A Love Song! : Prologue

"Las cosas nunca son como uno quiere que sean" De eso me he dado cuenta a lo largo de mis, bastante cortos, diez y nueve años, el mundo es bastante injusto le da mucho a otros y te arrebata cosas que parecían que estarían ahí para siempre. Ya saben como saber que no podrás ver a tu familia completa otra vez. Aun recuerdo a la abuela intentándome explicar que mi hermana y papá ya no estarían conmigo hasta que pasara mucho tiempo, pero de cierta manera creo haberlo entendido a lo que se refería, digo escuchar a mi mamá llorando como sino hubiera fin a todas horas me decía algo. Y de repente me encontraba vestido con mi uniforme de primaria frente dos enormes arreglos de flores con fotos en el centro de Yukiho y mi padre, mientras que abajo estaban dos cajas que los adultos solo iban y acariciaban con mucho pesar en sus rostros.

"El mundo te quita cosas y te da al mismo tiempo", mi madre, a un año de a verse ido mi padre, se reencontró con un viejo amor de hace años, pasaron muchas cosas y al final ese hombre jamás apareció pero de alguna extraña manera un bebé si, bueno pensé que era un bebé, pero resultaba que era niña, Chika, mi dulce hermana.

Más tiempo pasó y entré a secundaría, mientras que Chika cursaba el segundo año de primaria. Fue en ese momento en el que un horizonte se abrió frente a mi, caminando junto a mis amigos por el distrito Ochanomizu, me encontré con un lugar que no sabía que se convertiría en el verdadero paraíso, fue ahí, en una pequeña tienda que lo vi, un chico que estaba probando una guitarra, una E-335 de Gibson, al instante me quedé embobado viendo como aquel chico tocaba con una precisión de miedo cada nota, el blues que hacía sonar te ponía los pelos de punto y te dejaba sin aliento. Justo ese día le rogué a mamá que me llevara a clases de guitarra pero no somos la familia con más dinero precisamente, aun con todo eso mi abuela paterna me ayudo como pudo, me dio una vieja guitarra Fender, una Stratocaster que pertenecía a mi papá y libros para aprender, libros que jamás usó. Me costó mucho trabajo, pero al final logre aprender a tocar decentemente, en ese lapso conocí bandas como, Nirvana, Pearl Jam, Sound Garden, enamorándome del movimiento Grunge, sin quitar merito a otros grupos que me gustaban mucho como Green Day o Linkin Park.

No se como logré convencer a Umi, mi amigo de la infancia, y a Nico, mi Senpai, de hacer una banda, ambos aceptaron Umi con la condición de no reprobar ningún examen, cosa que fue una labor titanica, y Nico con la condición de dejarlo ser vocalista, acepté. Y así nació Sun Smile, un pequeño trio que era un desastre al principio.

"No somos populares, pero tenemos un sueño…" Eso era lo que pensábamos siempre, mejoramos poco a poco, de echo tardamos hasta la preparatoria para ser una banda decente. Ahora tocábamos en lugares bastante pequeños pero ya salíamos al mundo, tres años llevamos haciendo esto, aún y con nuestra agitada vida de universitarios, nunca habíamos sido tan felices. Y un día común mi mundo dio un giro.

La conocí y apenas tuve el tiempo de Amarla… Esta parecía ser la historia de cómo lograba la gloria ¿no? Pero no es así, esta es la historia de cómo "un chico" se enamoro de algo más que la música…