One Shot de Ouran, espero que les guste ^^
Alejando los rayos
No sabía cuando me había empezado a sentir así.
Yo, que nunca dejo que las emociones salgan a través de mi, estoy ahora hecho un manojo de nervios, sin saber cómo reaccionar.
Formamos pareja en uno de los tantos planes locos de Tamaki, y por mi culpa, estamos perdidos. Hay que tener en cuenta que nunca he estado en esta isla, y no conozco el territorio. La cueva donde hemos parado no parece profunda, pero hay que tener cuidado.
La noche se hace presente y el cielo está claro, pero poco a poco parece ir nublándose. Mala señal.
Vuelvo tras echar un vistazo y ver si encuentro a los demás, pero nada de nada. Ha empezado a llover, y no sé si pronto habrá rayos.
Puedo ver como tratas de contactar a través de tu teléfono móvil, ese que en el Host Club te hicieron coger para estar comunicada, pero la cobertura es escasa y no da para una llamada en condiciones.
- ¿Qué hacemos? – me preguntas, mientras miras hacia fuera.
- … No lo sé, habrá que esperar a que sea de día – digo tratando de que los nervios no se reflejen en mi, manteniendo esa serenidad que normalmente llevo conmigo
No recuerdo la última vez que me quedé contigo a solas, y es raro que no te haya tocado con él en esta especie de aventura. Pero se siente bien, sabiendo que nos toco juntos.
- ¿Estás preocupado? – me preguntas, ya mirándome a los ojos.
- ... Solo espero que no estemos mucho tiempo perdidos – te digo, mirándote también a los ojos, perdiéndome en ellos. Mentiroso, me digo a mi mismo, pues desearía que el estar perdidos durara mucho tiempo, y así mantenernos alejados del resto.
- Ya verás como pronto estamos con los demás – dices con una sonrisa, aunque puedo ver que estas nerviosa por la posible tormenta. Es fácil verlo, y eso hace que en mi despierte un instinto de protección ya de por si grande.
- Haruhi… -
Sin más pensar, me siento al lado tuya, haciéndote notar que no estás sola, que estoy allí contigo. Y sin esperar mucho, el primer rayo se hace presente y das brinco del susto. Puedo ver como tienes los ojos acuosos y el ligero temblor que comienza a sacudirte.
Sin que me puedas decir nada, me levanto y te cojo en brazos, intentando ir hacia un sitio donde la tormenta se note menos.
Me siento contra la pared de la cueva y te coloco en mi regazo, pasándote los brazos por la cintura. Con voz baja, te voy contando una historia en voz baja, nunca elevando el tono salvo cuando hay algún punto de esta que lo requiera. Tiemblas del miedo, pero poco a poco te vas relajando, con mi susurro como único sonido, exceptuando algún rayo, pero que desde allí apenas se oyen.
Pones tu cabeza contra mi hombro, cerrando los ojos del cansancio. Y de pronto, me das un beso en la mejilla, suave y corto.
- Gracias, Mori-sempai... –
Ese beso y esas palabras me arrancan una sonrisa sincera, de las pocas sonrisas que puedo llegar a mostrar a alguien. Pero no la ves, porque mantienes los ojos cerrados y sigues pendiente de que continúe esa historia.
No sé si algún día te darás cuenta de lo que siento por ti. No sé si algún día me veras como algo más que un amigo.
Pero mientras, me conformo con contarte historias al oído, y tenerte abrazada, perdidos en los locos viajes que hacemos, esperando que tarden en encontrarnos y así poder prolongar el tiempo que te tengo entre mis brazos.
Mañana será otro día, pero mientras, te seguiré abrazando, alejando el miedo de los rayos.
Fin
Espero disfruten ^^