Bueno primero que nada, los maravillosos e ingeniosos personajes usados en este fic son propiedad de la Maravillosa J. K. Rowling y por supuesto esto no tiene ningun tipo de fines de lucro asi que espero que les gustes... gracias por leer.

La última risa

Esa tarde habían decidido cerrar los Sortilegios Weasley y quedarse en la habitación que había arriba. Fred se había decidido. Por fin iba a decir todo aquello que callaba.

-"George…"-Su hermano que estaba sentado en la ventana, volteó a verlo.

-"¿Qué sucede Fred?"-Preguntó.

Este le dio la espalda y respiro juntando valor.

-"Sucede que tengo algo que confesarte."

George lo miró confundido, ellos siempre se habían confiado todo. ¿Qué podría haberle ocultado?

-"Me he enamorado."-Concluyó el otro, ajeno a los pensamientos de su hermano.

Al escuchar esto George sintió como su corazón le dolía. Fred se había enamorado. Si bien el sabia que el había salido un par de veces con Angelina, también sabia que ella tan solo le gustaba. Pero ahora no estaban hablando de gustar, estaban hablando de "Amor". Esa persona ¿Ya conocería los sentimientos de Fred? Y si era así. ¿Habría correspondido a ellos? ¿Acaso alguien le robaría su otra mitad?

-"¿Quién es?"-preguntó George, simulando para que su voz no se oyera como un sollozo.

Fred, se acerco a el y le tomo las manos. George desvió la mirada, mientras sentía como gruesas lágrimas escapaban de sus ojos.

-"Me he enamorado… De ti."

George, lo miro sorprendido. Gesto que Fred tradujo como una negativa. Pronto se levanto y comenzó a disculparse, a decir que todo eso estaba mal, que era prohibido y que si el quería se iría para no molestarlo. Pero George sordo de felicidad, tan solo atinó a abrazarlo.

-"Yo también, Fred. Yo también."-Susurró el dulcemente George en el oído gemelo de su hermano.

Fred lo miró sonriente y dijo:

-"Bueno entonces prométeme que cuando todo esto acabe, vamos a hablar con la familia. Para así poder vivir felices y juntos por el resto de nuestras vidas."

-"Si"-Acepto George.

Lentamente, acercaron sus rostros y así, abrazados cerraron su pacto con un dulce y calido beso en el que transmitieron todo su amor y felicidad.

Fred y George, habían ido a la madriguera ya que, Ginny los había llamado muy nerviosa.

-"¿Qué sucede, Gin?"-Preguntó Fred ni bien llegaron.

-"Si, ¿Qué pasó? Parecías preocupada."-Coincidió George.

-"Es que Neville me ha mandado un mensaje… Harry, Volvió a Hogwarts."

Los hermanos se miraron. Sabían lo que eso significaba. Hoy, era el día, Hoy, Sucedería, Hoy, sabrían como continuarían el resto de sus vidas. Dentro de los gemelos se prendió una luz de esperanza. Si todo terminaba, ellos podrían vivir juntos sin importar que pasara.

-"Debemos ir."-Dijo Ginny.

-"Si. Pero, tú te quedas."-Sentenció Fred.

-"Pero…"-Protestó ella.

-"Pero, nada."-La interrumpió George.

-"Esta bien. Me quedo. Y de paso le voy a contar a mamá sobre una linda pareja de jóvenes pelirrojos que se estaban besando en el patio. Por cierto me pregunto como si no eran conocidos nuestros lograron atravesar las barreras de protección…"-Dijo ella maliciosamente.

Los gemelos se quedaron congelados.

-"Eres…"- Empezó Fred.

-"…Muy malvada, hermanita."-Concluyó George.

-"Lo se, aprendí de ustedes."-Contestó ella satisfecha.

-"Esta bien. Vienes con nosotros…"-Dijo George.

-"Pero mas te vale obedecernos…"-Amenazó Fred.

Se tomaron de las manos y desaparecieron rumbo a Hogsmeade.

Al llegar a la taberna "Cabeza de Puerco", se encontraron con un muy molesto Aberforth y un sonriente Lee Jordan. Pasaron a través del pasadizo que se encontraba detrás del retrato de Ariana, hacia la sala multiproposito. Allí se encontraban: Harry, Hermione y Ron junto a un gran grupo de chicos pertenecientes a todas las casas de Hogwarts, todas, todas menos Slytherin. Al principio todo fue muy aburrido. Hasta que por fin llegó la orden del Fénix y tuvieron algo que hacer. Fred, George y Kingsley se ofrecieron a organizar las defensas que comunicaban los corredores con el exterior. Lo que significaba que se tendrían que separar para poder cubrir todo el perímetro. Antes de hacerlo, los gemelos se ocultaron en un aula vacía.

