EXISTENCIA
Cap.1: encuentros
Bella swan
Eldespertador sonó a las 6.30 y con el acabo mi sueño. Era el primer día de clases, (para mi ya que las clases en Forks habían empezado hace rato) era obvio que iba a conocer compañeros nuevos y sobre todo porque era nueva. Siempre me decían que para mi era fácil hacer amigos, aunque no creía que este fuera el caso. Me levante, me puse lo primero que encontré, me peine, me cepille los dientes, agarre mi mochila y m fui en mi auto. Estaba feliz de tener mi propio auto aunque este fuera un monovolumen.
Cuando llegue al instituto sentía q todos los ojos de mis nuevos compañeros iban hacia mi, cosa que no m gustaba porque yo era una persona que se avergonzaba muy fácilmente.
Me baje de mi monovolumen y me mandé a mi primera clase: biología. Cuando entre ya todos habían encontrado un lugar donde sentarse; para mi suerte había una mesa vacía.
Cuando estaba por empezar la clase, un chico alto, de pelo rebelde entro apresurado. En una palabra hermoso, era blanco, con ojos color miel y medio musculoso. Entro corriendo y cuando me vio se paro, parecía como si estuviera en estado de shock algo por el estilo, cuando salio del trance en el q estaba camino hacia mi mesa, al sentarse situó su silla lo mas lejos posible de la mía. Yo no podía entender porque esa reacción hacia mi, si no me conocía. Esa actitud suya me callo re mal. Pensaba que por ahí le había parecido tan fea que se había asustado pero no me creía eso ósea no me creía la mas linda pero tampoco la mas fea aunque nunca tuve novio ni nada por el estilo, entonces por ahí si era fea, bien fea.
Edward Cullen
Esperar a que Rosalie se preparara para ir al instituto era agotador. Hoy iba a ser una día como cualquier otro nada en especial y como siempre yo sentía como que tenia un hueco en mi pecho nunca entendería el porque. Siempre q veía a Rosalie con Emmett muy enamorados ese agujero que tenia en mi pecho me ardía. Mi madre, Esme, me dijo que ese dolor era a causa de que me sentía solo, pero, ¿porque estarlo? Tenía una gran familia un padre al que admiraba una hermana a la que quería como si fuera mi sangre igual que mis otros tres hermanos. Entonces, ¿porque sentirme así?
Rosalie bajo las escaleras muy rápido, ella siempre se veía bien.
-Ya era hora-la rete
-Perdón es q mi pelo no secaba-ja! como si eso importara, ahora por su culpa iba llegar tarde lo único q m faltaba.
Subimos a mi auto, un volvo, y nos dirigimos al instituto.
Al llegar me encontré con que un auto viejo se encontraba estacionado donde yo siempre lo hacia, estaba despintado, era un monovolumen. Estacione y salí corriendo sin que nadie me viera, la clase estaba a punto de empezar lo podía escuchar, cuando llegue a la puerta todavía se escuchaba el barullo común de todos los días. Abrí la puerta y entonces la vi. Estaba sentada en la mesa donde yo me sentaba todos los días solo. Ella me miro y cuando lo hizo me sentí raro, sentí como un ardor aumentaba en nariz y mi boca, era su olor. Era extremadamente embriagador pero a demás de eso, ella era hermosa, sus ojos marrones me miraron sorprendida y yo me quede parado frente a ella mirándola cuando me di cuenta lo que estaba sucediendo me senté y puse mi silla lo mas lejos posible de ella, seguro se había asustado de cómo había actuado, no quería asustarla mas. La clase empezaba y yo no podía dejar de mirarla era como un imán que me atraía hacia ella, su cara, sus ojos, SU OLOR ese olor tan exquisito pero a la misma ves maldito porque ahora comprendía que yo era peligroso para ella.
Bella swan
La hora paso volando y yo me seguía preguntando porque ese chico era si conmigo, tampoco se había presentado. Sonó el timbre, tomo sus cosas y se fue tal y como vino, corriendo. Me hice amigos fácilmente no fue ningún problema, pero todavía seguía frustrada con ese chico.
Estaba comiendo una manzana mientras pasaba mis ojos por todas las mesas cuando lo vi. Era ese chico que se había sentado conmigo. Estaba sentado con otras tres personas mas y todos eran iguales entre si, las mismas perfectas facciones.
Uno era de apariencia de q hubiera hecho pesas toda su vida tenia el pelo negro, otro era medio flacucho con cara de sorprendido tenia el pelo medio rubio, la chica era odiosamente hermosa, su pelo era rubio como el del chico anterior y tenia un cuerpo que solo lo podían tener las modelos. Me dio envidia verla. Y bueno por ultimo el chico q se había sentado conmigo. Hablaban entre ellos y la rubia repetidamente largaba miradas hacia el chico de pelo castaño dorado, deduje que eran novios, mala suerte para mí, pensé. Cuando de la nada misma ese chico me miro pero en sus ojos había cierto dolor, yo aparte la vista confundida y no volví a mirarlo.
Edward cullen
Estaba nervioso, ¿era esa la palabra?, ¿que me había pasado con esa chica?, llegando a la cafetería me encontré con Rosalie, Emmett y Jasper. Me fui con ellos a sentarme en una de las mesas, teníamos que aparentar q éramos normales, comenzamos a hablar de cualquier cosa. Los minutos pasaban y yo me quería largar de ahí necesitaba estar solo para reflexionar que era lo que me sucedía, cuando mis ojos se posaron en ella, yo no sabia que estaba ahí pero al parecer mis ojos si. Ella se dio cuenta que la estaba mirando y nuestros ojos se encontraron y otra vez mi pecho ardía con la misma intensidad como la primera vez. Ella volteo la mirada, ¿asustada de nuevo? , agarro sus cosas y se fue junto con sus nuevos amigos.
