Poketopía
C1: Bienvenidos a Poketopía
En un automóvil se encontraba un joven de 18 años, de cabellos color azabache, emocionado por la experiencia que viviría.
Acompañadolo se encontraba su padrastro Mayer, quien conducía y quería como si fuera su verdadero padre y su hermanastro Clemont. Los 3 se dirigían hacia un hangar, esta es la razón por la que el azabache de nombre Ash se encontraba emocionado, sería la primera vez que volarían la vieja avioneta familiar, de la cual había crecido escuchando de ella.
La madre de Ash enviudo cuando este tenía 2 años, el no recuerda a su padre, pero su madre dice que él es su viva imagen, se casó con Mayer cuando él tenía 7 años y desde entonces a vivido con su padrastro, el cual es un padre muy amoroso que siempre se preocupa por que sus hijos estén preparados para el mundo y sigan sus sueños. Creció junto con Clemont, al principio no se llevaban bien, pero aprendieron a hacerlo, a tal punto que son inseparables, aunque claro como todos los hermanos, compiten para ver quién es mejor.
—Llegamos al fin —Mayer mencionó a sus dos hijos al llegar al hangar correspondiente de la familia
—¡Woooow! —Ash se asombró al ver la avioneta de la familia la cual tenía el espacio para al menos 4 personas, sin contar al piloto y copiloto. —Ya quiero poner esta máquina en el aire y volar como un águila con ella —Ash decía muy emocionado bien do a la avioneta.
—Ni creas que serás el primero en montar esa belleza Ash, yo seré quien la volará primero, yo si me he preparado prácticamente toda mi vida para esto, y con estudios reales y no con simples videojuegos, yo no la estrellare como tú, cabezotas— Clemont decía con aire de superioridad a su hermano.
Nop , ninguno de ustedes dos volará hoy, solamente serán mis copilotos-
—¿Qué!, pero yo quería volar —decían ambos hermanos en tono desaminado.
Los 3 hombres se subieron a la avioneta después de que Mayer arreglará algunos permisos para poder volar, Clemont fue el último en subir pues quiso observar una vez más la avioneta.
Para él era una belleza poder creer que finalmente, después de esto podría volar aquella nave de la familia. Pues el creció queriendo poder surcar los cielos. Claro a él le gusta mucho la ciencia, es todo un erudito, pero para el todo eso es un simple hobbie que usa para aumentar sus conocimientos, o su ego como decía Ash, siempre soñó con ser un aviador.
—Clemont sube o si no te dejaremos en tierra! — Ash grito para llamarlo —si ya voy, sólo un momento.
Observó la avioneta un poco más y logró observar un tipo de grafiti en la parte posterior de la avioneta que tenía la leyenda "Zapdos One" Clemont frunció el ceño un nombre así no se l
hacía adecuado para una máquina tan bella como esa.
—Hey, Clemont, ya sabes la ruta Mayer consiguió permiso para adentrarse al océano, volaremos por el ¡Pacífico! —mencionaba Ash muy emocionado.
Él siempre había tenido una personalidad un poco "infantil" según Clemont, muy energético y siempre dispuesto a no rendirse hasta el final, una persona muy considerada con los demás, realmente era muy querido por el vecindario, y claro tenía a muchas enamoradas, que por más que tratarán de llamar su atención, el las frienzoneaba legendaria mente, o al menos es lo que sus amigos decían porque él ni en cuenta de que alguna chica lo quisiera.
—Papá, ¿por qué de el nombre zapdos one? No crees que es un poco infantil para una belleza como esta ponerle un nombre de algo inexistente —Mayer miro a Clemont de forma un poco seria.
—Vamos Clemont no es un nombre tonto, es de un pokemon, antes te gustaban y creías que eran reales y habían existido —Ash se acercó a los otros dos —. Es cierto, no recuerdas cuando decíamos cuál era nuestro favorito, el mío siempre fue un pikachu y el tuyo era un luxray, no le veo el problema a que la avioneta tenga el nombre de uno —Ash le comentó a su hermanastro.
—Eso era cuando era niño, además, la ciencia ha probado que es poco probable que ellos realmente hayan existido, y pues como esta avioneta va a ser mía no me gusta un nombre así para ella —Decía Clemont de forma engreída.
Mayer se sorprendió al oír decir esto a su hijo, incluso se molestó un poco por cómo lo dijo.
—¿Y quién te dijo que tú serás el dueño de la avioneta? Podía dársela a Ash o a Bonnie —Mayer respondió de forma un poco molesta.
