No, no es la segunda parte, es una historia colateral. Ya tenía la idea, pero SAra Feniz Black me ayudó a concretarla con un comentario. Espero que les guste! r&R
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EL primer rayo de sol entró por la ventana. Marianne dormía placidamente entre los brazos de su Severus. Se escuchaba el canto de las aves que saludaban a la mañana. Snape abrió los ojos con expresión soñadora la visión de la mujer entre sus brazos era mas que suficiente para converserse de permanecer en cama.
Besándola en la frente cerró los ojos. Seguro de que nada perturbaría esos momentos de íntima paz.
Lo que él no sabía es que alguien tenía otros planes...
La puerta de la habitación se abrió de repente y antes de que el matrimonio Snape supiera que pasó, un fuerte peso les cayó encima, postrandose en medio de los dos, separandolos obviamente. Snape abrió los ojos mientras un brazo se estiró hasta el buró y tomó su varita.
En medio de él y su esposa se hallaba una niña de aproximadamente 11 años, su cabello negro rizado y sus ojos como de obsidiana , que en ese momento tenían un brillo muy especial, que denotaba emoción
Sarah Gwendolyn Snape levantó triunfante su mano izquierda, en la que un sobre estaba siendo ahorcado sin miseria
"MAMI! PAPI!! ESTÄ AQUI!"
Marianne se enderezó con la mirada aun somnolienta "¿Que es exactamente lo que está aquí, pequeña?"
Pero Snape sabía perfectamente de que hablaba su hija: Su pequeña iniciaría su educación en Hogwarts. Sus ojos se pusieron un poquito rojos y emociones encontradas se apoderaban de él mientras escuchaba la Voz de Sarah leer en voz alta
"Sarah Gwendolyn Snape
Recámara que mira al rosal.
Numero 18 Flamel avenue
Hogsmeade"
"Querida Señorita Snape:
Tenemos el placer de informarle que dispone de un puesto en el colegio Hogwarts de Magia y Hechicería - ¿Un puesto? YO nací ahí- "
"Se refiere a que tienes un puesto como estudiante" Dijo Su madre
"ah" Sarah se encogió de hombros y siguió leyendo "Por favor , observe la lista del equipo y los libros necesarios. Las clases comienzan el primero de Septiembre, espero su lechuza antes del 31 de julio.
Muy cordialmente
Minerva McGonagall
Directora adjunta"
Sarah sonreía ampliamente, eso significaba sólo una cosa : Ya podría tener su propia varita. "VARITA!" dijo mientras abrazaba a su madre , quien asintió.
Sarah entonces se tornó a su padre, esperaba ver una sonrisa en sus labios, pero lo que encontró fue la expresión seria y extraña de un padre sentimental. Y no era para menos, había llegado una fecha inevitable, pero que él no quería ver llegar: Sarah sería su alumna, ya no podría verla como su bebé, no sabía si tendría la fuerza para enseñarle, ¿Que podría hacer? Varias veces el amor que sentía por Marianne le produjo conflictos internos al darle clase, y sólo la tuvo medio año. Su hija en cambio , iniciaba Hogwarts. El día en el que Sarah confrontaría la visión que el mundo tiene de su padre. El miedo de que ella terminara viendolo igual lo atrapó.
La primera en darse cuenta fue Marianne que sabiamente abrazó de nuevo a su pequeña y le dijo "Yo te ayudaré a buscar la varita, y entre las dos le cortaremos a Starry un cabellito, después Papi te ayudará a construir la varita, y Tulius la consagrará, ¿te parece?"
"Si , gracias Mami" Aunque aun estaba muy ilusionada por su varita , a Sarah no le gustaba ver a su padre tan triste . "Papi?" preguntó aun en el regazo de su madre, no sabia si se podía acercar a él o no.
"Te felicito, Sarah, y por supuesto te ayudaré a construir tu varita, lo que sea tradición Shamagin, además que Olivanders no me simpatiza" pese a tener una pálida sonrisa en sus labios, su voz y su mirada aun eran tristes y temerosas.
Sarah salió corriendo de la habitación sin decir nada. Cuando la puerta se cerró Snape se agarró el puente de la nariz y dijo "Ya comenzó, mi niña no me verá como antes, ahora se alejará de mí, ya viste que no me abraz"
Marianne lo jaló para su regazo "Tenle un poquito de confianza a tu hija, y verás como Sarah te pagará con creces" Cubrió su rostro de ligeros besos y después dijo "Voy a ver con Dobby que vamos a desayunar, si tengo que salir al bosque a conseguir una varita, mejor será que nos demos prisa, tu quédate en cama hasta que te llame"
Salio sin esperar respuesta. Snape suspiró y enterró su cabeza en la almohada.
Sarah no lo había abrazado, él que se había confesado adicto a las demostraciones de afecto de sus mujeres perdía a una de ellas por culpa de Hogwarts. El odio que la escuela le inspiraba algunas veces se volvía a posesionar de él. Y sólo había recibido su carta, ¿que pasaría entonces cuando Sarah estuviera ahí?
Estaba tan metido en sus pensamientos que no se enteró cuando la puerta se volvió a abrir, hasta que sintió algo muy suave acariciando la porción expuesta de su rostro, algo agradable., cuyo contacto con la piel confortaba y reanimaba: peluche
Giró el rostro y descubrió que tenía a "matka" La foquita de peluche que McGonagall obsequió a Sarah y que inició su colección, amiga inseparable de su hija , frente a él. Manipulada, obviamente, por su dueña
"No quiero que estés triste y le pedí a matka que te consolara" Dijo la niña "A mí siempre me ayuda a sentirme mejor"
Snape sonrió y Sarah le preguntó "¿Por que estás triste? ¿No quieres que vaya a Hogwarts?"
"No es eso, me da mucho orgullo que vayas a Hogwarts, además estaremos juntos, es sólo.."
"A mi me da mucha ilusión" interrumpió Sarah "Imáginate, me vas a dar clases"
"No creo ser tan buen maestro" suspiró Snape con cierto pesar
"¿Bromeas? Eres el mejor!"
"¿Como lo sabes?" Una sonrisa entre curiosa y amarga apareció en el maestro de pociones
Sarah lo miró con detenimiento y después dijo en un tono muy maduro "A ver, Severus, ¿Quien me enseñó a conjurar sillas?"
"Yo"
"¿Y quien me enseñó a sacudir las foquitas de peluche con magia?"
"Yo"
"¿Y quien me enseñó a preparar la poción para curar dolores de cabeza?"
"yo"
La sonrisa de ambos era más abierta ahora. "¿Y quien me enseñó como nacen los bebés?"
"¿Y quien prometió no mencionar eso nunca jamás?" Preguntó Snape
"Tu" Sonrió Sarah y entre risas se abrazaron
"Te quiero mucho , papi, y eres un gran maestro"
Snape se sintió en ese momento capaz de conjurar un patronus tan poderoso que erradicaría a todos los dementores de la faz de la tierra.
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Es el primer capítulo, espero que les haya gustado, repito que no es la segunda parte, pero les comunico que sí habrá segunda parte.
Gracias a todos por su apoyo
Cybergalletas!