Discleimer: Hetalia & LatinHetalia NO me pertenecen, sin embargo Canadá (dígase Matthew Williams) ha sido secuestrado por mi persona & no pienso devolverlo ¬¬ & menos te lo presto a ti Francis… tu ya tienes a tu ingles…

Resumen: Algo extraño esta pasando & solo dos personas saben la verdadera razón de esta locura. _ ¿como es que nunca me di cuenta? Si a mis ojos él siempre fue el único…_ una carrera contra el tiempo, & contra bastantes pretendientes… ¿Quién será el verdadero amor de Matthew? Pero sobre todo ¿Quién fue la mente maestra?

Advertencias generales: Uso de nombres humanos, mundo alterno, locuras de la autora, uso de malas palabras, aparición de los latino-americanos, fujoshin al ataque, YAOI, OOC etc.

A Thousand Miles.

Prologo "Invisible"

Lo que pasa desapercibido para los ojos…

…es lo que más vale la pena admirar.

Tenia bastante sueño, y realmente le fastidiaba levantarse tan temprano y no desayunar sus benditos panqueques con miel de mapple, pero toda era la culpa de Alfred, que a su lado ya exhibía su frecuente sonrisa matutina, realmente no sabia como demonios le hacia para verse tan bien después de aquella noche de desvelo.

Soltó un suspiro al aire, definitivamente su hermano era totalmente un extraño para él, pero por ahora su mente se encontraba concentrada en llegar al colegio, era su ultimo año en la escuela medio superior, pronto entraría a la universidad y a pesar de que la idea le fascinaba, no podía dejar de pensar que aquel año seria como los anteriores.

_Matty… ¿en que piensas que no le pones atención a este Hero?_ escucho la voz de su hermano hablarle, por lo que alzo el rostro encontrándose con un puchero del menor.

_Disculpa Al... pero tan solo pensaba en…_ comenzó con la típica excusa de cada año, sin embargo como siempre Alfred le interrumpió a la mitad de la frase.

_Prometiste entrar al equipo de Hockey de este año, así que te veo más tarde_ menciono antes de correr hacia la entrada del colegio, donde ya lo esperaba su tutor universitario y primo consanguíneo.

Matt no se había dado cuenta que había llegado al colegio, pero aunque se hubiera dado cuenta aquello no cambiaria, siempre pasaba desapercibido y en esta ocasión no había excepción. Sin embargo eso no era del todo verdad.

_¡Matt!_ grito una voz femenina a sus espaldas, conocía aquella voz muy bien puesto que pertenecía a una de sus pocas amistades, estaba a punto de girarse con una sonrisa en los labios cuando sintió un peso sobre si, la chica ya le había abrazado por la espalda y si no se cuidaba seguro lo asfixiaría.

_¡Tonta!_ grito esta vez una voz masculina, el rubio pudo sentir como poco a poco el aire entraba en sus pulmones._ ¡Por poco lo matas!_ otra vez aquella voz recriminándole a la chica, esta vez, Matt si alcanzo a girarse para observar a aquellos dos, sonrió con ternura al observarles.

Frente a sus ojos se encontraban dos personas, el chico era de piel canela y ojos centellantes de un tono chocolate, sus cabellos oscuros en un desordenado peinado, tenia el seño fruncido porque se encontraba regañando a su hermana, la cual igualmente tenia la piel canela con el cabello largo azabache peinado en una tranza que se movía con soltura como su dueña, sus ojos eran del mismo tono que el chico, solo que con un brillo de picardía y peligrosidad mayor.

Ambos lucían el uniforme escolar a su propio estilo un tanto desaliñado, casi salvaje, pero que se veía muy bien en ellos, "¿me quedaría a mí ese estilo?" se pregunto de inmediato el canadiense pero tan solo negó con la cabeza, eso no era para él.

Los otros dos siguieron discutiendo, por lo que Matthew tan solo los observaba con entretenimiento, siempre le había parecido una relación bastante interesante la de aquellos dos mexicanos_ Chicos… ya es hora de entrar a clases…_informo el rubio llamando la atención de ambos, era extraño pero a pesar de que su voz seguía siendo tan bajita y "delicada" ellos siempre le escuchaban.