Clemont prefirió callarse, no le apetecía comenzar a discutir en este momento y más por un tema tan estúpido como un nombre, así que se sentó en su asiento y prefirió no seguir hablando con su padre.
Finalmente estaban listos para despegar, los dos hermanos estaban impacientes para el despegue, querían ya poder ver cómo era el mundo desde el cielo.
Despegaron por fin. Mayer comenzó a elevar la avioneta unos 200m, primero sólo sobrevoló por un pueblo cercano, siguió así por unos 10 minutos antes de anunciar que se adentraron al mar. Ash, quien estaba pegado a la ventana veía el cambio de paisaje asombrado y ansioso de poder tomar los controles un rato tan siquiera. En fin, si se estrellaban por su culpa en el mar sería más seguro que en la tierra ¿no?
Mayer indicó que se adentrarían en el océano en un momento. Clemont se mantenía callado y observando los movimientos que hacia su padre en la cabina.
Una vez en el océano, Mayer se sintió libre de pasar a desplazarse con más libertad, ascendía, descendía, giraba, tocaba el agua, parecía un delfín sobre el aire, por su puesto los 2 hermanos realmente se divertían, era un gran día de sólo hombres.
—Eh Mayer, ¿podría tomar los controles un momento? —Preguntó Ash.
—Claro ¿porque no? —Contestó Mayer. A lo que Clemont sólo frunció el ceño un poco molesto por lo que hacía su padre, pero no dijo nada. En fin, si Ash se equivocaba, cuando fuera su turno demostraría que es mejor que Ash.
Mayer le explicó cosas básicas para poder controlar la avioneta y luego le cedió su lugar de piloto a Ash, sentándose en el asiento de copiloto por cualquier cosa que necesitara. Comenzó a pilotear, realmente estaba feliz por hacerlo y comprendía que era muy diferente a los videojuegos.
La costa había quedado atrás ya hace mucho tiempo, Ash de piloto no lo hacía mal, pues lo único que hacía era seguir una ruta trazada ya previamente, pero él quería experimentar un poco, probar algunas vueltas y piruetas, Mayer le advirtió que no lo hiciera, que le faltaba mucho por aprender para saber pilotear una avioneta de verdad, pero Ash no lo escuchó
Unas cuantas maniobras de Ash fueron suficiente para que Clemont vomitara sobre su padre y para desviarlos de su curso. Ash creyó que sólo bastaría dar vuelta para volver, pero no se dio cuenta que estaban ya lejos de poder regresar, no hasta que un trueno casi golpea la nave.
—Da vuelta no queremos meternos más a fondo de la tormenta —Luego de Mayer haber dicho esto Ash trató de dar vuelta, pero no le respondían ni el timón ni los pedales.
Mayer quitó a Ash del mando, trato de que los controles le respondieran, pero nada, y para colmo, el motor comenzaba a fallar, al igual que el resto de los instrumentos eléctricos de la avioneta, todos de manera inexplicable.
Chrasss
Un rayo alcanzó el ala derecha y provocó que la avioneta perdiera el equilibrio.
—¡SUJETENCE! —Un grito de Mayer fu lo último que se escuchó antes de caer al agua.
La avioneta donde los 3 hombres viajaban encontraba bajo el agua y hundiéndose cada vez más rápido. Ash actuó rápido sacando el equipo de emergencias y lo colocó junto a un desmayado Clemont. linternas, botiquín médico, unos cuantos víveres y una pequeña balsa era lo que incluía el equipo. Ash acercó a su padre, igualmente desmayado, a su hermano y trató de abrir la puerta de la avioneta, pero esta se encontraba atascada.
La avioneta se hundía más Ash trataba de abrir la puerta sin éxito, sintió a alguien a su lado y volteo a ver, era su padrastro que se había levantado ya.
—Juntos —Sólo asintió y siguieron empujando para abrir la puerta.
Los vidrios no aguantaron más la presión y cedieron permitiendo la entrada del agua a él interior, la avioneta no tardo en llenarse y pronto se vieron rodeados de agua hasta el cuello, ahora la avioneta se un día más y más rápido.
Con señas Mayer le indicó a Ash que salieran por el frente, Ash cargo el equipo de emergencia y salió. Mayer llevó a Clemont con dificultad, la profundidad a la que estaban y su estado físico no eran un punto a su favor en esta situación y su edad no le ayudaba tampoco.
Ash salió del agua y la tormenta seguía, sacó la Balza, colocó las cosas encima y volvió a sumergirse para ayudar.
