La chica golpeo a su contra parte gusto debajo del estomago lo que ocasiono que el chico azabache gruñera

- Tienes mucha fuerza gatita – susurro el chico

- Idiota – mascullo la chica volviéndolo a golpear de lleno en su estomago

- Por ti – suspiro el chico

- Imbécil – mascullo la chica al instante de golpearlo de lleno en su cara, ocasionando que el azabache sangra levemente de la boca

- No importa cuánto me golpes, no podrás cambiar el pasado – repuso el chico deteniendo un golpe que iba dirigido hacia su estomago

- Mal nacido – gruño la chica

- cuida tu boquita gatita – murmuro el chico con una sonrisa

- Juro que te matare con mis propias manos– mascullo la chica

- Hablas mucho – dijo el chico detrás de su oído – pero haces poco – murmuro, mientras se alegaba de ella – veamos si puedes alcanzarme gatita – repuso mientras empezaba a legarse a toda velocidad

- Ya lo veremos bastardo – murmuro la chica

Habían volado como nunca, incluso la azabache se olvido por algunos instante que su deber ara proteger la ciudad no destruirla, como hacía unos momentos había hecho al pasar a través de un conjunto habitacional, pero poco importaba si con eso alcanzaba a ese chico, ese maldito chico que había tenido la osadía de llamarla gatita

- Muéstrate – grito la chica en medio del bosque, hacía rato que se habían internado en esa gigantesca mancha de naturaleza y por más que buscaba no lograba encontrar a butch

- Le temes a la oscuridad – murmuro una voz desde los arboles

- No – repuso la chica

- Entonces por qué quieres que me muestre – pregunto la voz

- Para que demuestres que no eres un cobarde – gruño la chica

- No soy un cobarde – exclamo la voz – más bien soy un caballero que no quiere lastimarte - murmuro

- Tu lastimarme – replico la chica – ja no me hagas reír – repuso la chica con una sonrisa

-Quieres que te lo demuestre – murmuro el chico

- Inténtalo – gruño la chica

- Está bien – susurro la voz

Bellota utonio, nunca supo a ciencia cierta qué fue lo que al final paso, cuando su cerebro volvió a reaccionar, estaba recargada contra un grueso árbol aferrada a los hombros de su acérrimo enemigo correspondiendo con furia a sus carisias

- Ves gatita te puedo lastimar y mucho – murmuro el chico mordiendo de nueva cuenta el labio inferior de la chica, arrancándole un suspiro de satisfacción

Después de todo se convertía nuevamente en imágenes, como si un colash gigante se tratara, ella golpeando a Butch, el deteniendo su golpe fácilmente, sonriendo, mientras la atrae más hacia su cuerpo, con una sonrisa triunfadora, después de eso simplemente se alego de ella dejándola completamente bloqueada

Algunas horas más tarde, sus hermanas dormían plácidamente cada una en su propia habitación pero la chica de ojos color verde esmeralda, aun que era conocida como la más dormilona de las tres, permanecía a un despierta mirando a la luna en el horizonte

- Butch – susurro la chica mientras una ligera lagrima corría por su mejilla ligeramente sonrojada, aun que le dolía admitirlo el chico azabache había tenido razón

El podía lastimarle en donde más le dolía a ella, en su feminidad, porque no importaba lo ruda que fuera ella, el solo hecho de saber que un chico ella le parecía atractiva, era suficiente para desajustarla emocionalmente

- Butch – volvió a susurrar mientras se acurrucaba sobre su cama sin saber que una delicada sombra la veía desde el otro lado de la acera

- Yo también pienso en ti gatita – suspiro el chico de ojos color verde esmeralda mientras se elevaba lentamente – que descanses bellota – susurro el chico, mientras arrogaba un delicado beso deseando que alguna vez, volver a sentir esos delicados labios, sabor manzana verde, contra los suyos