Tal vez no lo sepa todo y no sea capaz de inventar alguna maquina extraordinaria, tal vez no sea el más fuerte y valiente, tampoco soy el líder sin miedo y comprensivo, no, esos serian mis hermanos, yo simplemente soy su sombra, todos me conocen como Mickey, el sinvergüenza, el bufón, el aficionado por los comics y videojuegos que no se toma nada enserio, así es como me ven todos, casi siempre me siento como la pieza de más en un rompecabezas que no sirve para nada y va a parar bajo el sofá o en la basura, casi todas las noches lloro hasta que me vence el sueño y caigo a los brazos de Morfeo, hay veces que pasa por mi mente cuanto cambiaría la vida de mi familia si yo muriera y si nunca hubiera existido.
Pero, sin embargo, no puedo permitir que ellos conozcan mis pensamientos, secretos o esas voces en mi cabeza, ya que eso implicaría que me vieran diferente, y no quiero eso, por esa razón, durante años he llevado esta mascara: ser el niño bueno e inocente del que nadie sospecharía que está tan loco y deprimido. No importa si tengo que soportar a Ralphel burlándose de mi aparente estupidez y mi actitud infantil, no importa si tengo que soportar a Donatello criticando y gritándome cuando rompo algún invento suyo o cuando veo mis caricaturas, no importa si tengo que soportar a Leonardo sobreprotegiéndome y hablándome como si fuera un niño chiquito. Nada de eso importa, ya que, si ellos descubrieran mi verdadero yo, no volverían a hablarme y se alejarían de mí, no importa si tengo que estar más tiempo siendo la sombra de ellos, ya que es un bajo precio por estar con mi familia y hacerlos sonreír, pero…
Mi mascara….
No creo que soporte mucho más….
