Dolor, solo dolor es lo que sentía en ese momento, los recuerdo se amontonan en mi mente, tu voz, tu sonrisas y esos abrazos que aunque fueron pocos me daban la felicidad que necesitaba, a medida que pasan los segundo la angustia se adueña de mi cuerpo, siento voces que me reconfortan mas no las escucho, solo a ti puedo verte, acostada en tu descanso eterno, y poco a poco voy comprendiendo que mañana ya no estarás hay para darme un abraso cuando lo necesite, ya no estarás hay para poder abrasarte y decirte cuanto te quiero.
Las horas pasan, mas para mi no tienen importancia, las voces se han callado y me encuentro sola, o por lo menos yo me siento así, el dolor dentro de mi no merma, a cada minuto aumenta un poco mas, mientras los recuerdos se mezclan con la realidad tengo la esperanza de que todo sea un sueño, mas una parte de mi sabe que esto no es posible.
Se acercan a tu lado y empiezan a cerrar tu ataúd, ese que sera tu morada eterna, y mi control se pierde, empiezo a temblar como cuando era humana, mis músculos se tensan y mis ojos buscan emanar lagrimas que ya no tengo capacidad de emitir.
Los brazos de Edward me rodean, me dice palabras de consuelo, mas el dolor no merma, por mi cabeza pasan los recuerdos de nuestras peleas y me doy cuenta que no fui una buena hija, te pido perdón pero ya no estas hay para perdonar, estoy sola, y eso me duele
por que tuviste que irte, por que dios te quiso llevar, alguien dice la frase "hoy el cielo a ganado un ángel" mas yo no presto atención, mis ojos están fijos en tu ataúd, me acerco lentamente y paso mi mano por encima de el, quiero quedarme a su lado, no quiero irme de aquí, quiero poder llorar, sacar esta angustia que me carcome pero no puedo hacerlo.
Por primera vez desde que tengo mi inmortalidad, mis piernas se aflojan, empiezo a caer, pero por suerte Edward esta hay para levantarme, lo miro a los ojos y veo su preocupación, su dolor y su amor, vuelve a decirme palabras de apoyo pero mi vista se dirige nuevamente asta donde tu estas, me acerco de nuevo y vuelvo a rosar tu ataúd, entonces Edward se acerca y lentamente me separa de ti, lo sigo como un robot, mi mente de nuevo esta atormentada con recuerdo, recuerdos felices pero que en este momento duelen peor que cuando la ponzoña recorrió mi cuerpo al transformarme.
El tiempo paso, mas dentro de mi el dolor sigue latente, aunque sonrió, aunque intento ser la de antes ya no puedo, mi vida se convertido en una mascara, muestro mi sonrisa mientras que por dentro estoy llorando, las fuerzas poco a poco me abandonan y el único que me da fuerza para seguir es Edward, muchas veces me pregunto que seria de mi sin el, y la respuesta es simple, no viviría, encontraría al manera de morir.
Hoy vuelvo a visitar el sitio en donde tu cuerpo descansa, dejo una flor y te digo cuanto te amo mama, fuiste la mejor madre de este mundo y siempre te recordare.
Fuiste mi mejor amiga, mi madre, mi compañera, mi consejera y la mujer que sera mi ejemplo para el resto de mi existencia.
Esta historia esta basada en lo que me paso a principios de este año cuando perdí a mi mama, los personajes pertenecen a crepúsculo de Stephenie Meyer