Qué onda! Como se pueden dar cuenta últimamente he tenido inspiración :D estoy tan feliz, por eso les traigo esta nueva historia que espero les guste ñ.ñ no les quito más su tiempo así que a leer!

.

.

.

.

"hace muchos años, la vida tranquila de los humanos se vio amenazada por unas criaturas nocturnas. Estas se dedicaban a exterminar esas inocentes y frágiles existencias. Demonios se les llamo, poseían poderes sobrenaturales con los cuales les era más fácil matar a sus presas, el miedo se apodero de todo ser humano pues no querían morir a manos de aquellas criaturas. Fue este miedo lo que los impulso a levantarse en armas, comenzando así una larga lucha, mucha sangre fue derramada tanto de los humanos como de los demonios. Con el paso de la guerra estos seres sobrenaturales fueron desapareciendo uno por uno, dando la victoria a los humanos estos no se confiaron, formaron una organización llamada hunting demons, que se encargaba de proteger la vida y acabar con estas terribles existencias. Años han pasado ya desde ese acontecimiento, las personas viven en paz y son protegidas, mientras que los demonios se dedican a ocultar su existencia, mezclándose entre los humanos sin que estos lo sepan."

.

.

.

-¡karin chan, karin chan!-. Gritaba una joven, frente a una puerta dándole golpes frenéticamente, hasta parecía querer derribarla. - ábreme karin chan-. Se le notaba lo desesperada en la voz.

-ya voy, ya voy-. Se oyó desde el interior una voz algo somnolienta.

La puerta de madera se abrió, mostrando a una chica muy joven, delgada, cabello azabache un poco debajo de sus hombros, algo alborotado signo de que estaba dormida, su piel era blanca y sus ojos de un color negro profundo, sin duda era muy hermosa.

Se tallaba los ojos con sus palmas intentando así acostumbrarse a la luz, enfoco con su vista a la persona frente a ella. Era una chica de su edad, piel blanca, cabello castaño amarrado en un chongo, y ojos color chocolate muy bonita cabe mencionar.

-¿Qué quieres hinamori?-. Pregunto la azabache dando un gran bostezo.

-¿Cómo que quiero?-. Dijo adentrándose a la habitación de su compañera y amiga, corriendo las cortinas de la ventana, dejando entrar la luz del día. Camino hacia lo que parecía ser un armario, lo abrió y saco un traje de maid (estilo como el de kaichou wa maid sama xD ) lo puso en la cama y miro a su mejor amiga.

-aizen sama llega de su viaje hoy, y debemos tener todo listo para su regreso-. A la castaña le aparecieron estrellas en los ojos al decir eso, mientras juntaba sus manos a la altura de su pecho. Una gota resbalo por la cien de la azabache al ver a su amiga en ese estado. Hasta que reparo en lo dicho por ella, rápidamente tomo su uniforme y corrió al baño a alistarse.

Hinamori salió de su burbuja, cuando escucho el agua de la regadera caer, tendió la cama de la azabache y espero a que esta saliera.

Unos minutos después la joven salió, ya lista con su uniforme puesto y el cabello recogido en una coleta, dejando dos mechones caer por su rostro. Ambas se fueron a la cocina para preparar el desayuno.

-te digo karin chan deberías levantarte más temprano-. Decía la castaña dando bocados a su almuerzo.

-si, si como digas bla bla, no necesito que me regañes-. Tomo su vaso de jugo y lo bebió de un trago. Miro hacia la ventana, perdiéndose en el horizonte. Sintió como una mano movía su hombro, volteo encontrándose con unos ojos chocolate mirándola con preocupación, una sonrisa apareció en sus labios, después de todo hinamori momo su compañera y mejor amiga era una persona muy amable y dulce, siempre se preocupaba por ella y la procuraba, por esa simple razón la azabache se ocupaba de protegerla de cualquier tipo de daño.

-¿te encuentras bien karin chan?-. Pregunto, pues se le había hecho muy raro que de pronto su amiga se quedara callada y no le prestara atención.

-si no es nada, ¿Qué me decías?-. Dijo con una sonrisa, mientras se llevaba la mano a su cabeza. La castaña suspiro, karin siempre era así de despistada, algo impulsiva, orgullosa pero una buena persona, la protegía de cualquiera que le hiciera daño, se conocían desde que ambas llegaron a esa mansión prácticamente eran muy pequeñas por eso su amistad era así de fuerte.

- etto.. Solo te decía que, tú te encargues de limpiar el estudio de aizen sama y yo limpiare su habitación-. Un pequeño rubor apareció en las mejillas de momo. Esto no pasó desapercibido para karin pues estaba al tanto que su mejor amiga estaba enamorada de su jefe.

-claro como digas-. Se levantó de su asiento y se encamino a la puerta de la cocina, volteo a ver a su amiga. –por cierto ten cuidado de no mover mucho sus cosas ¿de acuerdo?-. La castaña solo asintió.

Busco lo necesario para realizar la limpieza en aquel lugar, entro a el estudio y comenzó su labor, sacudió el polvo de los muebles, pero al levantar la vista se topó con un cuadro, en él se apreciaba la imagen de un hombre vestido con un traje blanco, cabello castaño y ojos café, sousuke aizen era su nombre, un escalofrió recorrió su cuerpo, trago saliva con dificultad y aparto la mirada.

