Ludwig x Tonatiuh / Alemania x México

Antes de comenzar a leer puedes conocer esta pareja y su historia en mi galería de deviantArt: gallery/26648714/HAP-Mexico

*Notas al final.

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Capítulo 1

Sigo cruzando ríos, andando selvas . . . amando el Sol.

Du bist es!*

Ludwig no podía creerlo. Después de casi 8 años y una separación un tanto…complicada Tonatiuh estaba allí frente a el, caminando a lo largo del enorme y solitario pasillo, abriéndose paso entre los halos de luz que flotaban a través de los ventanales y se estrellaban en los paneles de cristal que formaban las oficinas de la ONU. Era una tarde especialmente soleada. Era como si el mexicano hubiese traído a el sol consigo.

Habían participado en la misma reunión, el alemán caía en cuenta al mirar los documentos bajo el brazo del moreno, sin embargo no había podido reconocerlo en el auditorio entre al menos 200 militares de distintos países. Pero, ¿Como podría haberlo hecho? si Tonatiuh había cambiado tanto.

El rubio se tomó su tiempo para mirarlo caminar y le pareció más alto y más fornido que antes, pero fue ese uniforme el que le hizo caer en cuenta de que ya no era aquel junge* que conoció hace casi 8 años atrás; ese joven que se emociono de sobre manera cuando le fue asignada un águila a su cuidado, y como orgulloso le mostraba al europeo la manera en que al animalito abría altivo sus alas cuando lo levantaba en el brazo. Tonatiuh podía pilotear un jet como pocos y a la vez maravillarse a la más mínima sorpresa como cualquier joven que apenas salía a conocer le mundo. Y entonces Ludwig recordó la frase que se repetía una y otra vez en su cabeza cada vez que abrazaba al mexicano: "Tan ligero en brazos . . . tan letal en batalla"

Ese mismo joven o mejor dicho hombre estaba allí luciendo gallardo un uniforme de Capitán, con esas tres estrellas doradas adornando su gorra, tal vez pronto se les uniría una cuarta insignia y con algo más de tiempo probablemente una promoción a un cargo de General.

Parecía que Tonatiuh por fin había decidió dejar de mirar su teléfono y ese movimiento en su cabeza había provocado que una de sus insignias doradas rebotara un rayo de sol que se estrello sobre las orbes azules de Ludwig, deslumbrándolo y sacándolo de su ensoñación notando la inminente salida del moreno por la última puerta del corredor rumbo a los elevadores. Ludwig tenia que hacer algo.

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Por seguridad nadie debía ingresar aparatos electrónicos u de otra clase a las oficinas y mucho menos a una reunión y apenas había recogido su teléfono de la zona de guardarropa Tonatiuh inmediatamente se puso a buscar algún otro mensaje nuevo de parte de su esposo, pero solo se encontró con varios correos de la Secretaría de Defensa y uno de sus hermanas mayores.

El último mensaje que había recibido de Thomas había sido ese mismo día por la mañana. Tonatiuh no había logrado dormir por los nervios y había despertado demasiado temprano a repasar su informe para los Cascos Azules. Estaba ansioso sin duda, pues aunque no era su primera vez entre el grupo de militares mexicanos llamados para apoyar a las Fuerzas de Paz, si era su primera vez como Capitán y responsable del equipo.

"Good Morning Pumpking"– comenzaba el mensaje que Tonaituh ya había leído probablemente unas diez veces solo para darse valor - "Mis padres y Theresa lamentan mucho que no hayas podido venir pero todos estamos muy orgullosos y seguros de que lo harás muy bien, además del Jubileo de su querida Reina mi padre no ha dejado de hablar de ti"

"See you anon, I love you so bad"

Tonatiuh y Thomas habían planeado por meses esas vacaciones a Edinburg con la familia del pelirrojo. Su afable suegro amaba a su reina y a la familia real con singular devoción pero difería completamente de la idea de Tom quien estaba muy seguro de que la realeza ya no era necesaria en estos tiempos modernos y sin duda el pelirrojo necesitaba a su querido moreno junto a el para no exasperar y discutir todo el tiempo con su progenitor.

Pero, por sobre cualquier cosa esta el deber, y el mexicano fue llamado para unirse de inmediato a una misión, así que las vacaciones o cualquier otro compromiso debía ser cancelado, pero cuando eres un militar de alto rango y con demasiadas responsabilidades no puedes darte el lujo de desperdiciar ni un solo día de descanso así que Tom tuvo que viajar solo a ver a su familia a Escocia.