_ Ya escuchaste Alejandro así que date prisa y muevelas que para eso son…_ sonrió la chica al momento en que se colgaba del brazo del canadiense y jalaba a su hermano colgándose de igual forma de su brazo, ¡oh si! llegar acompañada de dos guapos chicos era genial.

_ Lupe eres incorregible…_ murmuro con una risotada al aludido yendo hacia la entrada del colegio, él era de un salón diferente al de su hermana así que al llegar a la entrada se separo de los presentes_ bueno ahí los dejo… ¡TÓRTOLOS!_ grito ya estando a una prudente distancia mientras reía a más no poder, su hermana estaba mas que sonrojada al igual que Matthew.

Aquel grito había logrado que las miradas se centraran en ambos por lo que aun muertos de vergüenza, tan solo se soltaron a reír, realmente ¿Quién podría creer semejante mentira? Eran muy buenos amigos pero solo eso. Decidieron por salud propia no aclarar cualquier relación en torno a los chismes del colegio y tan solo se dirigieron a su salón.

_Sabes… deberíamos hacerle caso a Alex y salir algún día en una cita…_ bromeo la chica mirando de reojo al muchacho el cual solo se sonrojo y comenzó a tartamudear, por lo que ella se colgó literalmente de su espalda_ Vamos Matt sígueme el juego…_ le susurro al oído la chica puesto que sabia que "esa persona" les estaba siguiendo, claro aunque ni siquiera el canadiense se había dado cuenta.

El rubio sonrió levemente ante aquello, no sabia porque se comportaba en ocasiones raras su amiga, lo que si sabia era que por una buena razón lo hacia_ En ese caso…porque no mejor nos vemos en "ese lugar" será sumamente "intimo" ¿no crees?_ se moría de vergüenza al solo decir aquellas palabras, pero eran divertidas las miradas de los presentes que le escuchaban y por otro lado, le encantaba ver a su amiga sonrojada, así como se hallaba en ese instante.

Los brazos de la azabache comenzaron a flaquear hasta que tan solo atino a bajarse de la espalda de su amigo, su rostro estaba sumamente sonrojado, gracias a todos los santos que era bronceada, porque si fuera albina parecería un tomate y no quería que su primo la viera así o…

_Fusosososo pero que linda te ves así lupita…_ menciono un chico abrazando mortalmente a la joven, ella se maldecía internamente pero más a su amigo que estaba claramente muerto de risa.

_ Me ahorcas ¡Toño! ¡Su-el-ta-me!_ murmuro a duras penas la mujer, separándose de su primo el cual la observaba con cara de ternura, a veces creía que estaba mal de la cabeza, pero había algo o más bien alguien que le preocupaba más aquello, si se enteraba "él" seguro tendría muchos problemas, comenzó a rezar para que no hubiera llegado ya.

_Pero… ¿Por qué? Si luces tan linda…_ menciono el joven de mirada esmeralda y cabellos chocolate, era sumamente atractivo, era uno de los tutores universitarios, a pesar de que ya se encontraba en el primer semestre de la licenciatura, se había esforzado para que le dieran ese cargo y ello era por dos razones.

_ ¡Hmph! Déjate de tonterías y si no vas a saludas a TODOS_ lo miro con furia_ entonces no saludes a nadie…_ dijo observando de reojo a su amigo rezagado, a veces no entendía como alguien tan lindo y guapo como el canadiense no fuera visto por otros.

_ ¿De que hablas? _ pregunto con acento español mientras ladeaba la cabeza buscando a alguien más pero solo lo noto cuando su prima, furica le daba un tremendo pisotón en el pie y se iba tomando del brazo a un rubio que le era familiar _ y ese ¿Quién es?