Nado y nado hasta lograr ver a su desmayado hermano. Lo tomó por el pecho y dio más miradas alrededor buscando a su padre, se alarmó al no verlo, pero se desesperó al verla avioneta hundirse y caer en la oscuridad, trató de nadar más abajo pero el aire le empezaba a faltar sumado a la presión, su cuerpo no aguantaría y no podía arriesgar la vida de Clemont también, así que dio vuelta y regreso a la superficie.
Ya en la balsa, Ash reviso A Clemont, quien tenía una gran herida en la frente, de la cual salía mucha sangre, y en la pierna derecha un pedazo de tubo incrustado a unos centímetros de la ingle, Ash limpio las heridas y rogo por encontrar ayuda para Clemont que no paraba de sangrar.
La tormenta seguía, aunque ya no tan fuerte como antes y cada vez se calmaba más.
Clemont seguía dormido, Ash quería estarlo, el cansancio de haber subido a Clemont a la balsa lo mataba, pero seguía preocupado por Mayer.
Cansado y con los músculos adoloridos más un leve dolor de cabeza, no eran tan molestos como la culpa que sentía por lo que acababa de pasar, él había tenido la culpa, por andar jugando los llevó a esa tormenta, por no haberle hecho caso a Mayer ahora el probablemente se encuentre muerto.
No, eso no, Ash sacudió la cabeza para alejar esa idea de su mente, Mayer estaría bien, de seguro logró salir por algún otro lado y tuvo que dejarlos, puede que este por ahí, varado, esperando por ayuda. Cuando encontrarán tierra el volvería para buscarlo de eso estaba seguro, lo encontrarían, claro si primero sobrevivirá a esta situación.
Estuvieron un largo rato a la deriva. Ash en ningún momento pegó el ojo, tenía la esperanza de poder divisar en algún momento a algún barco que pudiera ayudarlo, o en el mejor de los casos a Mayer con ayuda.
Ash comenzaba a desesperarse de ver agua y más agua, y para colmo Clemont comenzaba a temblar estando dormido, le estaba dando fiebre.
La situación era perfecta para Ash, un hermano con fiebre y varados en medio de la nada además de la culpa por esta situación de que ahora podría perderlo a él también si no encontraban tierra pronto, no podía haber nada mejor que esto, ¿o sí?
No debió preguntarse eso porque de inmediato sintió la balsa estremecer y a una criatura que parecía un dragón blanco y azul salir frente a él.
—Giaaaaa —la criatura se mantenía frente a él, mirándolo fijamente, la criatura comenzó a moverse alrededor de la balsa ahora mirando de forma curiosa.
Por alguna razón Ash no sentía miedo pues le parecía que ya había visto a esa criatura en alguna parte.
—Uugiiaa —La criatura se acerco a Clemont y mediante una extraña lz, las heridas sangrantes del rubio se cerraron. Ash reviso que aún mantenía fiebre, pero al menos ya no se preocuparía por la sangre.
—Luuuu- y de repente tan misterioso como apareció desapareció en el agua.
Miro por donde se había sumergido la criatura y sintió un tirón a hacia delante, la balsa se movía rápido hacia algún lugar, trató de mirar que lo movía y pudo ver a unas tortugas azules con negro y tras azules con café más pequeñas que las primeras.
A estas últimas las reconoció.
Pero no podía ser posible, esas criaturas… debía ser alucinaciones provocadas por lo vivido recién, pensó Ash.
Pronto pudo ver tierra delante de él. Y comenzó a divisar a varios pelicanos azul con blanco alrededor de la costa.
Vio la playa acercándose y un paisaje montañoso y boscoso con un poco de neblina sobre el.
Finalmente habían tocado tierra, luego se preocuparía por ver su salud mental, ahora tenía que buscar ayuda.
Ash dejó a Clemont recostado en la arena y lo cubrió con hojas para que no tuviera frío y se dispuso a buscar ayuda.
No sabía por dónde buscar, pero de seguro habría alguien por ahí, el mundo actualmente esta globalizado, prácticamente en cualquier lado hay gente ¿no?
Mientras caminaba por una planicie, pudo observar ratones y conejos a su alrededor, un poco extraños y de colores diferentes. Se le hacían familiares, pero le era imposible que fuera lo que pensaba, le echaba la culpa a su pequeño dolor de cabeza por esas extrañas criaturas.
Camino un raro hasta que se topó con una rara estructura, esta parecía una media Luna de un lado y tenía cabeza como de murciélago.
La observó un segundo hasta que.