Tonatiuh suspiro profundo al no descubrir nada nuevo desde hacia horas. Su esposo era militar, piloto y General, sabia de los protocolos en las reuniones militares así que probablemente le llamaría hasta entrada la noche cuando fuera el tiempo perfecto de no interrumpir nada.

Guardo el teléfono antes de apretar el paso hacia los elevadores pero entonces una voz le detuvo, una tesitura grave que probablemente pensó no volvería a escuchar jamás pero que sin duda no había olvidado, una voz que a veces le atormentaba y perseguía en sueños y que pudo reconocer a pesar del idioma.

Entschuldigung Käpitan*!

En las películas románticas el tiempo pasa lento; en situaciones así, los protagonistas parecen moverse y percibir todo en cámara lenta pero en cuanto la voz de Ludwig perforo sus oídos, Tonatiuh giro de inmediato reaccionando como si de una orden se tratara, aunque más tarde se reprendería a si mismo por la acción de la que sin duda culpo a su entrenamiento militar.

Su cerebro tardo en procesar la imagen frente a el, miro hacia los lados un tanto confundido y rezando inútilmente que fuera un engaño de sus ojos. El General Ludwig Beilschmidt estaba de pie frente a el, luciendo su impecable cabello rubio y su uniforme cubierto por esa larga y elegante gabardina negra que solo lo hacia verse más alto y espigado.

¿Ludwig? – devolvió el llamado casi con la misma sorpresa mientras abría sus orbes chocolate en una expresión que el alemán definiría como de: "gato asustado".

Por algunos segundos, que al mexicano le parecieron eternos nadie dijo más nada pero conforme pasaba el tiempo la atmosfera se relajo para Tonatiuh quien fue el primero en sonreír y acercarse amistosamente.

¡Ludwig! – la entonación de su voz cambio – ¿Como haz estado? De verdad que jamás imagine enco…

¿En verdad eres tu? – el rubio que no parecía salir de su asombro le interrumpió abruptamente mientras decidía ir a su encuentro.

Ha ha ha, pero por supuesto que soy yo – rio el moreno de manera natural y despreocupada - ahora soy Capitán, que buena fortuna encontrarlo aquí General – dijo mientras el rubio lo miraba quitarse la gorra y peinar un poco su cabello azabache con los dedos.

Ludwig sintió cierta molestia en el pecho. Tonatiuh no debería estar sonriendo, no debería de estar caminando a su encuentro, no debería de estar tan tranquilo. No, Tonatiuh debería de estar nervioso, ansioso, debería de retroceder y huir solo para que el alemán lo pudiese ir a atrapar - ¡debería de…! - y sin pensarlo más el alemán estiro su brazo para sujetar fuertemente la nuca del moreno y estrellar sus labios con los ajenos en un contacto tan rudo que el mexicano pudo sentir sus dientes vibrar.

Los labios de Ludwig se movían desesperados sobre los del moreno y Tonatiuh estaba decidido a protestar por tal atrevimiento.

¡Ludnnngh - Nhggg! Aghhh! - eso fue realmente una mala idea ya que el rubio aprovecho para introducir su lengua en su boca. Cuando el mexicano sintió esa tibia humedad buscando la suya no pudo sino tratar de evitar cualquier contacto, intento empujarlo sin importar tirar todo lo que llevaba en brazos pero eso solo provoco que la mano libre de Ludwig lo atrapara de la cintura y lo acercara a su cuerpo en un abrazo para nada inocente.

Tonatiuh sintió hasta la hebilla del cinturón contrario enterrarse en su pelvis junto con otras formas, así que lo mejor que se le ocurrió al más bajo fue quedarse quieto y no agregar más roces innecesarios además de los que ya estaban teniendo, apretó los puños entre su pecho y el de contrario esperando que a Ludwig se le terminara el aire pronto o que el cayera inconsciente por falta de oxigeno.

La mano derecha del alemán se aferro a su nuca con fuerza y ladeaba a su antojo la cabeza de Tonatiuh para acoplarla mejor a su profundo beso y sus prominentes movimientos de quijada sin embrago el moreno nunca le correspondió el beso, su lengua se mantenía lánguida mientras Ludwig hacia con ella lo que quería. Poco a poco y como si hubieran empezado de atrás hacia delante el beso fue tornándose más suave, menos desesperado, hasta ser solo ya un par de toque delicados de labio a labio. Unos últimos roces suave que el mexicano si correspondió... o al menos eso le pareció a Ludwig.

Eres tu.