_ Matthew… el hermano mayor del zopenco come hamburguesas con complejo de héroe arraigado…_ se escucho una voz masculina y molesta, Antonio se giro quedando frente a Lovino Vargas, como le gustaba ese chiquillo, a pesar de que fuera casi dos años menor que él. Se habían conocido años atrás cuando eran tan solo unos niños y siempre le había gustado su forma de ser aunque no entendía porque todo mundo decía que tenía un "humor de los mil demonios"

_ Lovi _ menciono de inmediato apresando al joven de mirada miel en un abrazo el cual rechazo el más joven de inmediato, pese a que se encontraba sumamente sonrojado, no paraba de decir palabrerías de barrio, aquello hizo salir a todo mundo de sus aulas correspondientes y de esta forma ser el punto de atención para los presentes, Lovino trataba de alejar a Antonio de si, lo que no podía lograr y más aun parecía que el agarre se hacia cada vez más fuerte.

_ Al parecer tu pesadilla numero uno ya llego…_ menciono en voz baja Matthew sacando una libreta de su mochila y unos cuantos lápices de colores, puesto que aun no iniciaban oficialmente las clases se pondría a "hacer eso". Frente a él se encontraba sentada la mexicana que no dejaba de reírse por el espectáculo que se escuchaba en el pasillo.

_ Lo bueno es que huimos a tiempo hahahah pobre, pobre Italiano… seguro ahora correrá el chisme hasta la señorita Elizabetha y llegara a tomarles fotos_ todo aquello ya podía verlo en su imaginación, la enfermera del colegio era sumamente conocida por su amor al BL, de hecho a pesar de que fuera tan joven y trabajara de medio tiempo en la escuela, era una de las mentes más prestigiosas en medicina, actualmente se encontraba realizando su tesis, pero obviamente necesitaba relajarse y ¿Qué mejor lugar que donde había cursado la preparatoria?

_ No quiero ni imaginarme como quedara Antonio si es que los llegan a ver…seguramente Lovino lo matara a golpes…_ agrego con preocupación el canadiense iniciando con su "obra de arte".

_ ¡Cierto! Rayos… y Toño que me debe dinero… bueno _ soltó un suspiro largo_ le preparare el velorio mas barato que encuentre_ dijo al instante en que una sonrisa un tanto maliciosa cruzaba por sus labios.

Matt rodó la mirada ante el comentario de Guadalupe, al principio de su amistad, le aterraban las palabras de la joven latina, eran demasiado extravagantes y extrañas, sobre todo su comportamiento y bromas, pero, con el tiempo y asimilando que era "visto" por alguien más que no fuera Alfred, comenzó a desenvolverse, comenzó a ser un poco más abierto con otras personas, lamentablemente esas personas solo eran su contado circulo de amigos.

_ P-por cierto…t-tengo algo que c-confesar…_ murmuro con cierto bochorno el rubio desviando su mirada amatista de los ojos chocolates de su amiga, su corazón comenzó a palpitar furiosamente y el nerviosismo apoderarse de su cuerpo.

_awww yo también te amo Matty pero no lo volveremos a "hacerlo" hasta que me pidas matrimonio…_ le interrumpió la joven con una sonrisa aun en los labios, frente a ella, su amigo se puso totalmente rojo hasta las orejas y no dejaba de tartamudear, sin duda había sido una buena venganza aquello, aunque pensándolo bien ¿lo malinterpretaría alguien?

_ ¿Q-QUE CARAJOS DICES?_ se escucho el grito ensordecedor, aquel mismo sonido que hizo callar a las habladurías de todos los que habían escuchado aquella pequeña conversación.

_ L-lovino… n-no es lo que tu piensas yo solo…_ comenzó a explicar Matthew, si sabia de las rencillas entre esos dos, pero también sabia que le tenia mucho aprecio a la chica.

_ Hahahaha _ comenzó a reír la aludida aun con las miradas sobre su persona, realmente no le interesaba mucho lo que dirían los chismes de ella, le valía muy poco además de que sabia que las personas que realmente le interesaban no se lo creerían.

_ ¡SILENCIO!_ grito nuevamente el italiano mientras se aguantaba las ganas de matar a todos los presentes, tomo del brazo a Guadalupe alzándola de su asiento mientras que con la otra mano jalaba a Matthew fuera del salón, estaba justo en la puerta cuando giro su rostro y miro a los presentes en el salón_ y más les vale no hablar de esto ¿capici?_ dejando a todos con cara de asustados.