Pummmm
Hizo explosión
Rápidamente con sus reflejos de "ninja" se cubrió detrás de unas rocas.
—P..perdón, perdón, ¿se encuentra bien? No me fijé que había alguien más cerca. T..tengo permisos para hacer esto no se preocupe, trabajo para investigaciones de Waterfall —Una voz nerviosa y masculina resonaba de entre el polvo levantado por la explosión.
Era un joven de aproximadamente 28 años, castaño con una camiseta de botones morada oscura, unas bermudas negras y un sombrero de arqueólogo.
—Ah disculpe, soy... mi nombre es Ash, estoy buscando ayuda, mi hermano está enfermo y necesitamos un doctor. —No importa a que fuera un extraño, el necesitaba ayuda y cualquiera quedaba perfecta.
—Bueno, soy doctor, pero no de esa clase que buscas, podemos llevarlo al c.p del pueblo —Le tendió la mano la cual Ash estrechó—Gary Oak por cierto.
—¿C.p? ¿Qué es eso?
—¿qué es eso? El c.p es... —se detuvo un momento y miro de pies a cabeza al azabache.
—¿No eres de por aquí verdad? — pregunto a lo que Ash asintió luego saco una botella de agua de la cual tomó —¿Quieres? —pregunto extendiéndole la botella, el azabache tomó y bebió.
—Bueno, vamos por tu hermano, te ayudare a llevarlo al pueblo —Gary comenzó a ponerse su mochila de nuevo.
Los dos caminaron de vuelta a donde el azabache dejó a su hermano. Cuando llegaron él ya había despertado pero todavía se sentía mal.
—Ash ¿dónde estabas? ¿quién es él? — preguntaba débilmente el rubio de anteojos rotos.
—Fui por ayuda, ven —lo cargo por un hombro mientras Gary lo hacía por el otro
—Soy Gary, mucho gusto
—Eh, Clemont
Los 3 caminaron en silencio aparente por un Valle con un llano más grande que el camino anterior, lo único que se escuchaba era el sonido de los quejidos de Clemont.
—Se queja mucho los cuatro ojos ¿no?
—Y eso que no has vivido toda tu vida con él.
—Los escuche eh.
Los cargadores del rubio sólo se rieron un momento, Gary se detuvo de golpe.
—¡Cuidado! —grito el castaño mientras se lanzaba con los hermanos al suelo.
Cuando mirar atrás, se dieron cuenta que una manada de caballos en fuego pasaba a unos cuantos metros de ellos galopando sincronizadamente y que casi los aplastaban.
—Están en ¡llamas! Esos caballos están ¡incendiándose! —el azabache los miraba desde el suelo asombrado.
—Es típico de ellos, después de todo son pontya y rapidash—Gary se levantaba junto a un Rubio que se quejaba de que ahora le dolía la pierna.
—¿Qué?, pero ¿qué son esas cosas?
—Son Pokémon, mi amigo
—Jaa- Clemont decía en forma de burla —te has de haber golpeado al caer, los pokemon no existen, son cuentos de la antigüedad.
—Te equivocas cuatro ojos, y creo que te sorprenderán al llegar al pueblo, sigamos.
Se levantó y empezó a caminar junto a Clemont, mientras Ash seguía viendo hacia donde se fueron los pokemon de tipo fuego.
—Pokémon...
—Vamos Ashy-Boy...
—Ashy-Boy?
—Así le decían algunos compañeros de la primaria para molestar a Ash.
—¡Que no me digas así!
—Mmm, con que ashy-boy, sería justo llamarlo así, si a ti te digo cuatro ojos.
—Por mí no hay problema — Clemont decía lanzándole a Ash una mirada de burla.
—Me la pagarás Clemont
Los 3 continuaron su camino hasta lograr divisar un pequeño poblado con un estilo medieval, pero con persona con ropa un poco moderna y un montón de criaturas que los dos hermanos reconocieron finalmente.
—¡Pokemon! — exclamaba los dos hermanos al unísono provocando en Gary una pequeña carcajada.
—¿Dónde estamos? — volvieron a preguntar otra vez los dos hermanos al unísono.
—Están en Poketopía, donde los pokemon existen y conviven pacíficamente con los humanos, toda una utopía de fantasía —Gary decía de forma un poco burlona.
—Esto es imposible, los pokemon no existen, son sólo un cuento de la antigüedad, mera fantasía, como lo que ella siente por ti, no existe.
—Créelo cuatro ojos, mira ahí está el c.p.
