Try (Vali Lucifer x Irina Shido)

Tienes que levantarte e intentar…

I

Disclaimer: Highschool DxD no me pertenece, cualquier parecido con la realidad, es con esa intención.


Where there is desire, there is gonna be a blame.

No es que le molestará que sus tías —como cada año— le preguntaran por el inexistente novio que tenía, era el simple hecho de que en efecto fantaseaba con tener uno. Y es que durante todo el semestre lo había observado desde lejos, y se veía tan, tan guapo que ella no podía hacer otra cosa que suspirar.

Miró aburrida la botella de cerveza que tenía a lado, no se sentía con especiales ganas de seguir tomando —además de que sentía pronto caería en cama por una faringitis—, así que la dejó a un lado y subió al techo de su casa. Sentía que con cada año que pasaba la emoción poner las festividades navideñas menguaba cada vez más en su familia y prueba de ello era que está vez únicamente habían cenado spaghetti carbonara, después se habían levantado todos de la mesa y habían ido directo a sus habitaciones, ¡Ni siquiera la habían regañado por estar pegada al celular viendo que hacían los miembros de BTS y de EXO!

Suspiró.

Quizá debería de bajar y dormir un poco a ver si en sus sueños Vali, el chico del cual su corazón había quedado prendado, le mandaba un mensaje todo lleno de romance diciéndole: "Quisiera pasar esta maravillosa noche contigo". Si claro, tal vez si solo se hubieran conocido un poco más, si tal vez los nervios no la hubieran traicionado no hubiera bebido de más, no solo le hubiera estirado los brazos y tampoco hubiera dicho: "¡Oh cielos estás tan caliente!" ¿Quien mierda coquetea así? Ella, solo ella.

—Solo a ti se te ocurre decir semejante burrada, Irina.

Tomó su teléfono y abrió WhatsApp. Oh está vez su foto de perfil era extraña —al menos para los estándares que siempre seguía—, estaba haciendo una cara extraña, ¡Rayos! Y ella que buscaba parecer medianamente normal en su foto a blanco y negro en medio de aquel jardín botánico al que fue con Asia y Kiryu.

Decidida a mantenerse tal y como lo había estado todo el año regresó a la pantalla de los chats, o no, por qué de pronto le saltó la ventana de llamada, soltó un gritito asustada y clickeó incesantemente el botón de colgar hasta que su bendito celular decidió hacerle caso.

Where there is a blame, someone's bound to get burned.

Con aburrimiento recorrió el bar con la mirada, no había ido a este evento tampoco, suspiró y tomó todo el mojito. Quizá hoy si iría a dormir temprano, había gastado lo último de su quincena yendo a ese lugar con el alcohol a sobreprecio. Tomó su chaqueta y con tranquilidad salió del lugar, tal vez debería de llamar un Uber.

A penas sacó el teléfono de su bolsillo este empezó a vibrar y en su pantalla apareció una chica —que ni siquiera recordaba tenía agendada.

—¿Aún sigues aquí?

Ignoró su teléfono al escuchar a una de las amigas más cercanas a la chica que realmente esperaba en aquellos fiesta.

—Ella no va a venir Vali.

—Pero viniste tú Sona. Mantengo la esperanza de que Ross lo haga.

—No entiendo cómo es que hacen eso, todo el maldito año han estado en un estira y afloja, vieron que definitivamente no funcionó y siguen intentándolo.

Masajeo el puente de su nariz y negó—. Sabes, me tengo que ir —y simplemente dio media vuelta y caminó, total ¿que tanto se podía perder en aquella ciudad de todos modos?

En definitiva no terminó perdido, pero si terminó en un solitario parque en medio de la ciudad. Quizá si estaba un poco ebrio, tal vez ir a beber con Issei antes no había sido muy buena idea, ¿Debería de llamar a Sairaorg para que lo recogiera? No, le iba a decir lo mismos que Sona y no tenía ganas de discutir, así que se recostó en una banca que estaba por allí y se puso a mirar el cielo.

But just because it burns, doesn't mean you're gonna die.

Estaba pensando si debería de subir un par de leños y hacer una fogata, también traer un poco de ponche y disfrutar de los fuegos artificiales que se veían a lo lejos.

Saltó y soltó un grito cuando su teléfono sonó de nuevo—. Mierda, mierda, mierda —y es que allí mismo Vali le estaba devolviendo la llamada—, entonces si llegó a su teléfono, y ahora qué hago, ¿Le contesto? No le contestó —respiró profundamente y deslizó el botón para contestar.

—Hola —oyó la titubeante voz de Vali.

—Ah~ ¿Hola? "quizá me debería de ganar un premio por lo estúpida de esa respuesta".

—¿Me llamaste?

—Si, digo no. Es decir… fue una equivocación, lo siento.

—Bueno, creí que sería algo más importante, nos vemos —pudo oír el tono de aburrimiento del chico.

—Alto…

—¿Si?

—En realidad, si hay algo que quiero decirte —suspiró y se hizo bolita donde estaba.

—Adelante —respondió él.

—Eh, verás, en realidad es algo que he querido decirte desde hace tiempo, pero… soy una cobarde, yo eh~ me gustas —cerró los ojos fuertemente, como si aquello fuera una especie de escudo. Solo podía escuchar la respiración del chico así que no había colgado—. No tiene sentido, lo sé. A penas y charlamos un par de veces.

—Sin contar lo que pasó en aquella reunión, claro —ella contuvo el aire, estaba segura que recordaba todo lo que había hecho aquella vez (que se cayó incluso), así que eso la tomó por sorpresa.

—La reunión dices…

—Si, tu eh, ¿No lo recuerdas?

—Recordar… si, todo —soltó titubeante.

—¿En serio recuerdas que te iba a besar pero tú dijiste "No, tengo novio"?

—Besar, wow, no yo… mierda —escuchó el bufido del chico—. Ni siquiera creo que él mereciera mi fidelidad entonces —sintió como las lágrimas recorrían sus mejillas.

—Todos merecemos fidelidad —escuchó que decía con enojo.

—Pues el creyó que yo no y fue a dedicarle canciones y estados bonitos a su jefa, con la que ya se casó por cierto, mientras que a mí me decía que le daba asco y yo no podía argumentar nada por que yo misma me doy asco —no pudo aguantar más y lloró, no le importaba que el chico le colgará, necesitaba soltar aquella palabras en voz alta.

—Tu no das asco —habló despues de que ella se calmó un poco—, movilizar a un paciente con incontinencia fecal para cambiarle el pañal si da asco —ella soltó una carcajada en medio del llanto.

—¿También te tocó un paciente así?

—Bueno, era el único chico en el servicio, así que me tocaban hacer "trabajos rudos" —ambos soltaron una carcajada—. Entonces estás libre ahora.

—Pues las únicas citas que he tenido son con la Nanda, el NIC y el NOC —el soltó una carcajada.

—No te he visto por la Facultad, imaginaba que ya habías exentado.

—Si, lo hice, pero aun no le atino al los diagnósticos y hago Planes de Cuidado de ejercicios que me encuentro por internet.

—Sabes, te podría ayudar con eso. Tal vez mañana.

Ella mordió un poco su labio—. Lo siento —dijo realmente apenada—, quedé con mis amigos de ir a la feria —oyó como el chico suspiraba.

—Bueno, nos vemos en otro momento. Cuídate —una sonrisa atravesó su rostro.

—Claro.

You gotta get up and try, and try, and try.


Notas del autor: ¿Y por qué termina así? Por qué así de pendeja soy en el amor, y esta historia surgió cuando reflexionaba sobre mi patética vida amorosa.

Se despide Queso. Paz. 🖖