_ OH vamos Lovino no te enfades… sabes muy bien que era una broma además…_ trato de excusarse la mujer.

Se encontraban en el jardín, perdiéndose la primera hora de clases, si hubiera sabido aquello el joven canadiense sin duda se hubiera quedado dormido, soltó un suspiro, puesto que aun esperaban a que el aludido aclarara de una buena vez.

Lovino se recargo en el frondoso árbol del jardín, cruzo los brazos frente a su pecho y cerró los ojos aun con el seño fruncido, parecía muy reflexivo, frente a él se encontraba Guadalupe tratando de que le prestara atención y Matthew a un lado de ellos, esperando el "regaño" ¿Qué mejor forma de iniciar clases? Soltó nuevamente un suspiro de frustración, por lo menos sabia que aquello no le perjudicaría ni a su amiga ni a sí mismo, un de las "ventajas" de ser invisible.

La chica daba una y mis razones para que el otro le hablara pero no funcionaba. Por sin enfurruñada se rindió. _ eres un pesado primo…_ murmuro con un deje de satisfacción al instante en que las mejillas del italiano se iluminaban levemente con un tono rosado.

_ ¡Claro!_ se dejo escuchar la tenue vocecilla del canadiense con satisfacción, al fin entendía porque se hallaban ahí, observo a la dama notando su cara llena de duda, por lo que tan solo sonrió un poco, mientras que el tercero por fin se dignaba a dirigir su amielada mirada a los dos presentes, tenia una sonrisa torcida, una sonrisa que cualquiera de las chicas del instituto mataría por observar, e inclusive Antonio desearía que le perteneciera.

_ Ammm ¿De que me perdí?_ pregunto de inmediato la joven observando a uno y otro de sus amigos, estaba totalmente confundida, no entendía que se traían esos dos, cruzo sus brazos frente a su pecho y cerro los ojos tratando de hacer memoria, cuando lo logro los abrió totalmente entusiasmada_ Por supuesto la primera reunión ¿Cómo es que no lo note?_ susurro más para si que para los presentes.

Los tres se miraron unos a otros para después sonreír a su peculiar forma, hacia casi ocho años que se conocían, cuando eran apenas unos niños a pesar de que ninguno iba en la misma escuela.

Flash Back

No entendía realmente porque se encontraba ahí, puesto que la mayoría de los invitados rozaban entre los 12 y 13 años, mientras que ella apenas había cumplido los nueve años, era el cumpleaños de su primo Antonio, al cual simplemente no entendía, por lo menos era una fiesta de disfraces y se encontraba entusiasmada por usar aquel disfraz espadachín, era como uno de los tres mosqueteros que había escuchado en un cuento, su hermano iba idéntico a ella, por lo que, al ser gemelos, nadie podía identificarlos. Aquello seria divertido.

Sin darse cuenta y con el ajetreo de tanta persona se perdió en la fiesta chocando con una niña vestida con un bonito vestido lavanda, la observo muy de cerca, era sumamente linda, con aquellos ojos de miel y cabellos castaños oscurecidos, y más aun con esa mueca de enfado en su rostro, sonrió de medio lado, ella iba vestida de niño ¿no? Entonces porque no demostrarle a su hermano que ella era lo que quisiera no importando ser una niña.

Sin embargo en ese instante algo más llamo su atención al mismo tiempo que la niña frente a ella desviaba la mirada al mismo lugar donde ella misma.

Se trataba de otra niña con un vestido de un tono rosa pálido, con holanes y creolina, abrazaba fuertemente un osito de felpa, sin embargo lo que le llamaba la atención a los dos niños, era que se encontraba llorando y peor aun pasaban varios adultos frente a esa princesita y no le prestaban atención, al mismo tiempo y sin proponérselo los dos espectadores cerraron los puños con fuerza y se encaminaron a la pequeña, era de su misma edad, de cabellos rubios hasta la barbilla, sus ojos se encontraban escondidos tras unas gafas redondas y de estos brotaban un sin fin de lagrimitas.