Los 3 caminaron hasta el c.p.
Ash estaba realmente asombrado, tenía la boca abierta, no podía creer lo que sus ojos veían, sabía que no era un sueño porque no había dormido todavía, se sentía cansado, definitivamente tomaría una siesta pronto, esto debería ser una alucinación de su estado de no dormir aún, si seguro eso era.
Y pues Clemont, Clemont seguía creyendo que estaba en un sueño o alguna alucinación por la fiebre. Esto es imposible no podía serlo debía componerse rápido para demostrarlo.
Los 3 entraron al c.p y fueron recibidos por una chica pelo rosa junto a un pormenorizado con un huevo.
—Bienvenidos al centro pokemon, soy la enfermera Joy estoy para ayudarles a ustedes y sus pokemon en lo que necesiten —decía a los 3 hombres con una tierna sonrisa y con la alegría de la chica tambien.
—Buenas tardes enfermera Joy, traigo a estos chicos uno de ellos esta enfermo y el otro cansado, podría darles una habitación y atender al rubio.
—Claro que si señor Oak, muchachos.
Unos dos jóvenes con un pequeño pokemon rosa con forma de huevo salieron con una camilla y se llevaron a Clemont en ella.
—Bien joven aquí están las llaves de su habitación, si se siente mal puede pasar a la enfermería, que tenga un lindo día — mostró una sonrisa alegre al azabache mientras le entregaba las llaves, le agradeció con una inclinación y fue a sí habitación la cual tenía dos camas y un baño y se acostó en una mientras aventó la única mochila que logró rescatar del accidente, hacia algún lugar de la habitación. Tenía hambre y preocupación por el paradero de Mayer pero el sueño era más fuerte que eso, ni siquiera la impresión de lo que había visto hasta ahora lo mantendría despierto, sólo quería dormir, probablemente esto que pasaba era un simple sueño. No tardó en caer en el mundo de los sueños.
..
Despertó a la mañana siguiente, tomó un baño, pero se acordó de algo no tenía otra ropa, bueno eso no era un problema, todavía tenía la suya del viaje, no esta tan sucia después de todo, y esa mancha café en su camisa azul no es muestra de ello.
Se cambió, poniéndose su camisa de botones de manga corta y unos pantalones negros con unos tenis cafés y fue directamente a ver a su hermanastro a la enfermería, lo encontró durmiendo, los doctores le explicaron que necesitaba descanso y que hoy en la noche se daría de alta.
Esto calmó un poco a Ash, un problema menos, luego se encargaría de buscar a alguien para que lo ayudará a buscar a Mayer así se convenció de que lo haría, pero por ahora estaba confundido, los pokemon seguían ahí, no habían sido alucinaciones realmente eran reales, este lugar lo tenía que conocer a fondo definitivamente.
Fue al comedor y desayuno unos cuantos platos de cóctel de frutas con yogurt.
Las personas a su alrededor se le quedaron viendo por cómo comía alo que Ash no le dio importancia.
Entregó el plato, dio una vuelta a la enfermería vio que Clemont seguía durmiendo abrazando una halmueda y diciendo Lilia.
Sacó su teléfono para tomarle una foto, pero este no servía, de seguro fue por el agua, lo guardo y dio vuelta hacia la puerta del centro pokemon para poder ver a esas criaturas de las que había escuchado en cuentos mientras crecía, hoy sería un gran día para él, seguro así sería.
Él no sabía que este día conocería a alguien que cambiaría su vida la haría una tormenta de emociones nuevas para él.
En el próximo capítulo
"La chica del sombrero de paja"
Hola gente de Watt... ups, no verdad xD
Hola gente de Fanfiction, me presento, Lumynick está aquí.
La razón por la que me encuentro en esta plataforma fue porque quiero ver como es escribir para fanfction, eso y ya había leído algunas historias aquí, así que presentare esta historia, Poketopía, a esta plataforma.
Si alguien me conoce de Wattpad no crea que me mudare para Fanfiction, sólo voy escribir Poketopía en amabas plataformas, el resto de historias y fics se quedaran en Wattpad.
Ahora con la historia.
¡Mi primer escrito en general biene a Fanfiction! (creo que a nadie le importa), basado en una miniserie de tv con el nombre Dinotopia (de la cual a´penas y hay registros de su existencia en internet) y para que no caiga en el olvido decidí rendirle una especie de tributo con este fanfic.
bueno eso es todo.
Soy Lumynick y les deseo un buen día, y en caso de no vernos, buenos días, buenas tardes y buenas noches.