¡Maldita sea Ludwig! – después de algunos segundos fue lo único que escapo de los labios del moreno después de aquel beso. El alto rubio mantenía su frente apoyada en la de su contrario observando atentamente las reacciones, Tonatiuh no había abierto los ojos, los mantenía fuertemente apretados y tenia las pestañas húmedas gracias a unas lagrimitas traicioneras que se habían acumulado en los bordes, el beso había sido demasiado y por un momento pensó que Ludwig intentaba ahogarlo con su lengua y saliva.

Tonatiuh sentía las manos del General sujetarle el rostro con firmeza pero no se atrevió a abrir los ojos hasta que aparto a Ludwig suavemente de si, lo cual sorprendió al alemán pues esperaba una reacción más violenta, tal vez un golpe o una bofetada de "dama ofendida". Por segundos le pareció que el robarle un beso no había molestado tanto al mexicano pero en cuanto escucho los pasos y sonido de voces a sus espaldas comprendió que Tonatiuh no había querido hacer "una escena" frente a un grupo de personas que se dirigían a los elevadores.

Fue entonces cuando el moreno se dio cuenta de que todos sus documentos y gorra habían quedado alborotados sobre el lustroso piso y casi sin reparar en Ludwig o en lo que había echo se arrodillo para recogerlos mientras el grupo de personas pasaba sin darles mayor importancia.

Déjame…ayudarte… - ofreció apenado.

Ludwig se arrodillo junto a el para ayudarle a recoger los documentos que se habían desperdigado en el piso, noto el temblor en las manos del moreno cuando trataba de reunir con evidente dificultad las hojas con sus dedos entorpecidos por los nervios. Tonatiuh ya no se atrevía a mirarle y el rubio se sonrió airoso de poder seguir provocado esa clase de reacciones en un hombre como el sin embargo su sonrisa triunfal murió en sus labios después de divisar en la temblorosa falange izquierda de Tonatiuh esa brillante argolla de matrimonio y en ese momento pensó que no sería mala idea conocer en persona al "maldito afortunado" y del cual solo había oído hablar una vez de labios de Arthur Kirkland.

T- te ves bien… Ludwig – el mexicano se levanto abruptamente aun nervioso y tratando de organizar sus pápeles – m-me da…gusto, en verdad, tengo que i…

Déjame llevarte

¡NNOO! – allí estaba la fiera que recordaba, Ludwig apenas le había tocado el hombro y ahora Tonatiuh si había reaccionado como si de fuego se tratará.

Por favor discúlpame - mentira no lo sentía.

Tonatiuh se suavizo ante la disculpa y ante los ojos azul cielo del alemán que lo miraban, de esa manera - No, no te preocupes yo pedí transporte al hotel me llevará de inmediato a la base.

¿Cuánto te quedarás?

El moreno negó con la cabeza - hoy mismo volare de regreso en el Hércules que me trajo aquí.

Escucha Tonatiuh yo… - otro grupo de personas llego esta vez desde los elevadores.

Adiós Ludwig que estés bien - Tonatiuh balbuceo esas palabras y prácticamente se escabullo entre la gente que entraba al foyer solo para entrar tan veloz como pudo a uno de los elevadores, no miro hacia atrás ni siquiera cuando las puertas se cerraron.

Permaneció apretando entre sus brazos las hojas y su gorra como si fueran un salvavidas, aun no entendía por que su cuerpo seguía temblando y sus labios punzando. Sabia que debió defenderse, que tenia la fuerza suficiente para defender su honor y su estatus de hombre casado y golpear a Ludwig después de esa osadía.

Pero se había rendido muy fácil a ese par de ojos azules.

Continuará…

Por ahora sin advertencias +18. Las cosas irán subiendo de tono poco a poco pero tampoco será muy hard a menos que me llegue iluminación divina.

Ahora que me quede sin tablet para dibujar quiero aprovechar el tiempo para escribir. No es nada fácil escribir un fanfic pero siempre he tenido la inquietud de escribir la historia de estos personajes más que ninguna otra, y aunque intenté hacerla comic me di cuenta de que es un trabajo monumental.

Este fic tiene como único fin entretener así que no esperen mucha fidelidad a la historia mundial, la realidad que vivimos o al universo de HAP aunque si me tomare la libertad de usar sus personajes. Ludwig parecerá un poco "malo" al inicio pero solo esta celoso y confundido.

¡Ojala les guste!

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( ^.^ )
C(") (")

*Alemán:
Du bist es! : eres tu!
junge: joven
Entschuldigung Kapitän!: disculpe Capitán