamos hoy, hubo un abismo que nunca había contemplado antes o yo no había estado dispuesto a comprender que estábamos en un mundo diferente.

-"Supongo que hacer que Lightning te enseñara a conducir, ha llevado su trámite, no Hope?"- preguntó Noel inquieto como el resto de los pasajeros por la noticia.

-"Cierto! Bien que te lo tenías guardado, campeón! ahora ten en mente que ella no hace eso por todo el mundo, puedo darte prueba de ello!"- Snow terminó de completar la idea a lo que me refería. Él tenía una relación amor-odio con su futura cuñada, pero cuando las brasas quemaban sabían dejar las diferencias de lado, en cuanto a si la vida de Serah pendía de un hilo.

-"Si, lo sé Snow. Por eso nos levantábamos todas temprano todas las mañanas y usábamos su auto en calle cuesta abajo cerca de la playa para tener tiempo de practicar"- con las personas que estaban dentro del auto y con lo sensible que era respecto a algunas cosas, ya sentía pena por las bromas que le esperaban a este muchacho de cabello plateado. Supongo que a todos nos tocaba pasar por eso tarde o temprano.

-"Claro... cito textualmente: nos levantábamos "-

-"Si! o... cerca de la playa. Más romántico imposible! Muy bien Hope!"- Snow y Noel generalmente no congeniaban en la mayoría de sus ideas, pero cuando lo hacían, parecían hermanos siameses.

Sazh se reía ligeramente, así que me imagino que habrá pasado por esto en su momento, en un mundo distinto donde cada uno de nosotros aspiraba a conseguir su pareja y a su grupo de amigos con los qué pasar grandes momentos. Hope todavía no había pasado por eso, y de Noel no esperaba menos al venir de un mundo casi carente de vida, por lo que me sorprendió su forma de ser, se estaba dejando llevar o yo realmente era mala influencia para el grupo.

Lo último era lo probable.

-"Ya! dejen de burlarse de mí!"- Estheim estaba empezando a tomar temperatura, se le notaba las venas en la sien como si fueran a inflarse.

-"Oigan! dejen al muchacho tranquilo, no ven que está conduciendo?!"- Era hora de que yo amenace con algo de autoridad, al fin y al cabo era mi auto. Sería triste para Hope que el debut y despedida en referencia a conducir se diera con el cuerpo de todos nosotros desparramados por el asfalto o dentro de algún farol de semáforo.

-"Gracias Rafael"- me agradeció Hope, suspirando aliviado.

-"Ya, tranquilo, sigue conduciendo, que necesito hablar con tu futura novia."-

-"No iras a contarle que te dije esto?"- Se estaba yendo por otro tópico que ni me molestaba en continuar tocando.

-"Tranquilo, chico. Nadie va a estropearte la fiesta. Lo que tengo que tratar con ella, tiene una connotación más seria. Aunque si te tuviera que dar un consejo es que le digas lo que sientes, ya que es probable que el sentimiento sea mutuo."- Los ojos de Estheim se abrieron como platos frente a lo que yo había dicho.

-"Y como sabes tú eso?"-

-"Hope, es MUY instinto básico. Fíjate sus gestos corporales cuando te habla o se dirige a ti, y lo verás". - El muchacho quedó pensativo con mis palabras. Creo que no debería prestarme mucha atención, yo no soy buen consejero sentimental, ya que soy un vampiro, un cadáver con un corazón. Hace rato que no sabía que era una vida común y corriente, hasta que aparecimos todos juntos aquí para comenzar de cero.

-"Por cierto, tú eres vampiro, no es así Belmont? como es que todavía no desarrollas síntomas? Se te ve tan humano como nosotros" - Sazh me había mostrado esa inquietud hace rato, pero ahora que no estábamos frente la presencia de Lightning ni de Fang, y tenía cierta reticencia de hablar de ello, pero si ya había explicado un poco el asunto a Noel, no creo que abarcar el tema nuevamente vaya a ser perjudicial para nadie.

-"Esa es una buena pregunta. La verdad es curioso... no sé. Desde que hemos reencarnado no he tenido sed, al menos no desde mi travesía con Lightning"-

-"Creo que, a efectos prácticos, deberías ser normal como nosotros. Debe haber una razón para que sigas siendo un espectro"-

-"Si, o algo no terminó saliendo bien"- Agregó Snow. Ya tenía tema de reflexión para cuando tuviera mi conversación con la mayor de las hermanas Farron.

Empezaba a caer el sol y la noche empezaba a verse. Ya habíamos llegado nuevamente a la mansión de Serah, la cual nos recibió junto con el Mogu entre sus brazos y luego fue corriendo a reencontrarse con su futuro esposo, mientras Dajh (el hijo de Sazh) se dirigía a abrazar a su padre. Era gracioso ver como Serah iba corriendo hacia Snow mientras el pobre pequeñajo entre sus brazos no para de gritar "KUPO!" e intentaba aletear para liberarse del abrazo de su dueña. Yo por mi parte, le pedí a Hope si podía estacionar el auto, y al hacerlo, pude ver a Light (o Clare, como le gusta que le digan) quien nos recibió desde la puerta de la mansión con un sweater celeste bien artesanal, seguramente su hermanita o alguna de las chicas de Oerba se lo haya tejido. A la imagen que tenía de ella, se la veía más frágil, pero también mucho más serena de lo que solía ser.

-"Se han tomado su tiempo, hubo problemas?"- decía ella, recibiéndonos con brazos cruzados.

-"Si, tuvimos un ligero contratiempo con el novio, pero nada grave" - le retruqué frente a la duda que había surgido.

-"Como es eso de un ligero contratiempo? que pasó con Snow?"-

-"Tranquila, no pasa nada. Esta allí fuera con Serah y el Mogu. No paraba de moverse mientras le tomaban las tallas para el traje de boda, parecía que estaba realizando una coreografía de danza o algo por el estilo, así que tuvimos que ayudar al modista."- A Claire se le dibujó una sonrisa, seguro que ya se estaba imaginando el asunto.

-"No me sorprende de él, siempre fue cabeza dura. Ahora ven al despacho, tu y yo tenemos que hablar"-

Claire me condujo a una sala adyacente del salón oval donde estaban la mayoría organizando la ceremonia. Sabía bien cuál era el factor principal del tema a tratar. Era hora de la verdad, muy a pesar de que me guste o no lo que iba a escuchar a continuación.