_Oye ¿Te encuentras bien?_ dijeron ambos al mismo tiempo y con sorpresa se observaron, para después solo escuchar los pequeños lamentos de la rubia que los veía.

_ ¿Pueden verme?_ pregunto con sorpresa, era la primera vez que alguien lo veía y más aun observando a dos personas que se habían preocupado por él.

Fin flash back

Aquel había sido el primer encuentro entre ellos, para después dar paso a una batalla de palabras en donde descubrirían que realmente no eran lo que aparentaba y tenían más en común de lo que creían, desde ese entonces cada inicio de curso se reunía "el club de los hermanos mayores", como ellos solían nombrarlo –de hecho solo la mexicana lo nombraba de aquella forma-.

_ Es que eres muy despistada… ¡maldición! idéntica al bastardo tomate_ murmuro lo ultimo en voz baja levemente sonrojado por lo ocurrido minutos atrás.

_ Pero ya nos perdimos la primera clase…_ soltó resignado el rubio, era su clase favorita "literatura".

_ No te preocupes Matt, de todas formas solo darán la introducción_ sonrió levemente la chica yendo a abrazarle.

_Tsk dejen de hacer eso maldición ¿que no ven que podrían vernos? Si serán idiotas…_ murmuro el italiano observando como se abrazaban sus amigos, a pesar de que se veía sumamente molesto, no era de aquella forma, puesto que esos dos chicos al igual de "cierta persona" eran los únicos que no lo comparaban con su Fratello._ por cierto…_ su voz comenzó a sonar bastante molesta, era hora del regaño_ ¿Qué era eso de matrimonio y "hacerlo"?_ los observo con su mirada de gangster.

_ya te habías tardado en preguntar_ respondió con ironía la dama del trío_ veras que era solo una broma…_ sonrió burlonamente, sus orbes chocolate se fijaron en las miel del joven hablándole sin palabras.

Matthew los observo en silencio, sabia que le ocultaban algo, pero no les preguntaría, aquellos dos eran sus mejores amigos de cierta forma, así que si no debía saberlo por algo importante debía de ser, por lo que sin pensarlo dos veces su vista se dirigió hacia los grandes ventanales del segundo piso del edificio escolar, en el tercer ventanal se encontraba su atención, aquel era uno de los salones de los grupos de ultimo curso, una tenue sonrisa se asomo en sus labios y su mirada parecía resplandecer.

Cerro los ojos un instante sintiendo la brisa mañanera revolver sus cabellos dorados, se sentía tan vivo… era de una forma extraña pero por alguna razón su corazón palpitaba con tranquilidad a un ritmo que se antojaba dormir una siesta, ya no se encontraba molesto por no dormir nada por culpa de Alfred… ya no…

_ Matt quería decirnos algo en la mañana, justo antes de mi broma_ se escucho la voz femenina, sacándolo de su ensueño, se giro a ver a sus amigos, y comenzó a ponerse nervioso, no entendía porque se hallaba de aquella forma, pero si sabia que ellos le entenderían, inclusive muchas veces habían tratado de convencerle, sin embargo no estaba del todo seguro de decirlo.

_ ¿Y bien?_ pregunto con impaciencia el ojimiel, ambos tenían la vista fija en el rubio, se preguntaban que era eso tan importante para ponerse nervioso, aunque quizás, solo quizás ya lo sospechaban, sin embargo no dirían nada hasta que el otro hablara.

_ E-este y-yo…_ bajo la mirada un instante observando el césped bañado de roció, ¿Por qué le hacia tan difícil decir eso? No era nada malo ni vergonzoso entonces ¿Por qué?, soltó un suspiro, lleno nuevamente sus pulmones de aquel elemento vital y los observo con decisión a los ojos.

Era la primer vez que veían aquella mirada en él, Guadalupe se sonrojo notablemente, por alguna extraña razón aquella mirada era tan… varonil, tan intimidante que la ponía nerviosa, por otro lado Lovino se sorprendió de sobremanera, esa mirada le recordaba la primera vez que su abuelo le hablaba de la mafia italiana de todas y cada una de sus aventuras.