-"George, prométeme que vas a regresar con vida, prométeme que cuando esto termine voy a llegar y te voy a ver esperándome con una sonrisa. Por favor…-Pidió Fred.

George tan solo asintió.

-"…Y por favor prométeme que si algo me llegara a suceder a mi, vas a vivir. Prométeme que serás feliz y nunca te rendirás, no importa que pase. Yo por mi parte te prometo que si te llegara a pasar algo a vos, voy a vivir mi vida amándote cada día, manteniendo tu recuerdo en mi corazón y serás mi gran y única felicidad…-Continuó con la pena presente en su voz.

George había comenzado a llorar silenciosamente al escuchar las palabras de su hermano. Lo abrazó tan fuerte como pudo, usando todas sus fuerzas. Deseando que ese abrazo no fuera el ultimo. Lo mantuvo cerca suyo como si fuera el aire que necesitaba para vivir, como si así evitara su separación. El era su otra mitad, solo con el se sentiría completo.

-"¿Me escuchaste?"-Preguntó Fred con una sonrisa.

-"Solo a medias."-Contesto George también sonriente. Ambos rieron suavemente.

Fred, se separó del abrazo pero solo y tan solo para volver a acortar la distancia, sellando nuevamente su promesa con un dulce y tierno beso en el que Fred y George probaron el sabor de sus lágrimas, pero al separarse ambos tenían una sonrisa. Con decisión el mayor de los gemelos se dirigió hacia la puerta y de espaldas dijo:

-"No dejemos que esta sea nuestra ultima risa."-En ese momento volvió su cabeza y con una sonrisa dijo-"Ahhh… por cierto, Te amo…"- Una vez habiendo dicho esto comenzó a caminar.

-"No, hermano, esta, no será nuestra ultima risa."-Dijo observando el lugar donde antes había estado su gemelo.-"Y por cierto, yo también te amo…"

George comenzó a luchar con los mortifagos que habían logrado entrar en el castillo. Estaba distraído, pensando como estaría Fred, si el estaba a salvo. Estaba tan desconcentrado que si hubiera tenido oreja, la hubiera perdido por culpa del hechizo que acababa de pasarle rozando. Después de lograr deshacerse de los mortifagos se encontró con Luna, quién le dijo que toda su familia se encontraba en el comedor. George comenzó a correr por los pasillos como si de eso dependiera su vida. A medida que se acercaba, sentía como un sentimiento de desesperación crecía en su interior. Cuando por fin llegó vio a toda su familia sentada alrededor de "algo".

Vio que sus padres estaban llorando. ¡No! ¿Qué había pasado? ¿Dónde estaba Fred? No lo veía. Sintió como se le paralizaba el cuerpo. Contuvo la respiración. Vio como Percy con los ojos rojos por llorar, se le acercaba como si estuviera intentando tranquilizarlo. No entendía que pasaba. Hasta que por fin a través de el hueco donde antes había estado su hermano mayor. En ese momento sintió como le fallaban las piernas y caía de rodillas al suelo, sintió como las lagrimas comenzaban a derramarse por si solas. No. No podía ser. Tomo su cabeza entre sus manos, alguien le murmuraba palabras de consuelo. Se tapó los oídos no quería escucharlo. No existían en ese momento palabras que pudieran ayudarlo, además no quería oírlo, no quería aceptarlo, no quería. No quería que nadie le dijera que Fred estaba muerto. No podía ser. Seguro era una broma, seguro. En cualquier momento abriría los ojos y se acercaría riendo. Luego su madre se enojaría y ellos reirían. Como siempre. Como pudo, tambaleándose se acerco a su hermano y se sentó a su lado.

-"Fred"-Le susurró al oído-"Despierta…"

Bueno, aca mi primer fic de Harry Potter. Esta pareja realmente me encanta y el hecho de que en Harry potter y las reliquias de la muerte, no se menciona nada al respecto sobre que pasó con George cuando supo que Fred había muerto y que paso luego de la batalla en Hogwarts. Bueno en un comienzo iba a ser un oneshot, pero bua se me hizo muy largo...

Espero que les guste... y por favor si dejan un review no sean muy malos XD...