No sabía a ciencia cierta porque ese hombre no le daba confianza, pese a que la salvo años atrás de aquel incendio en el que murió su familia, la recogió, le dio un hogar pero aun así algo en esa fría mirada le inspiraba temor.

Cerro los ojos y negó con la cabeza, tal vez era solo su imaginación, pues no era la única a la que el "salvo", hinamori y muchos de los sirvientes de esa enorme mansión también fueron recogidos por él. Esa simple razón bastaba para que lo respetaran "¿y porque no? Lo amaran también como era el caso de hinamori".

Termino de limpiar y salió rápidamente de ahí. Llego a la cocina, y al mirar a una mujer rubia de tez morena y ojos verdes, no pudo evitar ponerse inmensamente feliz, la mujer le extendió los brazos, inmediatamente la azabache corrió y la abrazo.

-¡ hali chan volviste!-. Grito emocionada.

-¿Qué sucede karin chan?, ¿Por qué gritas?-. Pregunto la castaña al entrar, pero cuando vio a la mujer, lagrimas se asomaron en sus ojos chocolate rápidamente se unió al abrazo.

-hali chan que b-bueno que-e regresaste-. Decía entre el llanto.

La rubia sonrió, pues en el tiempo que estuvo de vacaciones las extraño muchísimo, ese par eran como sus hijas, le daba mucho gusto saber que también ellas la extrañaron.

-oye starrk ven a ver a las niñas-. Al escucharla karin y hinamori levantaron la mirada, voltearon a la puerta y vieron como un hombre alto de piel un poco bronceada, cabello castaño y ojos azules aparecía, siempre con su típica expresión aburrida, se acercó a ambas y les despeino el cabello en una muestra de cariño.

-¿Cómo han estado?-. Pregunto

-muy bien-. Contestaron al unísono.

-bueno, ya luego hablaremos, por ahora hay que trabajar que según tengo entendido aizen sama llega hoy-. Dijo halibel, todos asintieron, starrk era el mayordomo encargado de recibir a aizen, hinamori y karin limpiaban y preparaban la mesa, mientras que halibel cocinaba la cena.

Una vez estuvo todo preparado todos aguardaban el regreso del dueño de ese lugar, el sonido de una carreta les aviso que ya había llegado, la puerta se abrió dejando ver al hombre del retrato y detrás de el un sujeto de cabello chino largo, tez morena y usaba unas gafas signo de que era ciego.

-bienvenido aizen sama-. Todos hicieron una reverencia, el castaño por su parte hizo un movimiento con su mano indicando que se levantaran, acataron la orden, metieron sus maletas y entraron a la mansión.

En otro lugar, un hombre de cabello blanco y ojos azules miraba por una enorme ventana la luna de esa noche, tenía una copa de vino en la mano. Escucho como tocaban la puerta, dirigió su vista a esta.

-adelante-. Ordeno.

Un hombre de cabello rubio largo ondulado y expresión pacifica entro a la oficina.

-ryuken tenemos problemas-. Dijo serio, el mencionado solo se volteo no le gustaba nada ese tipo de situaciones, pero al ser uno de los líderes de la organización hunting demons el velar por la seguridad de las personas era su deber.

-y ¿ahora que sucede rojuro?-. Pregunto, prestándole atención.

-recibimos una carta del gotei, al parecer descubrieron que un demonio ha estado transformando a humanos normales en semi demonios-. Miro a su compañero y prosiguió. – lo peor es que no saben de quien se trata-. Termino de decir.

Ryuken suspiro, si esto continuaba el caos volvería a reinar, y lo que era peor es que si eso pasaba terminaría defraudando a sus mejores amigos, a los que les prometió proteger a los humanos.

-muy bien convoca una junta urgente-. Rojuro, solo asintió se percató que algo le preocupaba al "Quincy, apodo que se ganó a lo largo de su carrera como caza demonios".

-¿te preocupa algo ryuken?-. Pregunto.

-¿Cómo esta ichigo?-. Se dejó de rodeos, de cierto modo le preocupaba ese muchacho ya que era lo único importante que pudo rescatar de sus amigos en ese ataque a la familia kurosaki años atrás, además estaba el hecho de que recién acababa de despertar como demonio.

-bueno pues según lo que me dijo hirako, kisuke san lo está entrenando-.

-¿kisuke el demonio carmesí?-. ryuken, estaba sorprendido ese kisuke urahara no aceptaba discípulos, pero era de esperarse, pues el chico tenía mucho poder.

-así es, en fin me tengo que retirar a preparar la junta adiós-. Se despidió y salió de la habitación dejando a ryuken solo.

.

.

.

.

GOMEN gomen ¡, tenía este fic en la cabeza y pues aquí se los traigo. Siempre quise escribir de demonios y he aquí esta historia xD.

Aclarando: todos los del gotei son demonios y se preguntaran si todos son demonios ¿Qué relación tienen con una organización que se dedica a cazarlos?, pues conforme avance la historia lo sabrán, que mas….. así este fic tendrá muchos secretos espero que les guste, pronto saldrá shiro chan :3 dejen sus reviews para ver si les gusto hasta otra bye bye ¡