Sigue adelante, sin miedo a fracasar
Pues nuestro triunfo ya esta muy proximo
Nuestro destino es batallar y triunfar…
Pero entregando siempre lo máximo
Lograre… Mi anhelo
En el destino hay que creer
Mi lucha (Cap. 1)
Un nuevo alarido resonó nuevamente por toda la habitación… La situación, se estaba volviendo complicada…
Muy complicada… Otro alarido resonó nuevamente, desgarrante, escandaloso… El parto de la señora Kyouyama estaba siendo muy dificultoso, además de doloroso, como su expresión enseñaba… "¡No puedo!" "¡De verdad, es demasiado para mi!"
El señor Kyouyama se paseaba inquieto de un lugar a otro. De pronto miro a su esposa… sabía a que ella realmente se refería a la crianza del infante, después de todo, ella ni siquiera quería al bebe. Pero, realmente paresia dolerle, así que, tomo su mano, para que supiera que contaba con todo su apoyo… todo su apoyo, en todo lo que decidiera, siempre…
Ella, se sintió muy agradecida del gesto de su esposo… Realmente, los sucesos ocurridos en los últimos días la hicieron dudar de la fuerza de los sentimientos que los unían… es que con la drástica noticia del bebe, tuvieron que organizar una boda… y fue solo por el civil, muy diferente a todo lo que ella había imaginado. Además, el había tomado una actitud muy distante los días anteriores al evento… Y ella había asumido que era por el apresurado compromiso que uniría sus vidas, para siempre. Había pensado quizás era como todos le habían dicho… que lo de ellos solo fue un chiste para el, un pasatiempos… que solo se casaba con ella por culpa. Aquellos días habían sido toda una tortura para ella.
Cierto día, le había comentado la posibilidad de un aborto… que no sería complicado, existían diversos métodos, tenían el dinero necesario, no sobresalía del presupuesto, si había algo que les sobraba era el dinero… Pero, al parecer fue una pésima idea… Ella comprendió esto al ver la cara de espanto que parecía crecer en el rostro del señor Kyouyama…
¡Es que, realmente no quería un hijo ¿Cómo poder querer uno ¡Perdería su libertad ¡Prácticamente se quedaría sin vida! Además, apenas cumplía con la mayoría de edad… solo dieciocho… ¡Como tener un hijo a los dieciocho? Realmente no estaba lista para ello…
"¡Pues deberías haber pensado en eso antes de revolcarte!" Le había dicho su madre, a tiempo que le estampaba soberana bofetada en la cara "Tú te buscaste todo lo que encontraste, lo que te sucede no es más que TU responsabilidad y TÚ deberás afrontar SOLA la situación" "¿Pasaste un ratito divertido?... ¡Pues ahora afronta las consecuencias!".
Eso fue lo que recibió de su madre en vez delapoyo buscado…Pero sabía que tenía razón…
Así era como había dado en ese hospital…
Habían pasado seis meses desde el nacimiento de Anna… El bebe tan "Deseado" había resultado ser una bebita, por lo demás bastante linda… Tenía las delicadas facciones de su madre, además del cabello rubio y el pálido tono de piel. Dos perlas negras parecía era lo único que había obtenido del progenitor.
El ambiente en que la niña crecía no era de lo más sano… Sus padres peleaban constantemente… A Anna no le gustaba el ruido que hacían sus padres…
Mucho menos le habría gustado entender lo que decían…
"¡QUE NO ENTIENDES QUE NO QUIERO LA MUGROSA NIÑA!" "¡Es eso TAAAN difícil para TI!" exclamaba una mujer en estado colérico, Tenia en ambas mejillas de la cara raspones que obviamente se debían a que, en un momento de histeria, había clavado sus uñas con fuerza en sus pómulos, para luego deslizarlas hasta el mentón… "¡NO QUIERO!"
"¡Por dios, cálmate mujer!" "¡ES SOLO UNA NIÑA!"¡COMO TE PUEDE MOLESTAR TANTO UNA NIÑA? -Reclamaba el esposo.
"¡Pues por eso mismo¿Qué no ves?" "¡HAY QUE APROVECHAR AHORA QUE ES SOLO UNA NIÑA!" reclamaba la desesperada mujer de Kyouyama
"¿Aprovechar que!"- dijo el, a pesar de que sabía muy bien a que se refería su esposa.
"No te hagas… sabes perfectamente de que hablo…"-reclamo la mujer.
"¿Pero con quien?", alegaba el esposo… "¿Con quien dejarla, quien querría una niña que ni siquiera es suya?"
"¡De eso me encargo yo!" –exclamo la señora Kyouyama, mientras sonreía triunfante y corría hacía el teléfono.
5 años más tarde
Anna observaba triste aquel lago que tanto le gustaba… Recordaba con tristeza lo sucedido hacía cuanto… ¿dos o tres horas?
Flash Back
"¿Cómo que no puedes!" "¡ERES UNA HOLGAZANA, ASÍ, NO LLEGARAS A NINGUNA PARTE!" –GRITABA Kino, la sensei de Anna.
"¡Pero no puedo!" –exclamaba Anna, mientras tiritaba de miedo…
Estas palabras le costaron muy caro a Anna, quien en cosa de segundos se encontraba en el piso, con la mano de su sensei estampada en la mejilla izquierda irritada e hinchada…
"Ten más respeto cuando me hables, que esto te sirva de lección, mañana seguirás con tu entrenamiento¡no quiero peros!"
"Si, sensei", dijo Anna con la voz quebrada por el llanto.
"¡Contesta como se debe!", alegaba Kino
"Si, sensei…" repitió Anna¡Es que no podía contener el llanto!
El sonido de la palma de Kino azotando la otra mejilla de Anna resonó por toda la habitación
"Para que llores con ganas..."
Fin Flash Back
Anna se puso de pie, lo mejor sería estar lista para la cena, claro, solo no quería una nueva cachetada, porque si se quedaba ahí, tendría una y muchas más…
N/A¿Qué tal¿Como quedó? REVIEW PLISSSSSSS
xau