Lips of an angel- songfic
Mi celular comenzó a sonar, me levante con pereza y caminé hacia la mesa de la cocina, donde recuerdo lo deje.
-amor, ¿A dónde vas?-me dice victoria con su voz algo chillona.
-suena mi teléfono-le contesto fríamente mientras la volteo a ver
Mis ojos añoran ver a alguien más en esa cama.
Tomo el teléfono y mi corazón comienza a latir desenfrenadamente, es ella, mi bella, eh borrado su numero, pero aun me lo se de memoria, y es ella.
-¿hola?-susurro rápidamente, y con una sonrisa de tonto en la cara.
-Edward-susurra lentamente, disfrutando el decir mí nombre.
- Nena, ¿por qué me llamas tan tarde?
-¿te interrumpo en algo?-ahora su voz es triste
-no, solo que es un poco difícil hablar en este momento para mi-le dijo aun mas bajo, giro hacia donde victoria y ella me ve fijamente desde la cama, le hago una seña que se acueste y ella resignada se deja caer en el colchón.
Un sollozo se escucha en la otra línea y se me parte el corazón.
-¿Nena por qué lloras? ¿Está todo bien?-mi preocupación es mucha, y parte de mi cuerpo quiere salir corriendo hacia donde esta ella, y consolarla con una fuerte abrazo.
-no, todo esta mal, no se por que te llame, pero la verdad es que te extraño muchísimo- mi corazón se acelera al mas no poder
-yo también te extraño, como no tienes idea-le susurro
-¿por que susurras?
- Tengo que susurrar por que no puedo hablar más fuerte
-¿esta ella hay?-pregunta agriamente resaltando el "ella"
-si, mi chica está en el cuarto de al lado Y no sabes como desearía que fueras tu.
-me alegro-dice con ironía
-sabes, Creo que nunca olvidamos nuestra historia en realidad
-yo también lo creo-susurra-lo que teníamos era tan fuerte, no se como se termino.
-francamente, yo tampoco, quisiera regresar el tiempo y volverte a tener entre mis brazos.
-Edward… yo-
- Es muy lindo escuchar tu voz decir mi nombre, suena tan dulce-la interrumpo, y me imagino su sonrojo al decirle un cumplido- pues vienen de los labios de un ángel.
-esto esta mal, hablarte, prometí no hacerlo pero Edward, aun te amo-me dice con otro gran sollozo.
- Escuchar esas palabras me vuelve débil y no quiero decirte adiós nunca, mi bella-acaricio su nombre, me gusta decirlo, le queda a la perfección.
-entonces no lo hagas-suplica
- nena, tu vuelves muy difícil la fidelidad con esos labios de un ángel que tienes, quiero correr y besarlos por horas.
-hazlo-me anima.
-es curioso que me llames esta noche, ¿sabes que día es hoy?
-si, hace 6 meses que lo nuestro se termino, y no sabes como me arrepiento, no debí llamarte lo siento, es tarde pero eh soñado contigo estos días.
- he soñado contigo también, bella, yo quiero regresar, volver a tener lo que teníamos, que por idiotas lo dejamos, ir, nena el amor no falta, solo falta que te decidas.
-ya es tarde-solloza
-no aun no es demasiado tarde, todavía lo podemos arreglar-suplico
-no, ya no ambos tenemos a otras personas en nuestras vidas-lo dice como un lamento.
-¿Y sabe el que estás hablando conmigo?
-no-susurra
-si lo sabe, ¿Comenzará a pelear?
-posiblemente, pero no me importa, y dime ¿ella sabe que estas hablando conmigo?
- No, no creo que ella tenga idea, y si la tuviera no me importa, lo único que me importa eres tú.
-Edward-susurra débilmente
- Es muy lindo escuchar tu voz decir mi nombre-le digo dulcemente.
-ya me lo habías dicho-dice, me imagino una sonrisa en esos labios que me vuelven loco.
-es para que te quede claro-le susurro- no sabes como te amo.
-y yo a ti cariño
-se que es mas de media noche, y hace un poco de frio, pero te espero en el parque en media hora, es tiempo de remediar lo que hicimos, no puedo estar un minuto mas sin ti a mi lado.
-pero Edward…-
-si no vas, aunque me duela y me desangre por dentro, no me vuelvas a buscar-la amenazo, sabiendo que ni yo mismo podría cumplir no buscarla.
-esta bien, corre-me suplica-te amo- y termina la llamada.
Camino decidido hacia la recamara, tomo mis zapatos me los pongo con algo de prisa.
-amor, ¿A dónde vas?- me dice y por primera vez, su voz me irrita-¿con quien hablabas?
-con bella, y voy con ella, victoria, lo nuestro se termino-
Salgo sin mas de la casa, dejándola hay con la boca abierta, subo a mi volvo y arranco, manejo varias cuadras y llego al parque, lo dejo medio estacionado y corro a nuestra banca, hay ay una silueta, mi corazón se acelera, y de mis labios sale una sonrisa ladina, aquella que sabia que a ella le encanta, y la cual no hacia hace meses.