-Vamos-me dijo Rosalie, ya era hora de mi próxima clase.
-No- le conteste, no tenia ganas de nada quería estar solo-Voy a estar en auto-.
Agarre mis cosas y me fui al estacionamiento. Ya adentro, su imagen inundo mi mente, no podía dejar de pensar en ella y no comprendía el porque nunca me sentí así por nadie y eso que conocía a muchas chicas. Me recosté en el asiento, eran esos momentos en los q desearía poder dormir.
Bella Swan
Las siguientes horas de clases pasaron volando para mi y todo eso porque no dejaba de pensar en ese chico que me parecía tan lindo y tan perfecto, parecía un sueño, pero que para mi mala suerte ya estaba con alguien.
Estaba caminando por el estacionamiento y lo vi de nuevo estaba en su auto con la puerta abierta, al rato las tres personas que se habían sentado con el estaban entrando en el volvo, me molesto ver como la rubia se subía al asiento del acompañante. Furiosa cerré la puerta y me fui a mi casa.
Estaba en mi cuarto cuando su rostro se me presento, pero esta vez el me sonreía yo no podía entender porque pensaba en el cuando tendría que odiarlo por la actitud q había tenido conmigo esta mañana, ¿porque pensaba en el? Solamente había considerado que era lindo y hermoso nada mas esa no era excusa para que estuviera en mi mente todo el tempo.
-¡Bella a comer!- era Rene, mi mama
Baje a los saltos tenia mucha hambre, junto con ella estaba mi padre Charlie, el era el oficial de Forks, mientras que mi mama trabajaba en una librería, apenas me había sentado comenzaron los interrogatorios.
-¿Cómo te fue?- me pregunto mi mama mientras me servia fideos.
-Bien, nada más q mucha tarea-conteste sin ganas
-Eso es muy común bella- me respondió mi padre
-Si lo se , es que es mucha tarea para un solo día-m reí y termine d cenar . Ya en mi cuarto me puse a escuchar mi grupo favorito de música, hice mi tarea y me acosté. Mañana va ser otro día m dije.
Edward cullen
Ojala pudiera dormir ya estaba en mi casa no paraba de pensar en ella, gracias a que podía leer mentes pude saber que se llamaba Bella pero por alguna razón no podía leerle la mente, que fastidio quería saber que pensaba ella de mi, quería saber toda su vida, de porque había venido a Forks, porque me miraba así cada vez que nos veíamos, pero todas eran preguntas inconclusas. Necesitaba saber donde vivía, mañana iba a seguirla tenia que averiguarlo aunque no sabia con que fin yo quería saberlo. Tocaron la puerta.
-¿Edward q te pasa? no saliste en toda la tarde- era Esme mi madre ella siempre tan cariñosa conmigo
-No m pasa nada, solo quería estar solo-trate de sonar lo mas convincente posible
-No m mientas te conozco como si te hubiera parido- se rió- hijo cuéntame que es lo que te pasa
-Ehh…-dude en decírselo-hoy en clase de biología-m calle, ¿tenia que contárselo? Tal vez ella tenía una solución para mí-vi a una chica, su nombre es Bella, pero no puedo leerle la mente y…-Esme m callo.
-Y, ¿que es lo que te pasa cuando la ves?-su vos sonaba preocupada y la misma vez ansiosa.
-No se cada vez que la veo siento algo acá-me toque el pecho-siento que m arde con mucha fuerza y su olor, es un aroma exquisito no me puedo resistir, de repente tengo necesidad de matarla pero a la misma vez no, algo me dice que no debo hacerlo, pero no porque no es correcto, si no por algo mas y no se que es-m calle, Esme estaba pensando se le notaba en la mirada perdida-estoy muy desesperado por intentar saber que es y también por saber q piensa de mi y maldita sea no le puedo leer la mente por más que intento no puedo y eso me frustra porque siento que estoy obsesionado con ella-.
-Ayy hijo mío-solo se limito a contestar eso-.
¿Eso era todo lo que me iba a decir? Estaba furioso ni mi madre me podía dar una solución.
-Edward debemos contárselo a Carlisle el seguro va encontrar una solución y ojala sea lo que estoy pensando-¿q era lo q estaba pensando? Le leí la mente, mala idea, sabia como eludirme.
Fuimos al despacho de Carlisle, Esme me pidió que m quedara afuera, ¿porque? ¿Que era lo que no podía saber? Intente leerles las mentes, pero nada, en blanco entonces agudice el oído y escuche que escribían, ya sabían como eludirme, como odiaba eso. La puerta se abrió y Carlisle me pidió que pasara Esme nos dejo a solas. Carlisle se camino con paso decidido hacia mi y me dijo
-Hijo con Esme encontramos la solución a tu problema-¿problema? Si podría llamarle así PROBLEMA-
-Bueno decimelo no aguanto mas- el me miro y continuo
-Vos te sentís así cada vez que ves a Bella porque- y yo me quede expectante a que hablara entonces lo dijo-Porque te estas enamorando de ella, es por eso q no le podes leer el pensamiento, es por eso que cada vez que la vez te arde el pecho-.
Yo no daba a crédito a lo que oía como podía estar enamorado de ella si no sabia lo que era el amor.