AU. Levi es un operador de la línea de emergencia 911. Su pan de cada día es lidiar con llamadas que van desde accidentes hasta personas que piden la dirección del Starbucks más cercano. Pero un día su rutina se ve afectada por la llamada de un niño inocente de 10 años. Con una extraña petición. [Riren]
Disclamier: Shingeki No Kyojin no me pertenece, de hacerlo no me verían aquí escribiendo. Estaría haciendo canon el Riren y dibujando titanes con retraso.
Advertencia: Por si no quedó claro en el resumen, es Riren. Es decir, LevixEren. Y no, no es shota. O bueno, sólo un poco...No se preocupen no es explícito ni nada. Lenguaje vulgar (como es de esperar del querido Heichou). Posible OOC (¿?)
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Levi se masajeó el cuello dolorido. Había acomodado su auricular en el escritorio para darse un masaje. Sin importarle que tuviera una persona en línea, puesto que le valía mierda. Se permitió escuchar como todos los demás operadores teclaban en sus computadoras, sonando teléfonos, dando direcciones, avisando a la policía, discutiendo con niños que hacían llamadas de broma.
En su pequeño cubículo, contrastando con el de los demás, estaba bien organizado. Ni una mota de polvo o basura en el. Todos decían que era un misterio el como Levi Ackerman(-barra- te mataré con sólo una mirada) mantenía su zona tan pulcra. Aun a pesar de tener el turno de noche/madrugada en las oficinas.
Normalmente los cubículos de ese horario estaban cubiertos de latas de bebidas energizantes, cafés, gomas de mascar colillas de cigarros y demás. Pero, el de Levi no.
Quizás debido a que el sólo consumía té y aseguraba que quienes consumían «Esas mierdas llenas de químicos y colorantes que te destruyen el organismo» cometían el más estúpido y lento de los suicidios.
El punto era, que su horario era una mierda que hacia que las personas anduvieran más mierdas. Prueba de ello están sus marcadas ojeras y piel pálida. Dando la falsa ilusión de ser enclenque y enfermizo.
Cuando perfectamente podría partirle el cráneo a cualquiera aun con tres horas de sueño y sólo un té en el estómago.
–¡Oye enano~! –canturreó su vecina (irritante, sucia, desaliñada, loca, cuatro-ojos) Hanji Zoe. Otro de los misterios en aquel lugar era cómo Zoe podía mantener tan buen humor con ese horario. O peor, cómo era capaz de hablar con Levi tan insolente y sin recibir maltrato. Más allá del verbal, claro. Bueno…y una que otra patada.
Levi la ignoró.
–¡Levi! –chilló la castaña al notar la indiferencia del más bajo.
El de cabello azabache hizo un sonido que podía interpretarse como un "¿Qué quieres?" o un "Si sigues insistiendo te cortaré la lengua".
Zoe decidió interpretarlo como la primera –. Enanín, ¿vas a venir con Erwin para la noche de películas?
–Le tocaba elegir a Erwin ¿verdad?
La mujer asintió animadamente mientras jugaba con un bolígrafo –. Creo que elegirá una de comedia.
–Él siempre elige comedia.
–Es para ver si así se te quita la cara de amargado.
–Es la única que tengo.
Hanji podría haber continuado pero, había visto de reojo el monitor de Ackerman. Estaba indicando que tenía una llamada en curso.
–Levi...¿Tienes otra vez a personas en línea?
El aludido chasqueó la lengua, tronándose el cuello –. Es una mujer loca que pregunta a que temperatura se debe hornear un pavo.
Zoe estalló en risas. Levi tenía la mala suerte de siempre recibir la mayoría de llamadas inofensivas.
Y esa "mala suerte" lo condujo a la llamada de él.
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¡Que nervios! Soy nueva en este fandom en el sentido de escribir. Leyendo llevo como tres años. Espero les guste esta historia~
No puedo decir con seguridad cuantos capítulos tendrá, tengo estimado menos de diez.
A cualquiera que se tome la molestia de leer, ¡déjeme desearle una feliz navidad atrasada! xD