La mirada de un hombre con decisión, ambos esbozaron una sonrisa sincera esperando escuchar el veredicto de su amigo.

_...y hubieras visto la impresión de todos al ver aquello, es más creo que todos estaban mas que sorprendidos…_ Alfred hablaba y hablaba, sin embargo a Matthew aquello no le molestaba, la tarde era sumamente calurosa y aun no entendíais todo lo relatado por su hermano tenia algo de veracidad, aunque él estuvo presente en ese instante.

Lo veía de reojo, con aquella sonrisa tan característica de él ¿Por qué no era parecido a su hermano? Aquella mañana pudo sentir un poquito de lo que era llamar la atención, solo un poco ya que por poco se habían olvidado de él en la lista de los novatos de la prueba de Hockey, sin embargo la intervención de sus amigos había ayudado mucho a ello, podía sentir por sus venas la adrenalina de aquel simple partido, era una sensación que anhelaba con el alma.

_ Eres magnifico ¡Matty!_ escucho la voz de su hermano mientras era rodeado por un fuerte abrazo, aquellas palabras calaron tan dentro de él que no pudo evitar sonrojarse, se sentía tan bien estar de aquella forma con su hermano, sin duda había tomado una buena decisión al tomar aquella prueba.

_ G-gracias Al…_ alcanzo a pronunciar, sin embargo su hermano no le soltó de aquel abrazo, era extraño, fue de cierta forma desconcertante, sin embargo no le incomodaba, era… como si… justo cuando comenzaba a entender aquellos brazos le dejaron libre, por un instante se sintió solo.

_ Vamos Brother es hora de ir a comer…_ menciono con entusiasmo el joven americano corriendo hacia una cafetería, un poco antes de entrar a esta misma le menciono_ ya sabes que a Arthur no le gusta que lleguemos tarde…_ y tan solo aquellas palabras lograron que la sonrisa en los labios de Matt flaquera.

Escucho el tenue sonido de la campañilla de la entrada de aquella cafetería, un mueve viento desordeno su cabellera nuevamente, sobando de su mejilla la humedad de una gota cristalina, entonces el sonido de su celular le llamo la atención, había llegado un mensaje nuevo, así que aun tomando su tiempo para llegar saco su móvil de la bolsa derecha de su saco del colegio, el remitente para su sorpresa era desconocido.

No sabia si abrirlo o no, así que opto por lo primero, puesto que tenia curiosidad, solo esperaba que no fuera equivocado.

*He pensado en ti,

En tus labios y deseos

En tus ojos y silencios

En tu piel y sentimientos

Y he decidido que te quiero

...

Sus mejillas comenzaron a arderle, su corazón dio un salto y sentía mariposas en el estomago, sus miembros estaban ciertamente descompuestos, sentía todo temblar como si aquello no fuera posible, ¿era para él aquello? ¿No era una broma?

Se quedo mirando anonadado el mensaje, leyéndolo una y otra vez hasta que nuevamente sonó aquel timbre, un nuevo ¡mensaje! Se sintió nuevamente nervioso mientras presionaba aquel botón para revelar el siguiente mensaje del mismo número desconocido.

…

Pero ni me hizo falta pensarlo

Ego quasi MatthewWilliams.

Atte: anonimo.

Continuara...

Notas: Bueno este es mi segunda historia de Hetalia y la primera larga que tengo.

Agradezco a toda persona que se haya detenido a leer esto tan… singular, aunque puede que sea "común" aun así gracias por leerlo. También a aquellos que quieran dejar comentario alguno les dejo unas preguntas a ver quien me responde.

¿Quién es "esa persona" que sigue a Guadalupe y Matt?

¿Qué parejas creen que abra?

¿Será un Matt…?

Es todo por ahora, por cierto, mis México también son mellizos, solo que decidí cambiarles el nombre un poco, aunque siguen siendo los mismos, también aparecerán mas latino americanos pero necesito su ayuda para manejarlos porque no conozco muchos modismos argentinos, chilenos y demás.

Por cada review Kimajorou protege a Matt de ser violado…